Este 20 de febrero, las familias del partido bonaerense de José María Ezeiza se reencontraron con los tan esperados corsos, en un encuentro marcado por la añoranza y la alegría del carnaval, que se repite cada año con mayor emoción. En esta oportunidad, la fiesta tuvo como epicentro el Anfiteatro Plaza La Unión, ubicado entre las calles Goya y La Merced.
Puestos de comida, artesanías y maquillaje artístico le dieron su impronta al espacio, al igual que la clásica espuma en aerosol que fue, entre otras cosas, lo más esperado del evento. La entrada al anfiteatro fue de acceso libre y gratuito, y al aire libre para el deleite de les presentes.
La previa fue una fiesta
A las 19, se dio por comenzado el acontecimiento popular con la presentación de la banda “Suena la UR”. A continuación, se incitó a que el público se acerque al escenario con una lluvia de “nieve”.
Al mismo tiempo, dentro del predio en el que se concentraba la gente para festejar, les niñes presentes comenzaron una guerra de espumas entre elles y quienes pasaban por allí, “ligando”, inclusive, los animales. Asimismo, la gente alrededor atinaba a disfrutar de la música bailando, conversando y riendo.
Artistas locales y una murga muy original
Para las 20:15, se presentó la banda de Carlin Chatarra con una canción típica de este último tiempo: “La Cumbia de los Trapos”. Dicha interpretación generó conmoción y festejo entre las personas presentes.
Posteriormente, alrededor de las 20:30, el escenario volvió a iluminarse juntó al cielo nocturno del barrio de La Unión con la cantante Aylu Lobos, que se presentó al unísono con el tema de Dalila, “Dejémoslo así”.
Asimismo, continuó haciendo bailar a la gente con su interpretación de “Otra noche”, de Los Ángeles Azules, y «No es mi despedida«, de Gilda, entre otras canciones. Además, invitó a varies niñes al escenario para que la acompañen al compás de la música.
Finalmente, y como un gran broche de oro a la fiesta carnavalesca, se presentó la esperada comparsa “Los Unidos de Ezeiza”, conformada por personas de distintas edades y sus familias. Luego de su presentación en el espacio, continuó su recorrido por el icónico Puente “La Trocha” (entre las calles Chile y el Dorado), sobresaliendo por sus trajes y paraguas iluminados con luces de colores.
Los corsos, un espacio para el encuentro
Una de las cosas que más destacaron les artistas que pasaron por el escenario fue el año en pandemia, que impedía la realización del corso festivo. Sin embargo, dejaron en claro que ninguna pandemia dejaría de lado los festejos y la alegría que generaba llevarlos a cabo como cada año.
Como dato de color, a lo largo de estos festejos se observaron mateadas grupales en los distintos puntos de la plaza, manteniéndose ese ambiente festivo y familiar que caracteriza a los corsos.
Los corsos continuaron en Ezeiza
Este martes 21, el corso se llevó a cabo a partir de las 19 y tuvo como invitades a les artistas locales Jorge Romero, Anny Rasta, Andy Lucero y La BDN. Además, se presentaron en el anfiteatro local las murgas “Los indecisos del Barrio la Flecha” y “Los Inquietos de Tristán Suárez”.