La Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) manifestó su rechazo al «marketing político» que supone el adelanto del comienzo del ciclo lectivo 2022. De cara a las elecciones del 14 de noviembre, esa fue la propuesta del jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, en conjunto con la ministra de Educación porteña, Soledad Acuña.
«Desde la UTE exigimos al Gobierno de la Ciudad que abandone el marketing político, defina el calendario en el marco del CFE y siente a los sectores de la comunidad educativa a debatir sobre los verdaderos problemas de la educación de nuestra Ciudad», señaló el gremio en un comunicado.
Las clases iniciarán el 21 de febrero, con el objetivo de alcanzar 192 días de cursada. Para ello, se incluirían jornadas extendidas obligatorias para alumnos de sexto y séptimo grado. Así como también, se recuperarán contenidos los sábados. Así lo anunció esta mañana, durante una conferencia de prensa en el Ministerio de Educación Porteño, Rodríguez Larreta.
El desconocimiento del GCBA
La UTE denunció que estas declaraciones «se realizan de espaldas a lxs docentes y a las familias». Además, el GCBA desconoce que el calendario escolar «se resuelve en el marco del Consejo Federal de Educación y no lanzando trascendidos en la prensa».
Lo mismo ocurre con «la reglamentación del artículo 69 del Estatuto del Docente que fija el comienzo de la Licencia Anual Ordinaria (vacaciones) el primer día hábil de enero. Esto significa que la vuelta a las escuelas por parte del personal docente debería ser a partir del 16 de febrero y no el 7″, puntualizó UTE.
Además, mientras el GCBA predica este “slogan Prioridad Educación», hay «más de 20.000 niñxs sin vacantes en el sistema público en el marco del presupuesto educativo más bajo de la Ciudad desde el retorno de la democracia».
Por último, esta medida atentaría económicamente contra los sectores más postergados. En ese sentido, el comunicado indica que «la segunda quincena de febrero es el período más económico para planificar vacaciones».