Se suspendió (momentáneamente) el segundo juicio al ex delantero de Boca, Sebastián Villa, por violencia de género. Se trata de la causa que se inició tras la denuncia de Tamara Doldán por un abuso sexual cometido a mediados de 2021.
Ya lo había confirmado a fines de marzo la auxiliar letrada del Tribunal Oral en lo Criminal N°4 de Lomas de Zamora, Claudia Randich. El proceso judicial iba a comenzar el 1 de abril, pero se interrumpió ante requerimientos que plantearon tanto la defensa como los representantes de la denunciante.
Roberto Castillo, abogado de Doldán, pidió resolver la situación con una «reparación integral del daño», es decir, un acuerdo económico entre las partes. La jueza Lidia Moro y el fiscal Hugo Carrión se opusieron; y ahora el letrado solicitó su recusación (es decir, que se aparte de la causa a les magistrades).
Mientras tanto, Sebastián Villa se encuentra en Bulgaria, donde juega para el equipo Beroa. Cuenta con una condena de dos años y un mes de prisión por violencia de género contra su expareja, Daniela Cortes.Desde que salieron a la luz, las acciones del ex jugador de Boca tuvieron una gran repercusión mediática. A su vez, por estos meses, 4 futbolistas de Vélez también recibieron denuncias por abuso sexual. Las situaciones de violencia de género comienzan a salir a la luz y a ser castigadas, tanto en el ámbito deportivo como en otras áreas con figuras públicas.
La revictimización en el centro de la escena
El segundo juicio a Sebastián Villa por violencia de género se encuentra en pausa. Su denunciante, Tamara Doldán, alegó a través de su abogado que llegar a un acuerdo económico con el colombiano sería reparador para las consecuencias que generó el proceso en su vida.
Explicó que tras el brutal ataque perdió trabajos, no tuvo un domicilio fijo ni pudo convivir con su hijo, y sufrió reiteradas crisis de ansiedad y de angustia. Lo hizo en una audiencia realizada en los Tribunales de Lomas de Zamora.
La mujer no quiere revivir lo sucedido, ni que se ventilen cuestiones íntimas en el juicio. La jueza Lidia Moro no está de acuerdo y manifestó su intención de comenzar el proceso judicial. Por su parte, el fiscal Hugo Carrión aseguró que no podría suspenderse el juicio por tratarse de un delito grave y de acción pública.
Tras el pedido de recusación por parte de Castillo, la Cámara Penal de Lomas de Zamora debe definir si cambia a la jueza y al fiscal a cargo del proceso. De continuar el juicio, ¿se produciría una revictimización de Doldán?
La Ley n°26485, de prevención de la violencia con motivos de género, define qué prácticas se consideran revictimización. Entre ellas, incorpora “el sometimiento de la mujer agredida” a “realizar declaraciones reiteradas”; también a “ser objeto de exámenes médicos repetidos, superfluos o excesivos”.
En este caso, les magistrades aseguran que el testimonio de la víctima es fundamental para sostener la acusación. Lo cierto es que ella declaró por escrito cuando realizó la denuncia, el 13 de mayo del 2022 en la Fiscalía N° 3 de Esteban Echeverría, y lo ratificó a los tres días. Además, según indicó su abogado, fue sometida a dos pericias vinculadas al expediente.
Lo que suceda será motivo de debate. ¿Se priorizará la escucha activa al deseo de Doldán? De ser así, ¿quedaría libre de someterse a la justicia el ex jugador de Boca Sebastián Villa? Cabe recordar que, de ser condenado en este juicio, podría enfrentarse a una pena de 15 años de prisión.
Los casos de acoso que salen a la luz
A principios de marzo, el club Vélez Sarfield estuvo en boca de todes por otra acusación de abuso sexual. Una joven tucumana denunció a los jugadores Sebastián Sosa, Braian Cufré, Abiel Osorio y José Florentín por ese delito.
Luego de que comenzó la investigación, se imputó a Florentín y Cufré por abuso sexual con acceso carnal agravado por dos o más personas; a Osorio por abuso sexual simple y a Sebastián Sosa como partícipe secundario.
Los tres primeros cumplen arresto domiciliario con tobillera electrónica, situación que podría mantenerse hasta el juicio oral y público que aún no tiene fecha. Sebastián Sosa espera el veredicto en libertad condicional, tras pagar una fianza de $50 millones, con la obligación de presentarse cada 15 días en Tucumán y no poder salir del país por 90 días.
Mientras tanto, Braian Cufré recibió una nueva acusación de otra mujer por el mismo delito, cometido en 2017. Además, en la causa también fue denunciado Fabricio Oscar Alvarenga, ex futbolista de Vélez que actualmente juega como delantero en un equipo de la liga ucraniana.
Otra denuncia de similares características fue la que hizo la ex jefa de prensa del fútbol femenino de Boca, Florencia Marco, contra el ex DT de ese equipo, Jorge Martínez. Esta semana, el hombre fue condenado a un año de prisión por abuso sexual simple.Durante la lectura del veredicto, se ordenó evaluar “la posible comisión del delito de falso testimonio por parte de Jorge Hernán Bermúdez Morales y Marcelo Alejandro Delgado”. Ambos son exfutbolistas que forman parte de la dirigencia del club que preside Juan Román Riquelme.
Los protocolos de género en los clubes
El avance de políticas contra la violencia de género en la sociedad y la lucha feminista permiten que situaciones que antes se callaban, ahora salgan a la luz. Pero, ¿cuál es la respuesta institucional ante estos casos?
Boca Juniors aprobó su Protocolo de Prevención y Acción Institucional para casos de discriminación, acoso y violencia por razones de género y orientación sexual en 2021. Sin embargo, con el caso de Sebastián Villa la actuación del club dejó mucho que desear.
Recién cuando el ex jugador fue declarado culpable de los delitos de “amenazas coactivas en concurso real con lesiones leves agravadas por el vínculo en contexto de violencia de género” en junio de 2023, la dirigencia de Boca decidió separarlo del plantel. Ya no volvió a jugar a pesar de tener contrato hasta fines de 2024.
Vélez en cambio fue la primera institución en proponer un protocolo en 2018. Abarca situaciones de violencia de género, discriminación, hostigamiento, acoso y abuso sexual, y se aplica para todas las personas que participen y transiten el club.
En 2020, incorporó una cláusula por comportamiento o violencia de género en todos los contratos. Si el jugador no cumplía los lineamientos del estatuto social de la institución o el Protocolo de Violencia de Género podría ser sancionado con la rescisión del contrato.
Este año, ante la denuncia a 4 de sus futbolistas por abuso sexual, Vélez Sarfield emitió un comunicado. «Ante la gravedad de la denuncia, la Comisión Directiva del Club Atlético Vélez Sarsfield se puso inmediatamente a disposición de la Justicia de Tucumán para aportar toda la información y los elementos relevantes para poder contribuir a la investigación y esclarecimiento del caso y determinar las responsabilidades correspondientes».
El comunicado también decía: «En el marco del protocolo de actuación en casos de violencia por motivos de género de la Institución, se informa que se ha decidido separar de manera preventiva del plantel profesional a los jugadores mencionados en la denuncia”.