Tecnópolis abrió sus puertas en 2011 con un objetivo claro: que todes puedan acceder a conocer e inspirarse en la ciencia y la tecnología que se desarrolla en el país.
Cada año, millones de personas recorren los distintos espacios para aprender desde cómo trabajan los científicos hasta, por ejemplo, visitar un avión por dentro. El Parque de Dinos es otra de las grandes atracciones junto al Escenario Juana Azurduy, por el que pasaron grandes artistas.
La nueva edición de #VeranoEnTecnópolis comenzó el 3 de febrero y se extiende hasta después de los carnavales, con diferentes propuestas para toda la familia. Entre tantas propuestas, les visitantes disfrutarán del Carnaval en Tecnópolis, del 17 al 21 de febrero, con entrada libre y gratuita desde las 16 hasta las 22 horas.
En comunicación con Nota al Pie, la Directora de Tecnópolis, María Rosenfeldt, contó cómo este espacio abre el imaginario a proyectar un futuro.
“Una política pública de acceso al arte, a la ciencia y a la tecnología”
Tras un largo recorrido por el mundo audiovisual formando parte, por ejemplo, de Canal Encuentro, María Rosenfeldt comenzó a dirigir Tecnópolis en la nueva gestión. Lo define como una gran política pública de acceso al arte, a la ciencia y a la tecnología.
“Es un gran espacio de encuentro donde vivir experiencias junto a otros, donde proyectamos hacia el futuro. También donde ver nuestras capacidades y potencial hacia adelante, lo que tiene que ver con el desarrollo científico-tecnológico y productivo de la Argentina”, explicó. Pero, además, considera que en su recorrido “hay algo afectivo y de orgullo que nos hace comunes a quienes estamos en este espacio”.
Durante la pandemia, Rosenfeldt fue la encargada de adaptar todas las propuestas en medio de burbujas y distancia social, estableciendo otras modalidades de encuentro. Por eso, ahora propone recorrerlo “desde la naturaleza y los espacios verdes, habitarlo desde el cuerpo, con todas las propuestas de arte y deporte urbano, y el escenario al aire libre”.
Pensarse hacia el futuro
La megamuestra de Tecnópolis se realiza todos los años desde julio hasta octubre. El objetivo es “mostrar todas las políticas públicas que se vinculan a esta idea de colectivamente poder proyectarnos hacia el futuro”, sostuvo su directora. Continuó fundamentando que es importante “ver todo ese potencial y capacidades de referentes” y “armar una narrativa que nos invita de manera lúdica y entretenida a acceder a esos contenidos”. Todo se arma “pensando en las infancias, las juventudes y la familia en general, que es la audiencia que tenemos”, indicó Rosenfeldt .
En definitiva, se trata de “encontrarse con propuestas y contenidos que nos sorprenden, nos identifican y nos brindan esa capacidad de abrir imaginarios. También ofrecerles a los chicos y chicas que lo visitan una posibilidad de proyección que quizás de otra manera no tienen”.
La última edición giraba en torno al concepto de soberanía, la cual tuvo una convocatoria total de 3 millones de personas, logrando recuperar los aspectos populares y masivos que caracterizan al parque y se habían perdido durante la pandemia.
“Se va consolidando como un espacio necesario, de orgullo, de cuidado y propio. Siento que logramos que sientan a Tecnópolis como un lugar que posibilita algo increíble. Cualquier visitante puede disfrutar de este espacio de forma gratuita. Quienes vienen sienten mucha pertenencia e identidad con este lugar y una valoración como política pública”, agregó.
Multiplicidad de contenidos y propuestas
Los materiales son pensados teniendo en cuenta a las audiencias de Tecnópolis y “desde esta idea de contarnos y reflejar en los contenidos lo que somos como sociedad. Poder abrir a un espacio de reflexión, de palabra, de arte y de una manera lúdica transferir ese contenido a una propuesta concreta materializada en el espacio”.
La directora de Tecnópolis sostuvo que la megamuestra se piensa “siempre con esta idea de la diversidad que tenemos que representar, de no cerrar a una manera de contarlo sino abrir a la multiplicidad de géneros y disciplinas en las que podemos contarnos, como matematica, fisica, deportes, en los distintos espacios”.
Su misión es “hacerlo entretenido o lúdico o que proponga una experiencia que les posibilite acceder al contenido de forma divertida, tenemos que ser creativos”, argumentó Rosenfeldt.
Por ejemplo, en Rodó se desarrolló un espacio para la primera infancia. “Es sensorial, tiene colores, sonidos, texturas que invitan a que los mapadres vengan con los bebés a esta propuesta”. También hay un espacio para el deporte urbano. “Junto al ministerio de deportes y turismo, tenemos el skate park, la palestra, pista de patín y de parkour”, informó.
40 años de democracia y carnaval
Este fin de semana se podrá visitar la muestra “Carnaval y Democracia. 40 años de brillo y crítica”. En 2023 se cumplen 40 años de democracia, y lo que se busca es contar por qué esa expresión popular fue prohibida durante la última dictadura militar. En la muestra, también se cuenta cómo esa recuperación recorrió estos 40 años ininterrumpidos de democracia.
La presentación contará con una peña folklórica, murgas barriales de Vicente López y la uruguaya Agarrate Catalina, como también agrupaciones de Perú. “Invitando a ese ritmo, ese color y esa expresión que también va siempre acompañado de una demanda popular que está en las expresiones y en los cánticos de las murgas”, mencionó la Directora de Tecnópolis.
Además, ya se está preparando la próxima megamuestra que comienza a mitad de año: su lema será “La potencia de lo colectivo”. Rosenfeldt añadió que el proyecto venidero “intenta pensarnos como sociedad en estos 40 años de democracia y también pensar la democracia hacia el futuro. Para nosotros lo colectivo es dar respuesta a muchas de las demandas que tiene esta democracia para alcanzar una sociedad más justa y más igualitaria. La pandemia vino a hacernos pensar como las respuestas se tienen que empezar a pensar y trabajar desde lo colectivo”, concluyó.