Las artes marciales no solo abarcan movimientos y habilidades corporales. También incluyen un amplio abanico de principios. De hecho, la filosofía es la esencia de esas disciplinas deportivas. El Taekwon-Do posee una profunda base filosófica que contribuye al desarrollo humano de quien lo practica. En la segunda parte de la entrevista con Nota al Pie, los profesores Sabunim VI Dan Ariel O. Fernandez y Sabunim IV Dan Jose A. Privitera puntualizan cuales son esos principios rectores. Además, explican cuál es su aplicación práctica en la vida cotidiana.
El Taekwon-Do tiene una filosofía compuesta por cinco elementos esenciales: Cortesía, Integridad, Perseverancia, Autocontrol y Espíritu Indomable. ¿De qué se trata?
Esta es la estructura principal. Es la raíz de un árbol que funciona como metáfora de crecimiento, la estructura de los colores en el cinturón está atravesada por esta idea de un árbol de vida. Esta estructura nos define como un arte marcial. Los cinco principios están vinculados entre sí de un modo escalonado. Su orden no es casual.
¿Podrían definir que abarca el concepto Cortesía (Ye Ui)?
Este es el primer principio, Cortesía es una palabra que resume una actitud. Ser cortés es responder con amabilidad, dar por sentado la buena intención o la falta de mala fé tanto en nuestras acciones, como en las ajenas. La violencia se propaga con facilidad cuando encuentra donde apoyarse. La cortesía es una primera barrera a esa escalada y es también un instrumento de construcción social.
¿ Y el concepto de Integridad Moral (Yom Chi)?
La cortesía sólo puede practicarse plenamente si poseemos una Integridad que la sostenga. Ser íntegro es ser una misma persona, única, sin facetas ocultas o dobles intenciones, reconocerse en una unidad, con defectos y virtudes. Aceptarse así tiene el premio de la calma y la libertad de no tener que demostrar nada a nadie. Frente a una agresión, esta calma permitirá responder con cortesía para dar una oportunidad de evitar ser responsable de una escalada de violencia.
¿En qué consiste Perseverancia (In Nae) y cuál es su aplicación práctica?
La Integridad no puede lograrse sin el auxilio de la Perseverancia. Perseverar a pesar de las frustraciones, enfrentar las adversidades con el tiempo que requiera, pero enfrentarlas. No dar la espalda a los problemas. Seguir en pie intentando, a pesar de los tropiezos, conocerse, superarse, crecer.
¿A qué hace referencia el término Autocontrol (Guk Gi)?
La Perseverancia es posible gracias al Autocontrol. Conocer los límites y virtudes es fundamental para el desarrollo de la Integridad y este proceso se denomina Autocontrol. Se persigue el control de las reacciones efervescentes, la explosión emocional y física, el derrumbe de las estructuras de sostén. La Cortesía es impracticable sin Autocontrol. Nos entrenamos por igual en controlarnos para convocar la calma o la fuerza como recurso de defensa. Lo que el resto de las personas llaman “ataque de ira” nosotros podemos convocar y apaciguar de manera voluntaria para desarrollar ese extraordinario poder humano.
¿Qué significa Espíritu indómito (Baekjul Boolgool) y cómo se manifiesta ese valor en la vida cotidiana?
Finalmente el Espíritu Indómito es quien da base y sustento a los cuatro primeros principios. Para lograr alcanzarlos debemos suprimir las sensaciones de pánico. A diferencia del miedo, el pánico detiene y paraliza, nubla la razón, la vista, sofoca, doma el carácter. Abrazamos el miedo como energía y pulsión de movimiento y creación. El miedo, como el hambre, nos impulsa a tomar una acción resolutiva. Ningún autocontrol, perseverancia, integridad o cortesía es posible plenamente si dejamos que el pánico se apodere de nosotros. Transformamos esa parálisis en pulsión, esto no significa que no sentimos miedo, muy por el contrario, lo sentimos en carne y corazón. Dejamos que nos atraviese y lentamente logramos desarmarlo hasta identificar su génesis. Luego intentaremos apagarlo, hasta conseguirlo. Aún si se nos va toda la vida, valdrá la pena dedicarse a ello. El color negro del cinturón significa eso.
¿El estudio de estos valores ha contribuido a vuestra vida cotidiana?
Esta es una de las preguntas más comunes que nos hacen las personas que no practican artes marciales. Indagan esperando recibir alguna historia heróica, siempre en el escenario de “la calle”, con efectos visuales, patadas y cuchillos voladores…. La respuesta es siempre la misma. Sí, me sirve en la calle, en mi casa, en mi escuela, en mi corazón y en mi sociedad. Cada segundo vivido está sustancialmente atravesado por esta práctica. La vida nos desafía permanentemente, desde el primer momento al nacer, para respirar hasta el último momento al morir. Enfrentar estos desafíos nos hace fuertes física y emocionalmente. Si acaso esta respuesta no apaga la curiosidad inicial, sepan que tristemente en el medio de esta historia se dan algunas, muy pocas por suerte, situaciones de combates reales. En “la calle” el entrenamiento, si es concreto, determina el resultado en unos pocos segundos.
La filosofía del Taekwon-Do tiene notables principios a los cuales deben adherir quienes lo practican. ¿Cree que si más personas se vincularan al estudio de esa filosofía podríamos tener una sociedad mejor?
Esta no es una creencia o un cuento de feria hermoso. Es una convicción que descansa en la experiencia. Comprender y aceptar los límites propios es reconocer por carácter transitivo, el espacio de las demás personas. Si las personas que te rodean se sienten respetadas, la sociedad crece y se enriquece en la diversidad.