“Somos millonarios, tenemos un humedal urbano en la ciudad”, comenzó con la charla Erica Demicheli, integrante de la asamblea de Vecinas Autoconvocadas Humedal Urbano Génova (Vachug). Junto a Julieta Kolak, estuvieron presentes en el Mercado de la Ribera, en la ciudad bonaerense de Berisso, la tarde del domingo 14 de enero.
Ambas mujeres forman parte de Vachug, un grupo de vecinas autoconvocadas que trabaja por el cuidado del humedal urbano Génova. “Está tan cerca de la ciudad, de la parada del 214”, destacaba Érica al iniciar el conversatorio. Mientras en el Mercado de la Ribera se desarrollaba la feria artesanal, en un costado (y junto a lo que queda de canal), Érica y Julieta hablaron sobre el humedal. Junto a les asistentes, reflexionaron sobre cómo se entrelazan sus vidas en ese ecosistema, y qué se puede hacer para mantenerlo.
Nota al Pie dialogó con las representantes de Vachug, que se encargaron de destacar la importancia de “cuidar cada centímetro, cada espacio verde, cada curso de agua por más pequeño que sea, ya que cumplen funciones ecosistémicas”.
El humedal Génova
“¿Qué se perdió con el cemento? Capaz el hogar de un ave, un insecto colonizador”, instaron a repensar Erica y Julieta a les presentes. Además, explicaron en la charla que “todo Berisso es un humedal”.
La charla se llevó a cabo en las cercanías del río. Al lado del sitio elegido pasa un canal muy finito, parte del Humedal Génova. Las integrantes de Vachug explicaron a este medio que cada vez se intenta tapar más ese pequeño hilo de agua, con pasto o escombros.
“El Mercado de la Ribera trata de salvaguardarlo”, detallaron y agregaron que “con su flora espontánea, sobre todo cuando viene el municipio y la arrasa, al hacer esas supuestas limpiezas”.
Aseguraron que al “limpiar” los espacios verdes, el gobierno municipal arrasa con la vegetación, con la posterior muerte de animales que vivían en canales como el que linda el Mercado de la Ribera. Esa es una de las luchas principales de Vachug, concientizar a los vecinos (y al Municipio) sobre cómo limpiar el humedal.
“Puede ser que alguien no sepa cómo cortar ni que es lo que está cortando”, reconocieron Julieta y Érica. “Por eso se le presentó al intendente de la ciudad un plano de humedal urbano, nos ofrecimos para capacitar gratuitamente”. Sin embargo, no tuvieron respuesta.
Desde Vachug piden que se preserve desde la costa un metro y medio de vegetación, donde andan los animales y se producen los nacimientos. “Después si se podría cortar el pasto, poner tachos de residuos”, agregaron.
Las tareas de Vachug
Este movimiento berissense nació en plena pandemia, ante la tala indiscriminada de vegetación en la ciudad. En 2020 tuvieron su primera jornada de limpieza, autoconvocada y difundida por el boca en boca. “Convocamos 70 personas y sacamos 70 bolsas de residuos en 4 cuadras”, recordaron Erica y Julieta.
Una de las tareas de Vachug es realizar jornadas de limpieza y de reconocimiento de la flora y fauna local. Además, brindan charlas y talleres, siempre de forma gratuita y autogestionada.
A su vez, llevan adelante una campaña de realización de murales que se llama “Pintamos la ciudad de conciencia ambiental”. De esa forma, ya llevan 15 pintados de forma colectiva, donde una institución y hogar privado brinda su pared, les artistas locales piensan el diseño y luego se plasma.
En otras ocasiones, organizaron jornadas de plantaciones de árboles. No obstante, destacaron lo importante del seguimiento en estos casos. “Aparte de sacar una foto, es necesario después ir a regarlos”, resaltaron.
En definitiva, el objetivo de Vachug es cuidar el ambiente donde se mueven les berissenses. “Con los efectos del cambio climático es necesario poner el ambiente en la agenda, con la importancia que conlleva “, concluyeron.