Desde el mes de septiembre, Franja de Oro vive una revolución muy positiva con la puesta en marcha de su propio estadio de futsal y todo lo que esto significa para un club de barrio.
El recinto deportivo, ubicado en Avenida Alcorta 4007 (Pompeya) es un proyecto que parecía lejano, pero que se volvió realidad gracias a Claudio Ariel carril, sponsor de la institución. Ahora, como muestra de gratitud, el microestadio llevará su nombre.
Nota al Pie entrevistó a Samanta Padra, presidenta de la disciplina, junto a Ariel Mauro, integrante de la dirigencia. Ambes son parte del club hace más de dos décadas y compartieron todo lo referente al día a día y cómo impactó e impactará el espacio propio. Además, Alan Rebek, nuevo director técnico de Franja para la temporada 2024, adelantó cómo se perfila el año entrante.
Cumplir un deseo
Franja de Oro es un equipo que se desempeña en la segunda categoría del futsal argentino de la Asociación Argentina de Fútbol (AFA). Al ser un club de barrio, cuando tenía que jugar de local debía alquilar las canchas. Generalmente, estas no eran siquiera las mismas porque siempre dependían de los horarios y días disponibles. Por otro lado, disponían del terreno en la calle Alcorta 4007 en Pompeya, pero no tenían los medios para costear los gastos.
“Es el sueño de todo hincha de Franja pero, sinceramente, es algo que Franja desde lo económico no iba a poder nunca”, expresó Samanta Padra. Y agregó que, a raíz de esto, “Claudio Carril tomó la decisión de iniciar la construcción del estadio sorpresivamente”.
La presidenta de la disciplina afirmó que no tiene palabras para hablar de lo que sintió cuando Claudio les dijo: “Estoy en el predio, en el 40×20 de techado con el arquitecto para empezar a hacer la cancha”.
El primero de septiembre tomó forma la iniciativa de Claudio quien, año tras año, se fue involucrando más en el club. Carril empezó solo siendo sponsor, luego, esta última temporada, formó parte del cuerpo técnico y con el día a día vio lo importante que es el fútbol de salón para los chicos de Franja.
Por su parte, Samanta está ligada al club desde el año ‘98. Comenzó siendo hincha y en el 2011, junto a un par de amigos, se hizo cargo de la actividad. Por ello, la creación del estadio para Padra es más que importante. “Llanto, muchísima emoción y orgullo de qué Franja de Oro al ser uno de los equipos más grandes del futsal tenga su cancha”, manifestó.
En ese mismo sentido, destacó que están en cada detalle: “Nosotros acompañamos diariamente, cruzamos y vemos cuando empezaron a poner la tribuna, las chapas. Ayudamos en la limpieza con los albañiles, en todo”. En cada paso que da su querido club, todes están expectantes y predispuestos.
“Es la gloria para nosotros, para los pibes, para el trabajo social que venimos realizando hace años. Decir Franja de Oro tiene su microestadio en Pompeya”, exclamó Samanta.
Nuevas perspectivas para Franja de Oro
El microestadio de Franja va a ser un envión anímico en todo sentido, Ariel Mauro, ex entrenador y hoy dirigente, comentó: “Influye en todo tener un espacio propio. Primero y principal a no postergar un entrenamiento por mal clima y, después, a todo objetivo que te quieras proponer”.
Mauro resaltó la importancia de disponer de instalaciones propias por el tiempo de trabajo. Cabe destacar que todos los jugadores de Franja, y también las personas involucradas en la disciplina, administran su tiempo post jornadas de 8 horas, o más, en algo completamente distinto al futsal. Es más la pasión que los moviliza para jugar cada fin de semana en el 40×20 y ser parte de la locura que se vive con el deporte.
En lo futbolístico, Franja terminó bien al año y, sobre todo, mantuvo la categoría,. En especial, teniendo en cuenta que con la evolución del fútbol sala los equipos son cada vez más competitivos y todo se define por detalles.
Desde el 2019 Franja limita en la segunda división, Ariel hace un balance de la temporada: “Creo que fue clara la idea e juego que se trabajó muy bien en todas las líneas, tanto en ataque y defensa, como en lo táctico. Sobre el final faltaron esos detalles que no te hacen entrar en play off “.
Más allá de lo futbolístico, lo que hace más fuerte a Franja de Oro como institución es su gente. Ariel Mauro lleva tres décadas involucrado en el club. A los 16 años empezó siendo jugador y luego, con el empuje de sus amigos, se convirtió en director técnico y logró el ascenso en 2018.
“Agradecido con todo el club, no solo por conseguir ese grupo de amigos sino de volcar esos problemas cotidianos que tiene uno, desde una pérdida de papá o mamá a un mal día de uno”, resaltó el ex técnico.
Temporada 2024
El próximo año, Franja de Oro debutará en su microestadio bajo la dirección de Alan Rebek. El nuevo estratega del club de Pompeya dialogó con nosotros y nos cuenta cuáles son sus expectativas y los objetivos que pretende en la temporada 2024.
El nuevo desafío de Rebek, con amplia experiencia en el campo, comenzará en febrero cuando inicie la pretemporada. “Me sentí muy cómodo desde el primer día que llegué. Encontré gente que es muy apasionada por el club y estamos listos para competir, para trabajar día a día e ir mejorando a lo largo del año”, expresó.
En cuanto al plantel, Alan consideró que es muy importante mantener a una base importante de jugadores del club. ”Ellos sienten más que nadie y viven la camiseta de Franja de Oro”, remarcó y añadió que a ellos “se sumaron jugadores que tengan un sentido de pertenencia, que estén comprometidos y puedan suplir las debilidades del equipo”.
“Antes de las fiestas, hicimos una cena. Cerramos casi el 80 % del plantel, comimos todos juntos y nos volveremos a reencontrar el lunes 5 de febrero”, comentó el ex técnico de Hebraica.
Franja de Oro no pudo terminar de mejor manera el año. Sin embargo, el club de barrio que con esfuerzo y sacrificio tendrá su propio microestadio, sueña despierto con los objetivos para el 2024.