Especialistas del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) publicaron un trabajo donde describen el vínculo entre las condiciones de hacinamiento y los casos graves de bronquiolitis. Para llevarlo a cabo, analizaron la frecuencia de hospitalizaciones de lactantes menores de un año con bronquiolitis en la ciudad de Puerto Madryn. Esto se realizó teniendo en cuenta la distribución espacial, es decir, dónde vivían, junto a indicadores socioeconómicos. El estudio fue publicado en la revista American Journal of Human Biology.
La investigación se llevó a cabo en el Instituto Patagónico de Ciencias Sociales y Humanas “Dra. María Florencia del Castillo Bernal” (IPCSH, CONICET). Fue realizado por les especialistas Virginia Ramallo, Soledad de Azevedo y Rolando González-José, y los becarios Bruno Pazos y Arturo Morales. También, por el investigador Damián Taire, médico neumonólogo infantil del hospital zonal “Dr. Andrés Isola”. Todes, además, integran el Grupo de Investigación en Biología Evolutiva Humana (GIBEH).
Durante 2017 se recolectaron datos de 120 pacientes hospitalizados menores de un año con diagnóstico de bronquiolitis aguda y que requirieron oxigenoterapia. Luego, hicieron un cruce de datos con información provista por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), en relación al indicador NBI 3, para saber cómo vivían las familias.
Se trata de “Hogares con Necesidades Básicas Insatisfechas, variable hacinamiento”. Esto les permitió entender las condiciones de las viviendas de les pacientes, como la sobrepoblación o hacinamiento, y su relación con la bronquiolitis.
Del estudio se determinó que de les lactantes hospitalizades, el 83,33 % vive en áreas identificadas con NBI 3. Nota al Pie dialogó con la antropóloga e investigadora Virginia Ramallo para conocer más detalles sobre estos resultados. Junto con les investigadores que participaron del estudio, integra el Programa de Referencia y Biobanco Genómico de la Población Argentina (PoblAr), del Ministerio de Ciencia Tecnología e Innovación (MINCyT).
🔵Especialistas del CONICET establecen vínculo entre condiciones de hacinamiento y frecuencia de internaciones por bronquiolitis en una ciudad de Chubut.
— CONICET Dialoga (@CONICETDialoga) August 7, 2023
✍️El trabajo fue publicado en la revista American Journal of Human Biology.#CienciaArgentina https://t.co/OtM8tmZFbT
Las complicaciones de las bronquiolitis
La bronquiolitis es la inflamación del sistema bronquial en los pulmones. En caso de agravarse puede requerir internación y asistencia de oxígeno. La dra. Ramallo explicó que es la principal causa de infección respiratoria aguda baja en menores de un año. Afecta principalmente a niñes entre los 3 y 5 meses de edad y predomina en los meses de otoño e invierno. El virus sincicial respiratorio es el agente más frecuente.
Quienes poseen su cronograma de vacunación completo y sin factores de riesgo cursan las infecciones por este virus respiratorio sin grandes complicaciones. “Pero en los niños menores de 1 año que aún no han completado su calendario de vacunación, la infección puede empeorar y derivar en bronquiolitis”, indicó la investigadora. Por eso, destacó la importancia de la lactancia materna ya que aporta una cantidad de defensas importantes cuando les bebés están creciendo.
Créditos: Virginia Ramallo
Además, ha habido casos en los que les menores fueron readmitides por el hospital al poco tiempo. “Llama la atención porque indica que la posibilidad de recuperación de la patología está condicionada por más de un aspecto”, agregó.
La relación entre el hacinamiento y la bronquiolitis
El hacinamiento se define como el que sucede en aquellos hogares donde duermen tres o más personas en la misma habitación. Como consecuencia, aumenta el riesgo de contagio de virus respiratorios.
Además, “vimos que la frecuencia de los hogares con condiciones de hacinamiento están también localizados en barrios que tienen otras necesidades básicas insatisfechas. Por ejemplo, tienen un acceso deficitario a servicios públicos”, afirmó la investigadora.
Créditos: Virginia Ramallo
En Puerto Madryn, una localidad costera de Chubut, los períodos invernales son más prolongados. En ese sentido, la posibilidad de estar expuestes a este virus es más larga en el tiempo y puede perjudicar a mayor cantidad de personas. “Acá hace mucho frío durante un tiempo prolongado. Los hogares tienden a estar cerrados, poco ventilados”, describió. Esto aumenta las chances de que si alguien porta el virus de forma asintomática, contagie a otro individuo susceptible.
“Estas viviendas en condiciones de hacinamiento también tienen muchos déficit estructurales, con construcciones ineficaces para enfrentar el frío. Tienen un sistema de calefacción a base de combustión, en general a través de leña, que generan partículas en suspensión”, amplió. Si a esto se le suma el tabaco, puede contribuir a que les menores de un año progresen más rápidamente a condiciones graves que requieran de la internación.
“Nuestro interés es estudiar la compleja interacción entre componentes genéticos que predisponen a padecer ciertas enfermedades y las condiciones ambientales donde las poblaciones viven. También las condiciones materiales que pueden influir en los procesos de salud y enfermedad, para para dar una respuesta a los problemas que son locales y tienen características locales”, concluyó.