El presidente de la Nación, Javier Milei, confirmó la continuidad de María Marcela Gorosito al frente de la Dirección Ejecutiva del Museo Sitio de Memoria ESMA, ubicado donde funcionó la Escuela de Mecánica de la Armada, el mayor centro clandestino de detención del país durante la última dictadura cívico militar. En septiembre, el mismo fue declarado Patrimonio Mundial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
La medida fue tomada por medio del decreto 149/2024, firmado por el Presidente y el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, publicado en la edición de hoy del Boletín Oficial.
La historia del Museo Sitio de Memoria ESMA
El Museo Sitio ESMA es un organismo descentralizado que funciona en el ámbito de la Secretaría de Derechos Humanos del Ministerio de Justicia de la Nación. Fue incluido en la lista del Patrimonio Mundial de la Unesco, al ser considerado un lugar con un “valor universal excepcional”.
Inaugurado en mayo de 2015, es representativo de la represión ilegal llevada a cabo y coordinada por las dictaduras de América Latina alrededor de 1970 y 1980, sobre la base de la desaparición forzada de personas.
El espacio tiene el objetivo de vivenciar los testimonios que remiten a los crímenes de lesa humanidad que se cometieron en lo que fue la Escuela de Mecánica de la Armada. Está situado en el barrio porteño de Núñez, donde funcionó el centro clandestino de detención más grande que operó en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires durante la última dictadura cívico militar.
Unas 5.000 personas detenidas-desaparecidas pasaron por la ex ESMA, muchas de ellas fueron arrojadas vivas al mar en los llamados “vuelos de la muerte”.
El negacionismo de la dictadura en el gobierno de Milei
Si bien se decidió la continuidad del espacio, durante una entrevista televisiva en noviembre, como candidata a vicepresidenta y con el negacionismo como bandera, Victoria Villarruel criticó que en el mayor centro de detención y exterminio de la dictadura funcione desde 2015 un Museo de la Memoria.
“Son 17 hectáreas que podrían ser disfrutadas por todo el pueblo argentino, sobre todo porque en su momento estaban destinadas a ser escuelas, y lo que más necesitamos son escuelas”, pronunció ignorando la decisión de la Unesco.
La ex diputada nacional solía visitar en la cárcel al exdictador Jorge Rafael Videla y desde el Centro de Estudios Legales sobre el Terrorismo y sus Víctimas (Celtyv) promovía el reconocimiento de los represores. En 2015, un juez procesó a su tío, Ernesto Villarruel, por presuntos secuestros en el centro clandestino de detención El Vesubio.