El pasado miércoles culminó un histórico juicio en el que se condenó a 19 represores. Los mismos están involucrados en delitos de lesa humanidad cometidos en el predio de Campo de Mayo durante la última dictadura cívico militar eclesiástica.
Durante la etapa de terrorismo de Estado sufrida por el país, existió una red nacional de Centros Clandestinos de Detención, Tortura y Exterminio de personas (CCDTyE). Estos sitios se usaron para llevar a cabo el plan que buscaba dar fin a todo tipo de oposición política.
Los sitios que conformaban el sistema de detenciones de Campo de Mayo
En Campo de Mayo, localidad perteneciente al partido de San Miguel, provincia de Buenos Aires, funcionaron cuatro espacios en donde se violaron diversos derechos humanos. Según investigaciones, fueron cerca de cinco mil las personas detenidas de manera clandestina en este predio.
Los espacios que conformaron el mecanismo estatal de represión de Campo Mayo fueron El Campito, también llamado Los Tordos; el Hospital Militar; Las Casitas y la Prisión Militar de Encausados. Integraron lo que se conoció como Zona de Defensa IV, un comando del Ejército. Otro sitio involucrado en esta oscura historia es el Aeródromo Militar.
El Campito estaba conformado por tres edificios y un galpón. Allí fueron trasladades miles de detenides, quienes sufrieron terribles torturas y fueron sometides a condiciones inhumanas. Las personas, privadas de su libertad, fueron encapuchadas y encadenadas en antiguas caballerías.
Entre 1976 y 1978, hubo, en ese sector, más de cuatro mil víctimas de estos tormentos. De ellas, sólo menos de 50 sobrevivieron, por lo que se trató de uno de los centros más usados por la dictadura para sus sistemas de exterminio.
Dicho cautiverio tenía características de total encierro, con ventanas tapadas y consecuente ausencia de luz natural. Poseía permanente luz artificial proveniente de lámparas.
Como ocurrió en otros CCDTyE, al ingresar la identidad de los prisioneros y las prisioneras era removida y reemplazada con un número identificatorio.
Lo ocurrido en el Hospital Militar y en el Aeródromo
A su vez, la importancia de las investigaciones posteriores en Campo de Mayo reside en el centro de maternidad clandestino montado en el lugar. Este centro operó a mitad de 1977 en el Hospital Militar. El pasado mes de junio, la Secretaría de Derechos Humanos señalizó al edificio como sitio de memoria.
En el edificio se realizaron cesáreas de manera ilegal y clandestina, sin constatar datos sobre las mujeres embarazadas. Estos hechos derivaron en otra atrocidad acontecida en la dictadura: el robo y apropiación de bebés.
En relación a lo ocurrido en el Aeródromo, la resolución judicial efectuada esta semana sostuvo que el Ejército Argentino usó también el área para llevar a cabo actividades ilegales.
Durante la última dictadura, Campo de Mayo fue el sitio elegido para albergar el operativo de exterminio. Alrededor del año 1976, decenas de personas fueron detenidas, drogadas y ubicadas en aviones que partieron desde dicho predio. Muchas de estas personas fueron arrojadas de los aviones al mar, aún con vida. Estos sucesos se conocen como “vuelos de la muerte”.
Respecto a esta causa, el fallo histórico del pasado lunes condenó a cadena perpetua a cuatro ex militares implicados: Luis Valle Arce; Santiago Omar Riveros; Eduardo María Lance y Delsis Ángel Malacalza.
Por otro lado, hubo otros dos sitios más que conformaron la red de CCDTyE de Campo de Mayo. Se trata de Las Casitas (Destacamento de Inteligencia 201) y de la Prisión Militar de Encausados. El primero funcionó como centro transitorio de detención, y tenía conexión operativa con El Campito. En tanto el segundo fue dirigido por el comandante de Gendarmería, Darío Correa.