El 8 de noviembre de 2017 zarpó el submarino ARA San Juan (S-42) con 44 tripulantes y el 15 del mismo mes, tuvo su último contacto con la Armada Argentina.
El mismo fue encontrado, tras polémicas y controversias, un año después, el 17 de noviembre de 2018, todavía durante la presidencia de Mauricio Macri.
Alrededor de la tragedia, hubo causas judiciales donde Macri y la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) continúan en el ojo de la tormenta por presunto espionaje ilegal a familiares de las víctimas.
Aquel 8 de noviembre de hace seis años, el buque partió desde la Base Naval Ushuaia para dirigirse de regreso al puerto de Mar del Plata, recorrido que no completó tras tener como último contacto el día 15 a partir un incendio en el tanque de baterías que había sido controlado.
La desaparición del submarino tomó al entonces Ministro de Defensa, Oscar Aguad, en Canadá por un encuentro de las Naciones Unidas. Tras dos días de conocida la noticia, decidió regresar al país para seguir los acontecimientos.
El submarino que llevaba como tripulantes a 43 hombres y una mujer dejó de aparecer en los radares mientras navegaba a la altura del Golfo San Jorge. Finalmente, los restos fueron encontrados un año después a 597 kilómetros de la ciudad de Comodoro Rivadavia.
El buque, que sufrió desperfectos técnicos, fue encontrado en las profundidades del Atlántico sur con el casco “totalmente deformado, colapsado e implosionado”.
En tanto, la semana pasada, en el marco del día del submarinista, el Congreso de la Nación homenajeó a les 44 tripulantes del ARA San Juan. El acto fue presidido por el Ministro de Defensa Jorge Taiana con la presencia de familiares de las víctimas.
Durante la ceremonia se descubrió una placa conmemorativa que será colocada en el monumento que se erigirá en la Base Naval Mar del Plata. Además, el Almirante Guardia recibió los 44 Diplomas de Honor de por Cámara Alta, que serán entregados a los familiares de los submarinistas.
El ARA San Juan, su hundimiento y posterior localización
El último contacto que tuvo el submarino ARA San Juan con la base naval de Mar del Plata fue el 15 de noviembre de 2017 mientras navegaba por el litoral marítimo argentino.
Al día siguiente se hizo pública la pérdida de contacto, y posteriormente, se activó el protocolo SAR (búsqueda y rescate) con ayuda internacional por parte de Alemania, Brasil, Chile, Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Perú, Uruguay y Rusia, entre otros.
Finalmente, el 30 de noviembre cesó la búsqueda al considerar las nulas posibilidades de encontrar a la tripulación con vida ante el disgusto de las familias que negaron un duelo nacional hasta encontrar el submarino.
Tras un acampe de 50 días por familiares de los marinos se retomó la búsqueda del submarino casi un año más tarde. Para ello se contrató a la empresa estadounidense Ocean Infinity que comenzó a operar desde el 6 de septiembre de 2018 hasta el hallazgo el día 17.
El buque se encontró a más de 900 metros de profundidad y a 500 kilómetros de la costa patagónica.
Macri, la AFI y la causa por espionaje
Con el cambio de gobierno, el presidente Alberto Fernández ordenó la intervención de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) a través de Cristina Caamaño.
Como resultado, en septiembre de 2020 se encontró material que daba cuenta de actividades de seguimiento y espionaje a los familiares de la tripulación del submarino por parte de agentes del organismo.
En diciembre de 2021 se dictó el procesamiento tanto de Macri como de Gustavo Arribas y Silvia Majdalani, quienes encabezaban la AFI. Las causas se tramitaron en los tribunales de Comodoro Py para que en julio de 2022 la Cámara Federal Porteña compuesta por Mariano Llorens, Pablo Bertuzzi y Leopoldo Bruglia les dictaran el sobreseimiento.
Si bien se reconocieron tareas de inteligencia sobre las familias que protestaban por la desaparición del submarino, alegaron que no fueron ilegales por estar involucrada la “seguridad presidencial”.
Esto fue rechazado por la querella y apelaron ante la Cámara de Casación, la cual convocó para el 30 de agosto último a una audiencia para resolver los sobreseimientos.
En la misma, participó el CELS como amicus curiae: “Planteamos que la persecución y el espionaje que sufrieron las víctimas constituyen delitos muy graves y que la cámara de apelaciones los convalidó arbitrariamente”, advirtieron.
El Consejo de Guerra aplicó los únicos castigos
A seis años del hundimiento del ARA San Juan, las únicas sanciones fueron aplicadas por el tribunal militar a cinco altos oficiales de la Armada Argentina.
Las medidas de orden “disciplinarias” al interior de las fuerzas son los únicos castigos de lo sucedido. El 22 de marzo de 2021 el tribunal militar dio a conocer las sanciones sobre quienes tenían responsabilidad sobre el submarino.
De este modo, se ordenó la destitución del exjefe del Comando de la Fuerza de Submarinos, el capitán de navío Claudio Villamide por “negligencia”. La otra penalidad más relevante fue la del arresto por 45 días al exjefe de la Armada, Marcelo Srur, por informar de modo “incompleto” al Ministerio de Defensa sobre los sucesos acontecidos con el submarino.