A 12 días de iniciado el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, la guerra no solo se libra en el territorio sino también en el ámbito informativo. El presidente ruso, Vladimir Putin, en sus dos décadas de mandato no sólo acumuló poder militar sino también mediático.
Uno de sus instrumentos comunicacionales más importantes es la cadena internacional de noticias Russia Today (RT). Se trata de una señal estatal fundada en el año 2005 que actualmente posee estudios y corresponsales en varias partes del mundo. El canal transmite las 24 horas, en varios idiomas, entre ellos el español.
Como respuesta a la invasión a Ucrania, varios países del mundo tomaron la decisión de cancelar en sus territorios las emisiones de la cadena de noticias. Se trata de una medida que tiene por objeto ejercer presión para convocar a las negociaciones que deriven en la suspensión de los ataques militares que han dejado a miles de civiles muertos. También, la iniciativa busca reducir la influencia de Rusia en la guerra comunicacional.
La Unión Europea
La semana pasada, los países de la Unión Europea decidieron suspender las emisiones en Europa de la agencia rusa Sputnik y el canal de televisión Russia Today (RT). El argumento presentado se basa en que, en plena invasión de Ucrania, esos medios son instrumentos de desinformación del presidente ruso, Vladimir Putin. El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell Fontelles, se refirió al canal como un instrumento para “la manipulación sistemática de la información por parte del Kremlin”. Además agregó que “es aplicado como un instrumento más en el asalto a Ucrania”. El funcionario advirtió: “El medio de comunicación supone una amenaza directa al orden público y la seguridad de la Unión”.
Situación en Argentina
En Argentina, Russia Today transmite desde el año 2014 su señal en la Televisión Digital Abierta. La diputada del PRO, Laura Rodríguez Machado, presentó la semana pasada un proyecto de resolución para dar de baja el convenio que habilita esa transmisión. La legisladora argumentó que permitir a Russia Today difundir las acciones llevadas adelante por Putin “contradice los principios de derechos humanos que caracterizan a Argentina”. También advirtió que “Putin está avanzando sobre los países libres del mundo como en los momentos más oscuros de la historia. Permitir que esto se transmita con recursos del Estado, como es TDA, resulta inadmisible”.
Rusia Today en Uruguay
Uruguay ya procedió a dar de baja la señal Russia Today. La medida fue anunciada por el presidente de la Empresa Estatal de Telecomunicaciones del país, Gabriel Gurmendez. El funcionario expresó en su cuenta de Twitter: “Acabamos de instruir que se suspenda inmediatamente la emisión de la señal rusa RT. Es un canal al servicio de la propaganda y justificación de la violenta invasión de Rusia a Ucrania”.
La posición de la Red de Comunicadores del Mercosur
La Red de Comunicadores del Mercosur se pronunció al respecto de las iniciativas de cancelar las transmisiones del canal estatal ruso. En su comunicado la agrupación señaló que “la decisión de silenciar a las cadenas RT y Sputnik, medios de comunicación rusos por parte de la Unión Europea, constituye un atentado a la libertad de información de los pueblos”. La entidad también manifestó su disconformidad con la decisión de descontinuar la transmisión de la señal en América Latina por disposición de los administradores de satélites comerciales. Condenó la decisión argumentando que la medida vulnera el derecho colectivo de la comunicación. Finalmente, la entidad concluyó: “La censura a medios de comunicación agudiza la guerra de desinformación con mayor volumen de fake news que impide comprender la posición de las partes y buscar puntos de encuentro”.
La censura de la libertad de expresión en Rusia
En el interior del país, el gobierno ruso ejerce una permanente presión sobre los medios de comunicación y también sobre otras formas de expresión. Vladimir Putin no admite que los ciudadanos rusos se expresen en contra de la guerra. El gobierno utiliza los aparatos del Estado para apresar y encarcelar a quienes participen en manifestaciones en contra de la invasión a Ucrania. Se han emitido resoluciones que imponen condenas de hasta 15 años de cárcel a quienes realicen comentarios críticos respecto del desempeño del ejército ruso.