Los humedales son zonas de tierra, generalmente bajas y planas, que actúan como esponjas reteniendo el agua de lluvias y crecidas de los cuerpos de agua cercanos, inundándose de manera intermitente dando lugar a un ecosistema híbrido entre acuáticos y terrestres. Foto: Sofía Díaz
La provincia de Buenos Aires tiene varios humedales a lo largo y ancho de su territorio. Uno de ellos es la ribera de Hudson, un ecosistema compuesto por los bosques ribereños, los humedales, valles de inundación e incluso se encuentra la selva más austral del mundo. Foto: Sofía Díaz
Los humedales de Hudson cuentan con al menos 661 especies de flora y fauna observadas en la zona, de las cuales al menos 178 son especies de aves, 228 especies de plantas y 181 especies de insectos (muchos de ellos mariposas). Foto: Sofía Díaz
El constante avance de las construcciones de alto impacto (caminos asfaltados, murallones para evitar que la crecida del río inunde las zonas que naturalmente están preparadas para ello, barrios privados) poco a poco ha consumido más de 1000 hectáreas de humedales y bosques nativos en la zona. Foto: Sofía Díaz
El primer atentado contra las zonas protegidas que costean el partido de Berazategui se dio en el 1996 cuando se llevó a cabo el inicio de la construcción del proyecto Country Náutico Puerto Trinidad de 360 hectáreas, perteneciente a Beccar Varela Desarrollos SA. y Sepra. Foto: Sofía Díaz
Hoy Berazategui cuenta con 33 barrios privados, de los cuales muchos están ubicados sobre zona de humedales. Algunos de ellos son: Lagoon Hudson, Puerto Trinidad, Greenville, El Cano, Villalobos, Magallanes y Sebastián Gaboto. Foto: Sofía Díaz
Estas construcciones, además del desmonte de los bosques, necesitan al menos 4 o 5 metros de relleno para elevar las tierras. Estas son rellenados con escombros, basura y tierra, sepultando así especies de animales que habitan la zona. Foto: Sofía Díaz
Entre los principales problemas que causan estas modificaciones, además de la pérdida de flora y fauna, se encuentran las inundaciones. Ya que al bloquear el paso del agua y al no poder desembocar en los arroyos, esta se desvía inundando los barrios cercanos a los countries. Foto: Sofía Díaz
El humedal naturalmente filtra el agua y la encauza en los acuíferos. Si estos filtros dejan de existir la calidad del agua va a bajar, por el rellenado del terreno y la salinización. El agua que consumen les vecines de Berazategui comenzará a llegar contaminada y salinizada. Y, por otro lado, las redes cloacales comenzarán a colapsar. Foto: Sofía Díaz
Se puede apreciar que en la planificación final del emprendimiento Greenville el aniquilamiento de un 75 a 90 por ciento de los bosques naturales existentes en la zona. Foto: Sofía Díaz
El pasado 30 de Octubre la Asamblea de Vecinxs Autoconvocadxs- Hocó realizó un festival y movilización por el segundo aniversario desde el comienzo de la actividad de la Asamblea. Foto: Sofía Díaz
Esta Asamblea viene luchando con el propósito principal de que la Costa Ribereña de Berazategui sea declarada reserva natural y movilizándose codo a codo con otras organizaciones de la zona para visibilizar la situación en los humedales. Foto: Sofía Díaz
Mientras tanto, la Municipalidad de Berazategui como las firmas detrás de la construcción de los barrios privados, siguen haciendo oídos sordos a los reclamos de les vecines y a las leyes que protegen los bosques nativos, continuando con el desmonte y destrucción de los mismos. Foto: Sofía Díaz