Esta semana comenzó el juicio por el crimen de Eliana Mendilaharzu. En el mismo se juzgará por presunto femicidio a su marido, Ramiro Ponce, quien dijo que su esposa se cayó de la cama. La mujer, más conocida como “Ely”, falleció en octubre de 2020 tras agonizar 72 días en la localidad bonaerense de Azul.
El proceso judicial está a cargo del juez Joaquín Duba, del Tribunal Oral Criminal (TOC) 1 de Azul. Ponce está acusado de “homicidio agravado por el vínculo y por ser cometido contra una mujer”, y será juzgado por un jurado popular conformado por seis mujeres y seis hombres. En la actualidad, cumple prisión preventiva en la Unidad Penitenciaria N° 7 de dicha localidad y se enfrenta a la posibilidad de una condena a prisión perpetua.
En una conferencia de prensa, la madre de la víctima, María de los Ángeles Zárate, sostuvo: “Vamos por la prisión perpetua. Él ya nos condenó a perpetua matando a Ely y quiero que pague hasta el último día”. A su vez, expresó: “No me va a solucionar nada este juicio. Pero al menos mis nietos van a sentir un poco de alivio y yo voy a poder cerrar esta etapa para darle comienzo a una nueva”. “Mi lucha va más allá de Ely, es para que dejen de matarnos”, afirmó.
El juicio
El juicio debía comenzar el martes 5 de septiembre pero, tras pasar a un cuarto intermedio, se inició un día después.
Cabe mencionar que el proceso judicial fue suspendido en otras dos oportunidades. La primera en febrero, cuando la defensa del acusado interpuso un recurso de queja, y la otra a principios de agosto, debido a que no pudo conformarse el jurado por falta de paridad de género. Tras la última suspensión, la madre de la joven dijo a los medios locales: “No puede ser que no podamos hacer un juicio por jurados porque a la gente no le interesa participar”.
Ahora, el juicio contará de tres extensas jornadas cargadas de testigues. Se estima que el proceso finalicé el próximo viernes, día en el que se conocerá la sentencia para el acusado. En las audiencias se incluirán dos declaraciones importantes: el hijo del imputado, fruto de un matrimonio anterior, y la hija mayor de la joven; ambos estuvieron presentes la noche que falleció Eliana.
¿Qué pasó con Eliana?
Los hechos ocurrieron el sábado 16 de agosto de 2020, en la casa ubicada en Camilo Gay al 1000, donde Eliana y el imputado convivían. Ese día, la pareja compartió una comida con amigues y luego se produjo el ataque en el que, según la fiscal Karina Gennuso, Ponce golpeó a la mujer en el interior de la habitación matrimonial.
La madre de la víctima recordó que aquel día realizaron una videollamada y ella notó que su hija “estaba demacrada, muy ojerosa”. “Tengo que hacer papas para 20 personas. (Ponce) No me dejó ir a sacarme los puntos de la cesárea”, le había comentado Eliana. Para ese entonces habían pasado dos meses desde que dio a luz a su último hijo.
A raíz del ataque, la joven quedó inconsciente y Ponce llamó a una amiga de su esposa para que la acompañara de urgencia a la guardia del Hospital Pintos. Allí, el acusado aseguró que su pareja estaba borracha y que se cayó de la cama. Ante estos dichos, el médico determinó que no debía permanecer internada, ya que “asoció el estado de inconsciencia a una ingesta alcohólica” y Eliana volvió inconsciente a su casa.
Al día siguiente, debió ser trasladada de nuevo al hospital. Los estudios desmintieron la versión de Ponce y revelaron que Eliana recibió golpes en el cráneo, los cuales provocaron un hematoma epidural. Como consecuencia, debió ser operada varias veces.
La mamá de la joven se enteró de su internación días después, ya que el agresor no se lo había comunicado. Tras permanecer internada más de dos meses en el Hospital Municipal Ángel Pintos, Eliana falleció el 27 de octubre.
Violencia contra las mujeres
Según el observatorio “Mujeres disidencias y derechos”, de MuMaLá, el caso de Eliana no es uno aislado. Desde el primero de enero al 30 de agosto de 2023 se perpetraron 170 femicidios y travesticidios, de un total de 269 muertes violentas. A su vez, se cometieron 369 intentos de femicidios.
De acuerdo a su último informe, el 55% de los femicidas eran pareja de la víctima y el 20% de las víctimas denunciaron a su agresor. Además, resalta que 158 niñes y adolescentes se quedaron sin madre.
Tampoco fue la única víctima de la ciudad de Azul. En abril de este año, Iván Javier Ríos asesinó el pasado sábado a balazos a su expareja, Sofía Inés Mercuri, delante de sus tres hijes. La hija mayor de la pareja, de ocho años, relató que fue su padre quien mató a su mamá y también lesionó a su hermano de 2 años, quien tuvo que ser operado con urgencia. Tras lo ocurrido, el femicida intentó quitarse la vida; quedó herido y murió mientras era asistido en el hospital local.