En el marco del Día Internacional de la Danza, la Comunidad de la Danza Argentina realizó una conferencia de prensa abierta nacional. El encuentro tuvo lugar este viernes 29 a las 11 horas en la Sede de la CTA Autónoma Nacional (Perón 3866, Ciudad de Buenos Aires). La Comunidad está integrada por el Frente de Emergencia de la Danza, el Movimiento por la Ley Nacional de la Danza Argentina y la Asociación de Trabajadores de la Danza (AATDa).
La conferencia se enmarcó también en la posible pérdida del financiamiento del INCAA, INT, INAMU, Bibliotecas populares, Radio y TV Argentina Sociedad del Estado, entre otros organismos. Además, se trataron las diferentes demandas y problemáticas que vienen enfrentando y trabajando históricamente. Y que se profundizaron con la pandemia y hoy se caracterizan en este estado de emergencia.
“El sector carece de un régimen previsional que garantice jubilaciones dignas y acordes a las características de la actividad. Los formatos laborales son mayoritariamente en el ámbito no oficial: la gran mayoría trabaja como monotributista y en una gran medida no registrados. Por lo tanto, sin obra social ni aportes jubilatorios. Muchas compañías oficiales funcionan con contratos de locación, favoreciendo la precarización y la inestabilidad. Y muchas no cuentan con espacios de trabajo en condiciones aptas” denunciaron.
El evento se dio de manera presencial y también virtual. Las oradoras fueron compañeras referentes del Frente de Emergencia de la Danza y de otras organizaciones y movimientos del sector. Además, participaron de la conferencia trabajadores de todo el país para exponer las diferentes demandas y problemáticas que atraviesa este espacio.
Sin Ley, sin instituto, sin financiamiento
“La danza está en emergencia, no tiene nada que celebrar” comenzaron las oradoras del documento con su lectura. “La situación de emergencia sanitaria, económica y cultural a raíz del covid 19 evidenció la precariedad en que ya se encontraba la danza” expresaron.
Respecto a la situación económica que transitan les trabajadores de la danza, desarrollaron en el documento: “Nuestros formatos laborales son mayoritariamente en el ámbito no oficial. De modo tal que la gran mayoría de les trabajadores somos, en el mejor de los casos, monotributistas. Y, en gran medida, no registrades”. Además, denunciaron que “Sin obra social ni posibilidad de aportes jubilatorios, generando un formato laboral en absoluto desamparo y en total inestabilidad”.
Les trabajadores de la danza carecen de un régimen provisional que garantice condiciones laborales dignas y acorde a las características y necesidades de la profesión. Al respecto, expresaron: “Esta situación impide la rotación de cargos y el ingreso de nuevas generaciones a las compañías oficiales”.
Entre despidos y una Ley Nacional de Danza urgente
“En nuestros cuerpos estables, la mayoría de los salarios no llegan al mínimo del salario mínimo vital y móvil de nuestro país. Y en muchas compañías incluso solo se cobran viáticos”. En la misma línea, un punto fuerte de les artistas de la danza fueron los despidos en el marco de la pandemia a través de concursos. Los definieron como provenientes de “dudosa legalidad”.
Por otro lado, sobre la Ley Nacional de Danza explicaron que se desprende la creación de un Instituto Nacional dedicado a la profesión con el fin de proteger el desarrollo de las danzas en el territorio nacional. “El proyecto ha sido presentado en el parlamento nacional por el Movimiento Por una Ley de Danza en representación del sector en el año 2014, sin éxito. Perdiendo estado parlamentario una y otra vez”.
“La comunidad de la danza no está en condiciones de celebrar. Nuestra emergencia sigue siendo la Ley nacional de danza y un instituto que fomente nuestra actividad. Nuestra emergencia sigue siendo el acceso a una jubilación digna y a trabajos registrados”, concluye el documento.
Movilización y respuestas
Según expresó Eugenia Schvartzman, la gestora cultural e integrante del Frente, el documento intenta dar cuenta de las problemáticas que tiene el sector en específico. En clave de la responsabilidad del Ministerio de Cultura nacional, expresó que “tuvo la voluntad de dialogar y acompañar la idea de que exista un Instituto Nacional de Danza, que sería lo que crea la Ley Nacional de Danza”.
Sin embargo, denunció y sostuvo que “este proyecto no va a ser tratado hasta que no haya voluntad política. Ya que hace 10 años se presenta sistemáticamente en el parlamento y ha tenido incluso instancias de debate en las comisiones específicas, en la comisión de cultura concretamente. Y no ha salido por decisión del poder ejecutivo”.
“Entendemos que ahí hay una responsabilidad de deseo y acuerdo de que exista este organismo. Porque también para el ministerio es un vacío institucional no tener políticas para la danza y no tener por donde ejecutarlas, así como existe el INT, el INCAA, el INAMU” expresó Schvartzman.
Si bien no existe un organismo para la danza, la gestora dijo: “Creemos que eso hay que concretarlo, tiene que haber una voluntad política de llevarlo adelante, presentar un proyecto. Nuestra comunidad va a presentar un proyecto histórico y en ese sentido es, digamos, hacía el ministerio”.
Por otro lado, habló de la responsabilidad del Frente de Unidad: “Entendiendo que hay distintas responsabilidades y asumiendo que nuestro sector se viene movilizando a nivel nacional. Va a haber instancias en las que el Estado se tenga que dar cuenta de esto se está tratando” finalizó la gestora.
Y allí lo dejaron en claro en conclusión las compañeras trabajadoras de la danza: “Nos movilizamos y hacemos un llamado a la reflexión urgente: sin ley, sin instituto, sin financiamiento no hay nada que festejar”.