El pasado 18 de abril, a través de su cuenta oficial de Twitter, el candidate a senadore, Austin Searle, encendió una alarma. Advirtió sobre la tendencia incentivada por unes usuaries de TikTok para convertir el 24 de Abril en el “Día Nacional de la violación”.
En su Twitter, además de alertar sobre el asunto y repudiarlo, Searle instó a TikTok para que tome medidas en el asunto. La situación causó revuelo, pero por sobre todo preocupación en el país volviendo la cuestión semi-viral.
La fecha no fue azarosa. Coincide con la celebración del Mes de la Concienciación y la Prevención de la Agresión Sexual que promueven organizaciones estadounidenses. Una de ellas, RAINN (Red Nacional de Violación, Abuso e Incesto, del inglés), es la mayor organización del país contra la violencia sexual.
Según el periódico estadounidense USA Today, ni elles ni TikTok encontraron pruebas fehacientes de que realmente existió el contenido al que respondían les usuaries en las redes sociales.
Un portavoz de la aplicación les informó: “Aunque no hemos encontrado pruebas en nuestra plataforma de ningún vídeo relacionado con este tema, nuestro equipo de seguridad se mantiene vigilante y eliminaremos el contenido que viole nuestras políticas.»
Incluso el medio afirma haberse contactado con varies usuaries, pero la gran mayoría informó no haber visto el video y cuando afirmaban lo contrario, no proporcionaban pruebas del mismo. Pero existe una narrativa predominante sobre que un grupo de seis hombres creó un video que animaba a otres a cometer agresiones sexuales el 24 de abril.
No es solo un día
Bajo el hashtag #april24, usuaries expusieron sus temores, consejos, amenazas y/o condenas ante la ocurrencia de perpetrar el delito masivamente o individualmente ese día. Los mensajes que predominaron eran consejos sobre permanecer esa fecha en los hogares, movilizarse en grupo o portar armas para poder defenderse.
En diálogo con Nota al Pie, Silvia Ferreyra, Coordinadora de la Mesa Federal de las Mujeres de la Matria Latinoamericana (MuMaLa), quien mencionaba que el hecho si bien tuvo réplica en las redes; no fue así en los medios masivos. Teniendo mayor revuelo en Estados unidos, España y en el norte de México.
Respecto a qué hacer con la situación como organización, Ferreyra aseveró: “Nosotras vimos que más allá del video y lo que trascendió, era importante poner en debate la cultura de la violación en sí”. Indignada, afirmó que «la respuesta imperante fue ‘quedate en tu casa’. Cuando nosotras estamos en constante peligro. La violencia machista es nuestro cotidiano”.
Los últimos datos oficiales sobre violaciones del Ministerio de Seguridad de la Nación revelan que, en 2019, 5.536 personas denunciaron haber sido víctimas de violación. Esto significa que existieron por lo menos 15 ataques por día.
La coordinadora de Mumalá protestó: “La violación sucede sistemáticamente. Esto no es una fecha en particular, es una situación que viene sucediendo y que tiene sus raíces en la violencia patriarcal que existe”.
Desde la organización entienden que la situación trasciende las redes. Ferreyra instó: “La mejor respuesta no debería ser el miedo, sino empoderarnos, asumirnos como protagonistas y artífices de esta lucha”. Y añadió: “Debemos procurar sociedades que puedan responder con acciones condenatorias a estos hechos”.
A su vez, entienden que los Estados deben disponer de medidas efectivas para prevenir las distintas caras que toma la violencia. Asimismo, para resguardar los derechos, «entre ellos, el principal, la vida».
Un arma de doble filo
Internet permite una divulgación más rápida de la información. También, la posibilidad de ser receptada por miles de personas, incluso por fuera del país de origen. Según el sitio DataReportal, la plataforma TikTok posee 730 millones de usuarios reportados hasta abril del 2021. Por lo que lleva a reflexionar sobre la veracidad de lo que compartimos.
Ferreyra reflexionó en torno a lo que se generó en lo posterior no teniendo como precedencia algo concreto. Mencionó que «no podemos ser ajenos e indiferentes a situaciones en las redes que profundizan las desigualdades. Pero somos conscientes que la virtualidad es más difícil de monitorear y controlar”.
Es probable que haya sido una fake news (noticia falsa) por lo que debemos tomar conciencia y responsabilidad, sobre todo al divulgar noticias que tratan de problemáticas tan complejas y delicadas.