lunes 6 de mayo de 2024

El regreso del Caballero Oscuro: Michael Keaton vuelve a surcar los cielos de Gotham

El actor de 71 años, cuya interpretación icónica cambió la percepción sobre cómo debe lucir un superhéroe en el cine y supo reflejar la dualidad inherente a la personalidad de Batman, vuelve a vestir el traje del Encapotado en la próxima película de DC Films, The Flash.
Michael Keaton vuelve a surcar los cielos de Gotham
Michael Keaton en su traje del Caballero Oscuro durante el rodaje de Batman de 1989. Crédito: Warner Bros. 

Hay una razón más que convincente para ver Flash, de Andy Muschietti,  cuando se estrene el 15 de junio, y es presenciar el regreso de Michael Keaton como Batman/Bruce Wayne. A pesar del paso del tiempo, Keaton no es solo un “encapotado ágil”, sino un actor lo suficientemente hábil como para aportar 30 años de continuidad emocional al papel. 

Flash contiene referencias directas a su tiempo en el traje de murciélago, incluida la invocación del tema musical icónico de Danny Elfman. Sin embargo, el Bruce de Keaton nunca siente que está navegando en el pasado; hay una frescura en su versión que contribuye a mantener animado el segundo acto de la película. 

El 13 de junio de 1989, el mundo quedó cautivado por una criatura de la noche. En aquel entonces, una estrategia de marketing desató una batmanía sin precedentes. La película ya era un éxito antes de su estreno, y su consagración final se dio con la taquilla en sí misma. En ese sentido, la productora Warner Bros. se vio obligada a realizar una gran campaña de publicidad ya que la cinta había enfrentado grandes problemas de producción y ya había sumado una buena cantidad de críticas negativas. 

Les seguidores del Caballero Oscuro no estaban del todo convencides cuando se anunció que el director sería Tim Burton, el excéntrico autor de Beetlejuice. Además, la elección de Michael Keaton, una estrella de comedia, para interpretar al multimillonario Bruce Wayne de día y al Encapotado de noche, tampoco fue bien recibida. Ni siquiera el estudio estaba completamente seguro de confiarle a Burton el timón de la película y, según el propio director, Warner esperó ver si Beetlejuice tenía éxito en taquilla antes de contratarlo oficialmente, aunque ya había sido parte de la producción.

Michael Keaton vuelve a surcar los cielos de Gotham
Michael Keaton y Jack Nicholson durante el rodaje de Batman 89. Crédito: Warner Bros. 

Por otro lado, la indignación de les fanátiques por la elección de Keaton alcanzó proporciones masivas. Warner recibió miles de cartas en protesta. Esto requería mucho más tiempo, energía y determinación de lo que se necesita en el mundo actual, donde les fans tienen la oportunidad de expresar su desaprobación y desacuerdo con un actor en las redes sociales cuando este asume el papel de un personaje querido. 

Por lo tanto, en vista de la situación, el estudio quería hacer todo lo posible para convencer a la audiencia de que la película de Burton estaría lejos de las críticas que se le había atribuido y la desaprobación prematura de la que gozaba. Y funcionó.

No solo Burton logró darle autenticidad a la oscuridad del Caballero de la Noche, sino que el frenesí del marketing alcanzó tal nivel que Batman se convirtió en la primera película en recaudar $100 millones de dólares en sus primeros diez días, convirtiéndose así en la más taquillera de la historia de Warner Bros. en ese momento. Además, fue la película de superhéroes con mayores ingresos en la industria hasta entonces.

Michael Keaton vuelve a surcar los cielos de Gotham
Batman en un fotograma de la película. Crédito: Warner Bros 

La interpretación de Michael Keaton refleja la contradicción inherente a la personalidad de Batman

Michael Keaton recibió grandes elogios por darle al personaje un carácter angustiado y provocador. Su actuación y apariencia lograron cambiar la percepción del público sobre cómo debería lucir y actuar un superhéroe en el cine, allanando así el camino para futuras elecciones de reparto inusuales como Tobey Maguire (Spider-Man), Mark Ruffalo (Hulk) y Robert Downey Jr. (Iron Man).

Keaton hizo que fuera completamente aceptable que un superhéroe tuviera una apariencia y constitución física atípicas, así como rasgos de personalidad torpes y distantes, como resultado visible de un trauma infantil. En palabras de Burton: «Consideré a algunos actores de mandíbula cuadrada muy buenos, pero no podía imaginarlos vistiendo el traje de Batman. Miras a Michael y ves muchas cosas sucediendo en su interior». 

Esto hizo que la dualidad Bruce Wayne/Batman sobresaliera aún más, remarcando los lados aparentemente opuestos pero coexistentes de la personalidad del personaje. Como Bruce Wayne, podría pasar desapercibido si no fuera por su estatus de multimillonario, pero como Batman, emana fuerza y determinación, además de demostrar habilidades muy particulares, que indican que esta persona/murciélago no debe ser desafiada, y mucho menos pasada por alto.

Es precisamente esta dualidad la que hace plausible que Wayne tenga que recurrir a ponerse un traje y acechar como un murciélago humano con el propósito de buscar criminales y así satisfacer sus impulsos de vigilante, con la esperanza subconsciente de que tal curso de acción facilite la resolución de su trauma no sanado. 

Películas posteriores se centraron en Batman como la personalidad que se oculta detrás de la máscara de Bruce Wayne, pero en la cinta de Burton, Bruce es quien manda y Batman es una manifestación del gemelo interior altamente funcional de un hombre atormentado. Y eso es lo que hace que la interpretación de Keaton sea tan visceral y cautivadora. 

La razón por la cual las audiencias se sienten atraídas por los superhéroes es porque, como personas, somos profundamente imperfectes y, por lo tanto, identificables. Si logramos establecer una conexión con las peculiaridades y conflictos internos del héroe, lo cual hacemos porque reflejan peculiaridades y conflictos propios, entonces también podemos relacionarnos con el alter ego del héroe y proyectar en él todas las características positivamente percibidas, que a menudo negamos en nosotres mismes, y tal vez inspirarnos para comenzar a recuperar esas características al darnos cuenta de que también podemos ser poderoses y heroiques por derecho propio.

Michael Keaton vuelve a surcar los cielos de Gotham
La estética de Burton dio uno de los mejores batmobile del cine. Crédito: Warner Bros. 

Batman 89 también le da una historia de origen a Joker

En la versión de Batman de Tim Burton,  el proceso de transformación del Joker sigue una ruta ligeramente diferente. Encarnado por Jack Nicholson, el Joker es un villano que fue creado por Batman. Solo después de que Batman interfiere, el personaje Jack Napier sufre un trauma que finalmente lo convierte en el Joker. 

A diferencia de Bruce, él no está “dividido” y resignado a vivir una doble vida, sino que se convierte en una versión completamente integrada de su verdadero yo, o, mejor aún, en una encarnación altamente acentuada del potencial destructivo de Jack. 

Previo a su transformación, Jack era un mero individuo. No obstante, se trataba de una persona impulsada por sus emociones y con habilidades destacadas en el ámbito artístico. Tras renacer como el “Príncipe Payaso del Crimen”, abraza por completo tanto su impulso emocional exagerado, como sus inclinaciones artísticas, empleando la destrucción como una manifestación artística en sí misma. Desencadena el caos en Ciudad Gótica y en sus habitantes, interpretando cada acto como una performance artística, auto proclamándose “el primer artista homicida plenamente funcional del mundo”.

Tal como Batman, sus acciones están impulsadas por un dolor basado en la venganza. Sin embargo, a diferencia de este, él se fusiona completamente con su álter ego, dejando en claro para Bruce Wayne lo frágil que es la línea que separa al héroe del villano y lo cercano que podría estar Wayne de traspasarla. Si no fuera por la actuación llamativa y psicótica de Nicholson, es cuestionable cómo se habrían traducido todas estas sutilezas. Aunque el actor fue la primera opción para interpretar al icónico villano,  Willem Dafoe, David Bowie, Robert De Niro y Brad Dourif también fueron tenidos en cuenta.

El Bruce Wayne/Batman de Michael Keaton es uno de los Encapotados que aparecen en The Flash. Fuente: DC

El sello de Burton y el Batman más icónico

Burton no es ajeno a innovar, incluso cuando las probabilidades parecen estar en su contra. La idea de que un director artístico con un punto de vista muy específico y solo dos películas de largometraje en su haber se hiciera cargo de la historia de uno de los superhéroes más queridos del mundo era, en ese momento, aún más extraño que Burton mismo. Pero el director sentía un amor por el personaje muy grande y tenía el deseo de hacer algo completamente diferente con él. Y así lo hizo. 

En términos de imágenes, la visión de Burton sobre Batman sigue siendo fiel a los cómics, en particular a El regreso del Caballero Oscuro de Frank Miller y La broma asesina de Alan Moore, lo que empoderó a directores como Matthew Vaughn (X-Men), Christopher Nolan (con la trilogía The Dark Knight), Zack Snyder (Watchmen, Man of Steel, Batman vs. Superman, Justice League) y  Matt Reeves (The Batman) a hacer lo mismo más adelante. 

A diferencia del mundo realista de las películas anteriores de Superman, la Gotham de Burton se creó como un universo propio y matizado, una asombrosa combinación de estética noir-steampunk y arquitectura gótica que le significó el único premio de la  Academia de la película.

El rodaje comenzó el 17 de octubre de 1988 y terminó en menos de tres meses. Pero el proceso de gestación duró diez años. Después de finalmente obtener los derechos de Batman en 1979, el productor ejecutivo Michael Uslan logró que Warner y el guionista Tom Mankiewicz se unieran al proyecto. 

El guion original de Mankiewicz incluía no solo al Joker, sino también al Pingüino, el jefe del crimen Rupert Thorne, un énfasis mayor en la historia de origen de Bruce Wayne y la aparición de Robin. Aunque el guion fue rechazado eventualmente, algunos de sus elementos se pueden encontrar en Batman Returns (Tim Burton, 1992). 

Antes de que se considerara a Burton, se pensó en otres directores, especialmente a Ivan Reitman (Ghostbusters) y Joe Dante (Gremlins). Luego, Burton le pidió a Sam Hamm que escribiera el guion, una oferta que este fanático de los cómics no pudo rechazar. Fue entonces cuando comenzó a emerger un enfoque nuevo y más oscuro para la caracterización. 

Versión remasterizada del tráiler de Batman 89. Fuente DC

Aun así, a veces tenían desacuerdos, principalmente debido a algunas ideas que Burton quería implementar y a las que Hamm dudaba en aceptar. Debido a su desviación del canon del cómic, el giro de la trama de la película en el que se revela cuándo y cómo Batman y el Joker se cruzaron por primera vez todavía es rechazado por muchos fans.

Aunque gran parte de la película finalmente se basó en el guión, este sufrió numerosas reescrituras. Otro ejemplo de no mantenerse fiel a él se encuentra en una escena al comienzo de la película, cuando Batman dice una de las frases más icónicas en la historia del cine de superhéroes mientras amenaza con arrojar a un criminal desde un techo. La línea “Soy Batman”, que resuena fuerte en la cultura pop, no estaba en el original. La línea “Soy la noche” era lo que se suponía que diría Keaton, pero el actor decidió improvisar para que fuera simple y eficiente. Y lo fue. 

En retrospectiva, parece que las estrellas tenían que alinearse de todas las formas posibles para que el Batman de Burton resultara exactamente como lo hizo, dejando a su paso un legado abrumador y al mismo tiempo incomprensible. Pero lo que Burton no reconoce es que su versión oscura y psicológicamente compleja del Caballero Oscuro fue la que dio impulso a lo que pronto se convertiría en el género de películas de superhéroes. Sin dudas, el Batman interpretado por Keaton era notablemente distinto. Y, al final, eso demostró marcar toda la diferencia.

Se podrá ver la nueva interpretación de Michael Keaton como Batman cuando The Flash llegue a los cines el 15 de junio. Mientras tanto, las películas Batman y Batman Returns de Tim Burton se encuentran disponibles en la plataforma de streaming paga HBO Max.

Compartir:

Nota al Pie es un joven medio alternativo y autogestivo. Precisamos tu aporte para sostener el día a día de un periodismo popular que encuentra cada día más dificultades para mantenerse independiente. Con tu suscripción mensual nos ayudás muchísimo. Podés cancelarla cuando quieras. Por mail te iremos informando de los beneficios de ser parte de Nota al Pie.
¡Muchas Gracias!

Notas Relacionadas

Seguir Leyendo

El desánimo es el principal aliado de Milei: ¿cómo enfrentarlo?

Miles de argentinas y argentinos transitamos la lenta aceptación de que lo imposible sucedió. El monstruo salió de debajo de la cama, es real y nos sumió en la paralización. Contemplemos algunas pistas para salir de este estado de estupor.

Reconfirmó su corona: Evelin Bermúdez defendió sin problema sus títulos mundiales

La boxeadora santafecina venció este sábado, en el Luna Park, a la mexicana Jessica Basulto. De este modo retuvo los cinturones FIB y OMB del peso mini mosca. Nota al Pie repasa los principales momentos de otra gran noche de boxeo.

El  teatro Picadero se pone de fiesta con la comedia musical “Forever Young”

En su 12º temporada, la exitosa obra, cargada de humor y canciones, estrena función el lunes 6 de mayo. Es un canto a la vida e invita a envejecer con alegría. Antes del debut, Nota al Pie, dialogó con Andrea Lovera, sobre su papel

Ultimas Noticias

Más del autor

Nota al Pie | Noticias en contexto