Presente en el cuartel general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), el Ministro de Defensa, Luis Petri, solicitó formalmente la adhesión de Argentina como “socio global” del organismo.
El pedido se efectuó por instrucción del presidente Javier Milei, por lo que se entregó una “carta de intención” para ser parte de la organización internacional. El encuentro tuvo lugar en Bruselas, sede de la OTAN.
Se trata de una alianza militar que se formó a partir del Tratado del Atlántico Norte, también conocido como Tratado de Washington, que se firmó el 4 de abril de 1949.
Desde entonces, uno de sus principales propósitos es el de constituir un sistema de defensa colectivo donde los integrantes acuerdan defenderse entre sí ante ataques externos.
Este espacio cuenta con 32 miembros plenos entre los que se encuentran Estados Unidos, Reino Unido, Francia y Alemania, entre otros. Por otra parte, en otro escalafón, se encuentran los “socios globales”, donde Colombia es el único miembro de Latinoamérica.
Otros de los integrantes en este nivel son: Australia, Corea del Sur, Irak, Japón, Mongolia, Nueva Zelanda y Pakistán. Esta acción por parte del Gobierno se suma a una serie de medidas adoptadas como parte del giro geopolítico argentino hacia el brazo de Estados Unidos.
La reciente compra de los aviones a Dinamarca, el apoyo a Israel frente al conflicto con Irán y el viaje del Presidente para encontrarse con la Jefa del Comando Sur de los Estados Unidos, Laura Richardson, son algunas de las muestras unidireccionales del gobierno.
En este sentido, la visita de Richardson generó tensiones con China en cuanto a su base espacial en Neuquén. De este modo, se completa el giro que tuvo a Argentina cerca de ingresar a los BRICS, pero que Milei dio de baja para alinearse con Estados Unidos.
Petri en la OTAN y las implicancias geopolíticas
Desde 1998, Argentina es considerada como aliada extra-OTAN y ahora, tras la reunión de ayer en Bruselas, buscará convertirse en “socio global”. Para ello, el Ministro de Defensa, Luis Petri, se reunió con el Secretario General Adjunto de la OTAN, Mircea Geoana, a quién le presentó la carta de adhesión.
Así lo confirmó el propio Petri a través de X, donde expresó: “Seguiremos trabajando en recuperar vínculos que permitan modernizar y capacitar a nuestras fuerzas al estándar de la OTAN”.
Por otra parte, confirmó también un encuentro con el Secretario General Adjunto para Asuntos Públicos y Política de Seguridad, Javier Colomina: “Le presenté las propuestas de Argentina para explorar temas de mutuo interés como lo son la seguridad marítima y reforzar el diálogo estratégico de seguridad”.
Por último, en otro posteo, el ministro reafirmó el compromiso “con los países que abrazan la libertad y los valores de la democracia, frente a los autoritarismos y las autocracias a nivel mundial”.
Y enumeró los potenciales beneficios de unirse a la OTAN, entre los que destacó una capacitación para las Fuerzas Armadas argentinas, el acceso a equipamiento y recibir apoyo en ciberdefensa.
De este modo, Argentina quedaría firmemente posicionada en un fuerte alineamiento con Estados Unidos y las fuerzas de occidente, dejando así la histórica posición neutral del país ante conflictos bélicos.
Ello sucede en tiempos donde la escalada de violencia global no se detiene, con el conflicto Rusia-Ucrania e Israel-Irán como telón de fondo. En consecuencia, Argentina pasaría a tener un rol activo en los conflictos en caso de que algún miembro de la OTAN se vea amenazado.
Recorrido y función de la OTAN
Para abordar la creación de la OTAN hay que remontarse al Tratado de Washington de 1949, contexto de posguerra y primeros años de la Guerra Fría que Estados Unidos disputó con la Unión Soviética (URSS).
La organización internacional nació a partir de la firma del acuerdo entre 12 Estados, donde además de Estados Unidos, se adhirieron: Bélgica, Canadá, Dinamarca, Francia, Islandia, Italia, Luxemburgo, Países Bajos, Noruega, Portugal y Reino Unido.
Desde entonces, se fueron sumando distintos países, con Grecia y Turquía en 1952, Alemania Occidental en 1955 y España en 1982. Los otros 16 que completan los 32 actuales se sumaron una vez disuelta la URSS.
A su vez, ahora cuenta con “socios globales” de todo el mundo, rama a la que Javier Milei aspira introducir a la Argentina. Según el sitio oficial de la OTAN, su finalidad es la de “garantizar la libertad y la seguridad de sus países miembros por medios políticos y militares”.
En este sentido, atribuye por medios políticos a la promoción de “valores democráticos” y permite que los miembros de la organización cooperen entre sí en temas referidos a “defensa y seguridad”.
Por otra parte, afirman que utilizan medios militares cuando “los esfuerzos diplomáticos no dan frutos”, y convocan así a la fuerza militar con “operaciones de gestión de crisis”.
En tanto, ponderan “el principio de defensa colectiva”, según el Artículo 5 del Tratado de Washington: “Un ataque contra uno o varios de sus miembros se considera un ataque contra todos”.
Finalmente, respecto a la toma de decisiones, la misma pasa por los países miembros mientras que los catalogados “socios globales”, quedan relegados en el rango de autoridad.
Argentina busca convertirse en socio global de la OTAN, status que en latinoamérica solo ostenta Colombia.
El Ministro Petri junto con el referente de Asuntos Públicos y Política de Seguridad, Javier Colombina.