El jueves 22 de abril el ISEPCi realizó la presentación de los números del IBSN del primer semestre del 2021. En este caso el relevamiento se llevó a cabo en diciembre de 2020 y febrero de 2021, y convocó a más de 50.000 niñes en 1066 comedores y merenderos de 20 provincias argentinas.
En la conferencia que se llevó a cabo vía Zoom, participaron el Director Nacional de la Institución Isaac Rudnik, la Coordinadora del Área de Salud Colectiva del organismo Laura Lonatti, el doctor Enrique Abeyá, el Director del Observatorio de la Deuda Social Agustín Salvia y Marcela Reblón en representación del Ministerio de Desarrollo Social nacional.
El IBSN es uno de los indicadores que el ISEPCi construye en conjunto con les vecines que se organizan en comedores, merenderos, clubes barriales e instituciones religiosas de barrios populares. Laura Lonatti explicó en diálogo con Nota al Pie, que desde el instituto realizan el indicador en forma continua desde el año 2012, a excepción del 2020 por las condiciones epidemiológicas.
«Lo que hemos podido comprobar es que la malnutrición no es una situación coyuntural, sino que tiene que ver con un proceso crónico y estructural. Esto está directamente vinculado a los niveles de pobreza e indigencia que hay en el país», declaró.
El Indicador Barrial de Situación Nutricional
Para construir el indicador participaron 1659 coordinadores y promotores de salud. Elles se capacitaron en el manejo de las técnicas antropométricas para la toma de la talla y el peso, en un trabajo en conjunto con sectores académicos e investigadores.
El censo se realizó en 20 provincias: Corrientes, Misiones, Formosa, Chaco, Mendoza, San Luis, San Juan, Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, Catamarca, Tucumán, Santiago del Estero, Jujuy, Neuquén, Rio Negro, Tierra de Fuego, Chubut y Ciudad Autonóma de Buenos Aires.
Las conclusiones arrojan números alarmantes: de les niñes y adolescentes que se censaron, el 42,1 % presenta malnutrición según su índice de masa corporal (hubo un aumento del 5% en comparación al 2019). De elles, el 29,6 % tiene obesidad, el 18, 6% sobrepeso y el 2,9% bajo peso.
La situación varía según el área del país. Las patagónicas Río Negro, Chubut y Tierra del Fuego son las tres provincias que presentan el porcentaje más alto, sobre todo de obesidad. En cuanto al bajo peso, la provincia de Formosa es la que más alarmantes resultados obtuvo.
¿Cuáles son las causas de la malnutrición?
Para Laura Lonatti son varios los orígenes de esta problemática. Explicó que la pandemia agravó la situación por la baja de la continuidad del trabajo en las franjas más humildes del país: «miles de familias se quedaron sin ese ingreso por lo cual debieron recurrir a la asistencia alimentaria, tanto de los comedores comunitarios como del gobierno nacional».
Una ayuda estatal fue la «Tarjeta Alimentar», que se dirige a la población con niñes de hasta seis años, o los programas de empleo como el Potenciar Trabajo. Pero eso no garantiza que la malnutrición desaparezca, como aclaró Lonatti: «les que tenían Tarjeta Alimentar han visto una posibilidad de reducir el impacto del deterioro del nivel adquisitivo, y les que no, están a expensas del aporte que les puedan brindar un comedor comunitario o el bolsón que se entrega de productos secos en las escuelas».
También, la coordinadora destacó que los alimentos que se otorgan deben ser nutritivos. Manifestó que los productos secos aportan fundamentalmente valores altos de hidratos de carbono y no de nutrientes esenciales, a diferencia de los alimentos frescos. Así, declaró Lonatti, se hace un aporte desde la alimentación pero no se disminuye la problemática de la malnutrición.
Las propuestas del ISEPCi
Los distintos espacios académicos que forman parte del Observatorio «Argentina contra el hambre» construyen información estadística sobre la alimentación en el país, no solo para que haya datos concretos, sino para poder implementar políticas públicas a partir de los mismos.
Desde el ISEPCi, una de las propuestas que comparte la coordinadora Lonatti es la ampliación de los programas alimentarios. En particular, que les destinataries de la Tarjeta Alimentar se extiendan hasta los padres o tutores de niñes de 12 o 16 años, ya que en sus estudios determinan que «los valores más altos de malnutrición se dan en el marco de los 6 a 10 años».
También propone la ampliación de los programas de empleo y su equiparación al monto de la canasta básica. Plantea que el costo de la misma ronda los $20 mil, mientras que los programas de empleo ofrecen solo $10 mil mensuales.
Por último, pide que si bien ahora todos los organismos de salud se abocan a la pandemia por el virus Covid 19, «hay una situación de alerta, no se puede abandonar todo lo que tenga que ver con el monitoreo del desarrollo y crecimiento de les niñes y adolescentes».
En la presentación vía Zoom del Indicador Barrial de Situación Nutricional, el Director del ISEPCi, Isaac Rudnik, hizo hincapié en que “la crisis alimentaria se conjuga con la pandemia y agrava la posición de las personas en situaciones de malnutrición” ya que quedan más expuestas a los contagios del virus. “Una situación no es prioritaria a la otra, sino que van juntas y hay que luchar por resolverlas”, concluyó.
Para acceder al informe completo ingresá desde el siguiente link: https://isepci.org.ar/ibsn/