Según un relevamiento realizado por el Índice Barrial de Precios (IBP), la canasta navideña vale hasta un 52% más que en el año 2020. Un informe publicado por el Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (ISEPCI), dio a conocer cuánto cuesta la cena navideña para una familia de dos adultes y dos niñes.
En dicha publicación se habla de una cena navideña compuesta de 22 productos para una familia, que cuesta como mínimo $3.089, si eligen comer pollo; y $4.224 si eligen comer carne.
Isaac Rudnik, el director del ISEPCI, explicó a Nota al Pie el impactó de estos números en el bolsillo de les trabajadores. Los números preocupan ya que las dos cenas (navideña y de fin de año) cuestan un cuarto del salario mínimo vital y móvil.
Cena navideña con un alto costo para les trabajadores
“Para las familias cuyo jefe o jefa de hogar cobra un sueldo mínimo un aumento del 52% en el valor de una comida en Navidad o de fin de año muy austera”, explicó Rudnik. De esta forma para les trabajadores, “significa una enorme dificultad, ya que si destinan ese monto -$4253 si deciden comer asado- para la cena de un sólo día, van a tener que reducir los recursos destinados a alimentos el resto del mes”, agregó.
Aunque el precio del pollo incrementó a lo largo de todo el 2021, sigue siendo la opción más barata a la hora de elegir qué comer. “Si sumamos el precio de los productos para las cenas de Navidad y año nuevo, la misma familia de dos adultos y dos hijos/as debería gastar en solo dos comidas un cuarto del sueldo mensual, lo cual agudiza mucho el problema”, sentenció el director del ISEPCI.
El total de las dos cenas tiene un costo de $7.353 que, comparado con un sueldo mínimo vital y móvil ($32.000 en diciembre), significa un cuarto del total de sus ingresos mensuales.
El asado un 74% más caro
El aumento de precios recae en los sectores que menos tienen. Entre los productos que más aumentaron se encuentra la carne a un 74% más caro que el año pasado. Esta situación hace que las tradicionales cenas navideñas se reemplacen por otras opciones.
“Entre los productos que más aumentaron se encuentran algunas frutas como los duraznos (+80%), peras (+50%); asado (+74%); pan dulce(92,3%), sidra (66,66%), ananá fizz (85%)”, dijo Isaac.
Este aumento de precios impacta negativamente en los sectores populares ya que obliga a elegir las opciones menos saludables para las familias. “El aumento de los alimentos que contienen nutrientes indispensables como carnes y frutas, impulsa a reemplazarlos por otros que «llenan la panza» ricos en carbohidratos y grasas”.
Ante esta realidad, Rudnik concluye que “los incrementos de sueldos otorgados a lo largo del año no compensan los aumentos de precios de los alimentos básicos”. Es así que queda en evidencia el deterioro de los ingresos de los sectores populares que deben elegir una menor calidad alimentaria.