La Justicia argentina detuvo los intentos del Gobierno nacional de criminalizar a cultivadores de cannabis. La sala II de la Cámara Federal de Casación absolvió a siete personas que habían sido acusadas por ofrecer semillas con fines terapéuticos.
De esta forma, los jueces Alejandro Slokar y Ángela Ledesma determinaron, en un extenso fallo de más de 80 páginas, que la oferta y venta por internet de semillas de cannabis no se considera un delito cuando se deben a fines terapéuticos.
A principios de abril, se suspendieron los nuevos cultivos de cannabis por seis meses a través de una Resolución 81/2024 publicada en el Boletín Oficial. Luego, el vocero presidencial, Manuel Adorni, anunció que se comenzarían a revisar los requisitos para la inscripción en el Registro del Programa de Cannabis (REPROCANN) debido a algunas “irregularidades”.
Sin embargo, el anuncio de las restricciones por parte de Adorni, una vez más desconectado de la realidad, no solo afecta a les pacientes, sino que también supone un impacto negativo en la salud y el bienestar de las personas que requieren su uso medicinal a diario.
¿Qué dice el fallo de Casación?
El fallo del tribunal se basó en las normativas vigentes, como la Ley 27.350, que aborda el “Uso medicinal de la planta de cannabis y sus derivados”; y la Ley 27.669, que establece el marco regulatorio para el “Desarrollo de la industria del cannabis medicinal y el cáñamo industrial”, las cuales determinan el uso de cannabis medicinal en Argentina.
En efecto, tras la investigación tanto Slokar como Ledesma absolvieron a Alfredo Gerardo Ursic, Alejandro Ariel Muñoz, Mónica Andrea Fauez, Omar Iván González, Guillermo Patricio Sánchez, Luis Carlos Sánchez y Maximiliano Alberto Sánchez, quienes llevaban más de cuatro años en prisión por el delito de “tráfico de estupefacientes”.
De acuerdo al documento, la acusación que se les imputaba era por “tráfico de estupefacientes, en su modalidad de tenencia con fines de comercialización y comercio con plantas o semillas, utilizables para producir estupefacientes, agravado por la intervención de tres o más personas en forma organizada”, cuyas penas iban de seis años a cuatros meses.
Los siete absueltos ofrecieron un blíster con tres semillas de cannabis a través de diversas páginas de internet, dejando claro que eran para uso medicinal. De este modo, proporcionaban tratamiento para enfermedades como la leucemia, la epilepsia y otras formas de cáncer.
En este sentido, el fallo sostiene: “Esta diferenciación entre la venta de semillas en el caso para el autocultivo orientada a pacientes y la dinámica característica del comercio general de estupefacientes, se destaca del informe de la propia Gendarmería Nacional en cuanto nítidamente plasmó que los ‘grupos que se autodenominan autocultivadores de cannabis’ promueven las supuestas bondades medicinales del uso del cannabis y sus derivados para el tratamiento de diferentes afecciones como la epilepsia, la leucemia y algunos cánceres; basándose que el aceite de cannabis, si bien no es una cura para estos males, sí sería un paliativo”.
Asimismo, el juez Slokar llevó a cabo un análisis exhaustivo de las legislaciones vigentes, los decretos reglamentarios, así como las resoluciones del Ministerio de Salud y del Instituto Nacional de Semillas (INASE). En conjunto, regulan el acceso al cannabis para aquellas personas que lo necesiten en sus tratamientos a través del REPROCANN.
La importancia de la regulación del cannabis
Además de defender el derecho a la salud, desde la Casación dedicaron un párrafo a respaldar el REPROCANN, que fue cuestionado por Adorni. También señalaron que su importancia es tal que logró “clausurar una etapa en la que a pesar del reconocimiento legal del uso de cannabis en favor de la salud, las personas usuarias no tenían acceso regular ni a semillas, ni a plantas, ni a productos nacionales habilitados”.
Por último, los camaristas subrayaron la importancia de la regulación a través del INASE para producir, difundir, manejar e importar dichos productos. Esto ocurre en un contexto en el que se están revisando las licencias y se suspendieron nuevos registros.