La Cámara de Apelación en lo Contencioso Administrativo de La Plata determinó esta semana que el Instituto de Obra Médico Asistencial (IOMA), deberá implementar el servicio de Asistencia Personal de las personas con discapacidad. El fallo fue emitido con el objeto de asegurar el derecho a una vida independiente y la integración a la comunidad de esa población.
La resolución es el resultado de demandas realizadas por la Asociación Azul, entidad bonaerense abocada a la integración social de personas con capacidades diferenciadas. Nota al Pie diálogo con Gabriela Troiano, integrante de la comisión directiva de esa ONG, quien expresó que “es un gran logro para avanzar hacia una vida independiente”.
El rol del asistente personal en la vida independiente
Troiano explicó que la Asistencia Personal es la ayuda que se brinda a aquellas personas con discapacidad, “para que pueda realizar una actividad de la vida diaria que por sí sola no podría”.
La activista por la inclusión puntualizó que “hay muchas personas que no tienen habla, no tienen posibilidad de escribir con las manos. Entonces necesitan de una persona para poder comunicarse.”
Incluso dio el ejemplo de una persona ciega debido a que “puede requerir un asistente personal que lo acompañe a pagar sus cuentas al banco o a hacer un trámite”. La asistencia personal depende de la discapacidad que tenga la persona y desde ahora, ese servicio deberá ser cubierto por IOMA.
Los cambios que introduce el fallo judicial
La integrante de la Asociación Azul relató que antes era muy difícil que una persona afiliada obtuviera un asistente personal cubierto por IOMA. “Nos pasaba con frecuencia que cuando se solicitaba un asistente personal, había que hacer un tramiterío infernal. Era una gestión que se realizaba por vía de excepción”.
Asimismo, remarcó que “con este fallo, ahora IOMA tendrá que brindar la prestación, porque el Estado debe ser el primero en cumplir con la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, que en su artículo 19 plantea el tema de la asistencia personal”.
La activista advirtió que este tratado internacional tiene una particularidad ya que “es vinculante”. Lo que implica que “cualquier persona que desee demandar al Estado citando esa convención, este está obligado a cumplir porque se comprometió con eso”.
El asistente personal para lograr una plena integración
El Asistente Personal es un apoyo para que la persona con discapacidad pueda efectuar lo que sin esa ayuda, no podría hacer. “Gracias al asistente personal se logra eliminar muchas barreras”, reflexionó.
Y aclaró que “tiene que ser elegido por la persona con discapacidad, porque es alguien que tendrá que acompañarlo en distintos momentos de la vida cotidiana. La ayuda se brinda inclusive hasta en situaciones íntimas, por ejemplo para ducharse. Por eso tiene que ser alguien de confianza”.