Créditos: Nahuel Isella Muscato.
Esta mañana frente a la guardia del Hospital de Niños de San Justo, trabajadores de varios hospitales de La Matanza realizaron una conferencia de prensa donde establecieron los problemas que sostienen desde hace tiempo los servicios públicos de salud en el municipio. Además, decidieron que el miércoles 13 van a volver a marchar hacía el Municipio de La Matanza.
Dentro de una problemática proveniente de varios meses e incluso años, denunciaron la inacción del Municipio de La Matanza ante los reclamos, y la falta de acciones desde el Sindicato de Trabajadores Municipales. Hablaron Nelson Ramos, del Hospital Materno Infantil «Dra. Teresa Germani«, Paola Paz y Guido Arnici, del Policlínico de San Justo, Hugo Pollola, Miguel Molina y Sandra Verta del Hospital de Niños.
Algunas de las demandas que se plantearon fueron: la reapertura de la Guardia de Emergencias en el Hospital de Niños; la restitución de la antigüedad al 4%; salario mínimo igual a la canasta familiar, indexado por la inflación; inclusión de les profesionales no médiques a los aumentos por decreto; reconocimiento de compañeres administratives y de servicios generales como personal de salud; reapertura urgente de la mesa de diálogo con el Ejecutivo; y la acreditación inmediata del bono del Ministerio de Economía.
Hospital de Niños
La situación de les trabajadores del Hospital de Niños se exacerbó en estos últimos tres meses con el cierre de la guardia de emergencia, pero hace más de seis años que vienen teniendo problemas. La última vez que se reunieron con alguien del Ejecutivo fue el 16 de agosto. El funcionario con quien se juntaron se comprometió a darles respuestas en las próximas 48 horas. No obstante, a más de quince días, todavía no contestó ninguno de los puntos concretos planteados. Por eso decidieron realizar esta conferencia.
Sandra Verta, médica pediátrica del Hospital fue la encargada de cerrar la. Allí se encargó de explicar que la guardia del nosocomio de San Justo sólo atiende “código rojo”. De los 300 a 500 pacientes al día que reciben esos son no más de diez, es decir, menos del 2% de la población que atendían.
No es el único problema que tienen: hay compañeres de elles se siguen yendo del hospital y les trabajadores administratives, incluso con el aumento, solo cobraron $125.000. Por eso piden que el salario básico de todes les trabajadores de salud sea la canasta familiar en donde todes tengan “derecho a pagar un alquiler, a poder irnos de vacaciones, a salir a festejar con nuestra familia un cumpleaños”.
Para Verta, todes se deben involucrar para que esto mejore: “Esta no es una lucha de los médicos, de los enfermeros o de los técnicos. Somos todos los trabajadores del hospital desde el personal del mantenimiento hasta los médicos los enfermeros los bioquímicos, los técnicos de rayos, las instrumentadoras, los trabajadores sociales, la psicólogas y toda persona que forma parte del equipo de salud es fundamental para que este hospital funcione”. Con esas razones en mente convocó para una nueva medida de lucha en la puerta de la Municipalidad de La Matanza el miércoles a las 12 del mediodía.
La conferencia
En una mañana de mucho frío, el grupo de trabajadores se reunió frente a la guardia cerrada del Hospital de Niños en la calle Dr. Ramón Carrillo al 4175. Recibieron el apoyo y adhesiones a su carta abierta por parte de trabajadores del Hospital Moyano, de Cicop, Seccional Municipales de La Matanza y Seccional Moreno, de la Asociación Civil Cable a Tierra, de trabajadores de Royal Canin, de Política Obrera y de la Asociación La Marrón Salud.
No hubo muchos medios nacionales presentes. “Lamentablemente, coincidimos con el entierro de Silvina Luna y la conferencia de prensa de Lionel Scaloni y un montón de cosas que parecen que son más importantes que la salud pública, por lo que muchos de los medios nacionales que estaban confirmados decidieron que era mejor brindar sus móviles para eso”, ironizó Sandra Verta, médica pediatra del nosocomio.
Las voces de les trabajadores
El primero en hablar fue Nelson Ramos, licenciado en enfermería que contó lo que sucede en el Hospital Germani de Laferrere. Él detalló que hay un vaciamiento de los hospitales de La Matanza y que se ha destruido la salud primaria. “Un gobierno municipal que no está a la altura de los acontecimientos”, agregó Ramos.
En cuanto al Hospital Germani, Nelson Ramos explicó que vienen reclamando falta de personal de insumos desde mucho antes de la pandemia. Pasaron de tener 21 pediatras a solo cinco, con una sola haciendo consultorio. Además, cerraron la internación pediátrica del Germani hace un año y ocho meses y nunca tuvieron respuesta de la Secretaría de Salud o del Ejecutivo.
“Hoy se está trabajando con más o menos el 50% del personal de todos los servicios, desde el personal de servicio pasando por enfermería profesionales de todo”, narró Ramos. Otra dificultad con la que se enfrentan es que los insumos llegan a cuentagotas. “Al no haber precios, no se entrega mercadería al hospital y les puedo asegurar que nuestros propios compañeros llevan para cocinar”, reclamó Nelsón. Incluso contó que la gente de maestranza tiene que llevar detergente de su propio bolsillo.
Él también habló del problema de seguridad que tienen en el Hospital. Y dijo que la respuesta que le dieron desde el Municipio es que no hay personal policial para cubrir los hospitales. Por eso dentro del Germani hay solo tres efectivos de seguridad, que “no pueden hacer nada” y dos trabajadores de seguridad urbana que pertenecen al municipio.
Guido Arnici, del Policlínico de San Justo llamó a desatomizar los reclamos y llevar los reclamos de manera unificado. Y explicó porque cree que hay una decisión política de ir en contra de la salud pública: “El proyecto político del municipio de terminar con la carrera hospitalaria contratando gente de manera precaria y no abriendo concursos. La ruptura de la escala salarial, contratando a personas para la misma tarea con distintos salarios, según el modo de contratación. Y, la indolencia, total y absoluta de tener hace tres meses y medio cerrada la guardia del Hospital de Niños de San Justo”.
También exigió que en este momento que se escuchan propuestas que plantean privatizar la salud, las van a enfrentar en sus puestos de trabajo y, si es necesario saldrán a la calle. Y se acordó de aquellos que “dicen defender la salud pública de la boca para afuera y en lo concreto hace años que la vienen atacando”. A su vez, recordó que para que les atendieran del Ejecutivo tuvieron que renunciar varios compañeres a “sus magros salarios de guardia” y que se cierren las distintas guardias del Hospital de Niños. Y que cuando se pudieron reunir les hicieron promesas que se dilataron con el tiempo.
“Necesitamos urgente una recomposición salarial de no menos de 100.000 pesos, de suma fija para todas las categorías, porque no podemos permitir que siga habiendo trabajadores y trabajadoras que no llegan a fin de mes”, reclamó Arnici. De la misma manera pidió que les den acceso a las discusiones paritarias dado que no confían en el Sindicato de Trabajadores Municipales de La Matanza porque, según él, en convivencia con la municipalidad, “vienen entregando como cabeza de gato a los trabajadores y trabajadoras de la salud”.
Hugo Pollola, psicólogo social de la Sala de Salud Néstor “Chino” Oliveri del barrio María Elena, en Rafael Castillo, representó las consecuencias del cierre de las guardias cuando contó una anécdota de una visita suya al Hospital de Niños. Allí se había encontrado con una chica joven que tenía una niña de seis años que iba a la guardia por un problema en el oído y se encontró con que estaba cerrada desde hace dos meses.
A ella la habían enviado desde el Hospital de Morón, pero a su vez, había sido mandada a Morón desde Merlo y ella venía de Moreno. Ante el nuevo obstáculo, tenía que ir al Hospital Dr. Alberto Balestrini que no sabía donde quedaba y se largó a llorar, de acuerdo al relato del representante municipal de Cicop. Esto es algo que sucede todos los días en ese nosocomio.
Finalmente, Miguel Molina, trabajador del Hospital de Niños, volvió a responsabilizar a los sindicatos que no van a paro. “Tenemos que dejar de ser tibios y llamar a paro. Porque va a ser la única herramienta que le va a poder cambiar el rumbo a lo que es esta política de ajuste que viene implementando el gobierno nacional, tanto provincial y municipal”, exclamó Molina. Previo a un posible paro, marcharán nuevamente hacia el Municipio de La Matanza en busca de una respuesta.