En vísperas de Navidad, el viernes 24 de diciembre, la Policía de la Provincia de Buenos Aires reprimió y desalojó a las familias del barrio 1° de noviembre de Ciudad Evita, en el partido de La Matanza. Como consecuencia, varias organizaciones repudian el hecho y llaman a una movilización para el martes 28; mientras que este domingo 26 se reunirán en solidaridad con les desalojades.
Uno de los hechos denunciados más repudiables fue el incendio intencional de cuatro comedores que funcionaban en la toma y que alimentaban a 14 familias que resistían en el lugar.
Sara Herrera, una de las delegadas de la toma, dialogó con Nota al Pie y denunció que la policía de la zona les amenazó durante toda la semana pasada. “Se nos burlaron en la cara porque nos decían ‘ya van a ver’”, contó.
En un comunicado de prensa de diferentes organizaciones sociales, reclaman que el intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, no resuelve los conflictos de la clase trabajadora, como el derecho a la vivienda, pero sí destina muchos recursos para la fuerza policial.
Otro hecho de gravedad es la violencia que se desató cuando las familias intentaron defender lo poco que tenían y fueron golpeadas por las fuerzas represivas. Es así que muches quedaron en total estado de abandono y esperan una respuesta del Gobierno.
Herrera estuvo presente en los desalojos del viernes y contó de qué manera sufrió el maltrato de la policía: “Vinieron directamente a quemar todo”.
“No nos dieron chance a sacar las cosas del merendero ni a desarmar las cosas de las familias que estaban viviendo”, contó angustiada. Además, detalló que “son 14 familias que están en situación de calle hoy en día”.
El día después: reconstruir los merenderos
Dos días después, la principal preocupación es levantar los merenderos porque las familias y les niñes no pueden quedarse sin alimentos. Es por eso que Sara trabaja para recolectar mercadería y hacer lo posible para garantizar que al menos tengan un plato de comida.
En la misma línea, hizo un llamado a la solidaridad: “Lo que tratamos de pedir es si nos pueden donar algunas cosas, como chapas o alguna mesa, sillas, cubiertos. No tenemos nada, nos quemaron todo”.
“Estamos tratando de por lo menos armar los merenderos, y algunas casitas porque no tenemos nada, nos dejaron sin nada”, remarcó. Además, contó en primera persona el maltrato policial: “Mucha violencia, física, verbal y psicológica”.
“Estoy acá con la compañera que sufrió violencia de género porque fueron los hombres los que la tiraron al fuego y se le quemó todo el pelo; en el brazo le quedó un moretón de lo fuerte que la agarraron”, contó.
El día martes: movilización en busca de respuestas
Convocan a una movilización el día martes 28 desde la rotonda de San Justo hasta la Municipalidad para exigir respuestas. En este sentido Mecha, parte de la toma y vecina del Barrio 22 de enero, dijo a este medio: “El pueblo argentino y trabajador, es un pueblo solidario”.
“Por eso más allá de que nos vamos a encontrar muchas organizaciones también nos vamos a encontrar muchos vecinos solidarios”, agregó y sostuvo: “Los matanceros estamos cada vez peor, las soluciones son para las fotos pero adentro no tenemos agua”.
En sentido, aclaró: “Lo que esperamos no son respuestas grandilocuentes, hay una necesidad presupuestaria para las soluciones que necesitamos”. Además, Mecha mencionó un poco de la historia de su localidad Mecha: “Fuimos los propios vecinos los que nos encargamos de urbanizar nuestros barrios”.
“Solo estamos pidiendo que tengan la voluntad política para resolver un pedazo de tierra para vivir”, exigió; y explicó que como barrio se organizan desde hace años para instalar servicios y mejorar la calidad de vida de les vecines.
Por último, Mecha denunció que las fuerzas represivas son parte de la gran falta de respuesta que hay desde el Estado que deja sin resolver cuestiones básicas como el acceso a la vivienda digna. Por eso, explicó que en Ciudad Evita se sufre la violencia policial históricamente.