Este domingo se celebrarán en Francia unas nuevas elecciones presidenciales. Según los sondeos previos, Emmanuel Macron, quien irá por la reelección, se impondría en las urnas. En segundo lugar se encontraría ubicada Marine Le Pen, representante de la extrema derecha.
En el último escalafón se ubicaría Jean-Luc Mélenchon, de la izquierda. La alta posibilidad de abstencionismo de cara al domingo podría desencadenar un posible ballotage. Este es el escenario que baraja Le Pen, quien acortó muchos puntos en las últimas semanas.
Un primer sondeo
Durante toda la campaña electoral Emmanuel Macron partió como favorito. Dicha situación se mantiene igual, pero la distancia respecto a la segunda oponente, Marine Le Pen, se vio claramente reducida. Según un sondeo que dio a conocer el diario vespertino francés Le Monde la distancia entre ambos candidatos ha pasado de 16 puntos a favor de Macron, a principios del mes de marzo, a tan solo 5 puntos en estas últimas semanas.
Macron se impondría con el 26,5% de los votos, mientras que Le Pen quedaría con el 21,5%. Estos números se mantienen muy lejanos a los casi 30 que poseía Macron a principios de marzo. Este panorama ahora es muy diferente debido a varios factores: entre ellos, la “poca atención” de Emmanuel Macron en la campaña presidencial, ya que tuvo un papel más protagónico y preocupado por los acontecimientos ocurridos entre Rusia y Ucrania.
“Pienso que hay una verdadera oportunidad y es posible ganar esta elección”, decía hace unos días al diario español El País el dirigente del partido de Le Pen, Louis Aliot. El sondeo de Le Monde sitúa a Mélenchon en tercera posición, con un 16% de votos. Desde la izquierda es difícil que puedan aspirar a un posible ballotage, ya que vienen con una posición muy débil de cara a estas elecciones. Para mayor preocupación, se encuentran por debajo de su rendimiento en las elecciones presidenciales de 2017.
Apatía y abstención de cara a las elecciones
La apatía y la abstención son dos sentimientos que se sienten, y con fuerza, en Francia en estos días de cara a las elecciones. Se manifiesta, sobre todo, en el electorado más joven. Desde Ipsos S.A. en diálogo con La Izquierda Diario imaginan una abstención histórica, pero al mismo tiempo, aseguran que no hay que dar nada por sentado. Se habla de que puede haber un 30% de abstención.
El gobierno de Macron tuvo que sobrellevar muchas protestas sociales. Entre ellas, y una de las más recordadas, es el Movimiento de los Chalecos Amarillos hace unos años. También se enfrentó a las marchas contra el racismo y la brutalidad de la policía allá por junio del 2020. E inclusive, la huelga de transporte más larga que hubo en la historia de Francia.
Muchos votantes también critican a Macron porque fue el único candidato que se negó a un debate previo a las elecciones. Esto, en parte, por encontrarse ocupado en otros temas de coyuntura internacional. Ante esta situación, les periodistas Celine Cornudet y Marc Lazar expresaron ante el medio radial Europe 1 que si llegara a ser reelegido Macron, pero sin haber debatido sobre cuestiones económicas, sociales, le resultaría complicado el mandato.
Los factores que llevarían al triunfo de Macron
Pese a la baja considerable en sus números, Emmanuel Macron es el principal favorito de cara a las elecciones. Y pese a que habría una abstención que rondaría el 30%, existen otros factores que llevarían a Macron al triunfo. Según el analista político Jérome Sainte-Marie en diálogo con Télam, Macron tiene mucho apoyo de les jubilades, quienes sienten que Macron defiende sus intereses. También es apoyado por el sector ejecutivo, tanto privado como público.
Por otro lado, la crisis sanitaria que afectó a todo el mundo generó un freno en todas las reformas que proponía Macrón para el sistema social. Y esto conllevó a una pausa en los actos sociales de protesta.
La guerra de Rusia y Ucrania perjudicó la imagen de Macrón al dejar de lado su campaña. Sin embargo, muchos votantes observaron esta situación como positiva, al ver reflejado en Macron a un líder necesario para afrontar estas situaciones límites.
Ya está todo listo para las elecciones: Macron y Le Pen parten como claros favoritos a ganar en primera vuelta. Una segunda vuelta podría desarrollarse el próximo 24 de abril. Quién ganará no se sabe, pero lo que sí está claro es que el margen entre ambos candidatos será mucho más estrecho que en 2017, cuando Macron obtuvo un 66% y Le Pen un 34% de los votos.