Este jueves, las Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora realizaron, junto a diversas organizaciones sociales, la edición 43° de su tradicional Marcha de la Resistencia.
La convocatoria, que se lleva a cabo en la Plaza de Mayo, incluyó un festival de música y teatro en defensa del derecho a la protesta, en donde se volvió a reclamar por los “30 mil detenidos y desaparecidos”.
En las primeras horas de la jornada, se llevó a cabo una charla sobre la “criminalización de la protesta social” en la que participaron reconocidas personalidades de la lucha por los Derechos Humanos.
Más tarde, se organizó una mesa de charla sobre el reclamo de la apertura de los archivos de la represión. Allí, integrantes de Encuentro Memoria, Verdad y Justicia (EMVyJ) informaron sobre el estado de los juicios que los organismos de derechos humanos llevan adelante.
El testimonio de un sobreviviente
Carlos Meza, sobreviviente de la Escuela Mecánica de la Armada (ESMA), destacó la importancia de estas acciones legales para los familiares y compañeres de las víctimas del terrorismo de Estado.
El militante y ex detenido hizo referencia a la lentitud de estos procesos que tienen como acusados a ex militares de la dictadura. En este sentido, expresó que “a algunos les va a llegar antes la muerte que la condena”. Por otro lado, pidió que el orden jurídico nacional termine de incorporar la figura del genocidio.
De la convocatoria también participaron Libres del Sur, la Central de Trabajadores de Argentina Autónoma (CTA-A) Capital, la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), el Encuentro de Memoria, Verdad y Justicia (EMVJ), la Asociación Gremial Docente (AGD-UBA), la Asociación de Enseñanza Media y Superior (ADEMYS) y el Partido Obrero.
Por otro lado, estuvieron presentes agrupaciones de izquierda, organizaciones de la sociedad civil y movimientos sociales que acompañaron la clásica ronda.
Para el cierre, se previó la presentación de la obra teatral Tintorero, en repudio a las condenas impuestas por la justicia contra César Arakaki y Daniel Ruíz, las cuales fueron recientemente ratificadas por el juez en lo Criminal y Correccional Javier Feliciano Ríos.
Se trata de dos militantes que fueron juzgados por participar de la movilización del 18 de diciembre de 2017 contra la reforma previsional que se votó durante aquella jornada en el Congreso de la Nación. La obra representa un alegato artístico de la defensa de ambos.
Las marchas por la resistencia tienen su origen en plena dictadura militar en el año 1981 y dieron lugar a sucesivas movilizaciones democráticas. Estas convocatorias exigían la liberación de los preses polítiques y la aparición con vida de les detenides y desaparecides durante el Golpe de Estado de 1976.