Septiembre es sin duda un mes especial para muches “totales”. Sobre todo, porque en este tiempo recuerdan al emblema del rock nacional, Gustavo Adrián Cerati. Un 4 de septiembre del 2014 dejó este plano terrenal, pero su “magia” continúa más viva que nunca.
Es por ello que la banda sinfónica argentina Música para Volar rendirá un merecido homenaje con dos presentaciones con coro y música instrumental. En primera instancia, la agrupación rosarina se presentará hoy a las 21:30 h. en el Teatro Metro (Calle 4 entre 51 y 53) de La Plata, Provincia de Buenos Aires.
Por otra parte, realizará su segundo show mañana 10 de septiembre en el Auditorio de Belgrano (Cabildo y Virrey Loreto) en la Ciudad de Buenos Aires desde las 21:00 h. Las entradas pueden adquirirse en boletería o ingresando al sitio oficial del grupo.
En las distintas presentaciones recorrerán temas de Cerati, desde sus inicios en Soda Stereo (conformado también por Charly Alberti y Zeta Bosio) hasta los discos de su etapa como solista.
“Música para Volar” está integrado por artistas nacidos en el Sur de la Provincia de Santa Fe. Estos son: José Matteuci en batería y voz; Alexis Thompson en guitarra; Julieta Sciasci en bajo y voz; y Bruno Moreno en piano, quien además realiza los arreglos para orquesta y coro.
Les músiques suelen realizar con mucho éxito giras por Argentina, Chile, Paraguay y Uruguay. Llevan con sí espectáculos sinfónicos, de cámara y electrónicos, en los que ofrecen también repertorios de Charly García y Luis Alberto Spinetta.
Un homenaje a la música ligera de Cerati
“La figura de Cerati es importante para toda nuestra cultura musical y en el corazón de la gente está muy presente. En nuestro espectáculo no ronda tanto su figura como si su obra”, comentó Bruno Moreno. El músico agregó que el espíritu de la propuesta es poner a la música en el lugar de protagonista con canciones maravillosas.
Respecto al recital, que tendrá una duración de dos horas, anticipó que elles tendrán como objetivo comunicarse con les espectadores a través del recorrido musical. En definitiva, “que se reciba así como: Che, acá está nuestra obra. Podemos volver a escucharla una y otra vez y es tan buena, tan noble, que admite un montón de versiones”.
Un repertorio a la carta
La agrupación suele ofrecer todo su repertorio en el arte escénico y musical que son parte de la cultura del rock latinoamericano. Ingresando a la página oficial de Música para Volar, la audiencia seleccionará arreglos sinfónicos, versiones acústicas o eléctricas. Las escogidas serán ejecutadas por más de 50 músicos en escena, incluyendo orquesta sinfónica y un coro.
“Esto surgió porque nos dimos cuenta que teníamos tanto repertorio acumulado que podíamos elegir y hacer un montón de espectáculos distintos. Entonces pusimos a disposición todos nuestros arreglos, eran arriba de sesenta y pico”, manifestó el arreglista.
Acotó de que en el proceso de las canciones más votadas “nosotros hemos hecho una selección y configuramos una lista bastante variada, potente y realmente recorre distintas épocas y estéticas muy distintas; porque Gustavo tiene desde rock reminiscencias al folklore argentino, New Wave, en la temática de sus letras fue amplio”.
Mezclando audiovisual con lo musical
En el show también habrá imágenes a cargo del realizador, Hernán Roperto, además dirigirá una serie de cámaras sobre el escenario para proyectar detalles del líder de Soda Stereo. El iluminador es Fernando “Moderno” Burgo, en tanto el equipo de sonido está integrado por Ernesto Aldaz y Francisco Matteucci.
“Lo bueno es que trabajamos en equipo con ellos, siempre tratamos de que los shows tengan un concepto, una unidad también a ese nivel, sea una experiencia integral. Nuestra ejecución y el trabajo técnico está puesto al servicio de eso, vivenciar la música de una manera que nosotros queremos expresar”.
El pianista reafirmó que los conciertos “son todos distintos, por más que se toque una misma lista o no. No depende de cual tema y en qué orden, sino de lo que está pasando en ese aquí y ahora con los músicos”.
Por otra parte, aseveró que la música es un arte temporal. “Lo mejor que podemos intentar es que el público ingrese en ese viaje, vuele por decirlo así para hacer un guiño de nuestro nombre, es nuestra humilde misión”, concluyó.