Les franceses continúan la lucha para que el proyecto que cambiaría la última etapa de sus vidas no llegue a término. Hasta el momento se realizaron dos marchas masivas y dos encuestas para saber la opinión de la población. Una la realizó el Instituto Francés de Opinión Pública (IFOP) y otra el Instituto Elabe.
Cabe recordar que las manifestaciones están fundadas por el cambio en la edad mínima de jubilación, de 62 a 64, la exigencia de 43 años de aporte para percibir una pensión completa, que antes era de 42, y la supresión de regímenes especiales, que implican distintas edades de jubilación según el tipo de trabajo.
A pesar del fuerte rechazo, el gobierno continúa con la reforma. El argumento es que el cambio es indispensable para evitar el colapso financiero del sistema de retiro. La reforma se sustentaría en un informe realizado por una comisión de expertes que habría estimado que para el 2032 las pensiones implicarían el 14,7% del PBI francés y no el 13,8%, que es la cifra actual. Por lo tanto, las medidas que impulsan buscarían reducir el “gasto” que significa que parte de la población se jubile.
Francia dice no a la reforma jubilatoria
En las marchas del 19 y 31 estuvieron grandes sindicatos, como CGT, FO, UNSA y la CFE-CGC, junto a los millones de habitantes indignados. Así lo hicieron les docentes y empleades del transporte público, entre tantes otres ciudadanes.
Asimismo, se espera que este martes les habitantes vuelvan a concentrarse en distintas ciudades. También el próximo 11 de febrero, jornada que fue convocada por sindicatos a través de un comunicado.
El rechazo a los cambios en el sistema de jubilación no solo se hizo presente en las calles sino que también en la opinión pública en general. Una encuesta del IFOP para el semanario Le Journal du Dimanche mostró que el 69% de las personas entrevistadas está en contra del proyecto de reforma.
Asimismo, el Instituto Elabe también realizó una investigación para el canal BFM TV, cuyos resultados arrojaron que el 72% de les consultades rechaza los cambios en las pensiones.
A vista de las multitudinarias marchas y las encuestas, el director general del IFOP, Frédéric Dabi, afirmó que el gobierno tiene casi perdida la batalla en la opinión pública.
Los jóvenes también luchan en contra de la reforma
Dentro de las manifestaciones masivas, les jóvenes fueron una fracción numerosa. Se estima que en la marcha del 31 de enero participaron 150 mil en toda Francia. La participación de estos jóvenes comprende una franja etaria de 16 a 20 años. Esto es algo que llamó la atención, tratándose de una reforma que tiene que ver con las jubilaciones.
Varios medios se preguntaron por qué se movilizaban cuando aún no habían llegado a la edad profesional. Los testimonios de les manifestantes fueron que tiene que ver con la solidaridad pero también con que sus familiares son quienes están afectades por la medida. A su vez, les jóvenes plantean que los dos años adicionales para que les adultes lleguen a la edad de jubilación van a generar repercusiones en la integración de nuevas personas al mercado laboral.
“Son dos años en los que la empresa no contratará personal nuevo. Cuanto más tiempo trabaje la gente, más ajustado será el mercado laboral para nosotros”, cuestionó Louis, un manifestante de 24 años.