En el día de ayer, se realizó el primer “Encuentro por el Cine y los Recursos desde el Estado”. La actividad se llevó a cabo en el Auditorio del Anexo del Senado de la Nación y fue organizada por la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas de la Argentina. En el encuentro se conversaron las actuales políticas de Estado y la asignación de recursos para el cine.
El debate estuvo coordinado por Hernán Findling, presidente de la Academia. Además contó con la participación de Diego Rossi en representación del diputado Pablo Carro, impulsor de la modificación del artículo 4° de la Ley 27.432, Vanessa Ragone, presidenta de la Cámara Argentina de la Industria Cinematográfica (CAIC); Gustavo López, el vicepresidente del Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM) y Jorge Álvarez, vicepresidente de la Agencia Córdoba Cultura del Gobierno de Córdoba y director del Polo Audiovisual Córdoba.
Caducidad del fondo cinematográfico
“Estamos convencidos de que al estar compuesta por experimentados y reconocidos profesionales de las diversas ramas de la industria tenemos mucho para decir, proponer y ayudar a mejorar nuestra realidad audiovisual Argentina”, fueron las palabras de Hernán Findling al abrir la actividad.
El presidente de la Academia continuó diciendo que es por este motivo que esta “flamante comisión directiva” se empezó a reunir, ya que buscaban colaborar en la discusión de las políticas que estén referidas al sector audiovisual siendo y tomando este como el puntapié inicial de varias cuestiones importantes que hay que modificar para cambiar y mejorar en referencia a lo audiovisual.
Uno de los primeros temas que se abordaron fue en relación a la caducidad del fondo de fomento cinematográfico. Una pérdida que no solo afectaría al mundo cinematográfico sino que también se verían perjudicados el Instituto Nacional del Teatro, El Instituto Nacional de la Música, las bibliotecas populares y la Defensoría del Pueblo, entre otros.
Por su parte, el diputado Diego Rossi manifestó: “Hoy estamos acá porque no se ha podido aprobar el proyecto de ley”, y, al mismo tiempo, agregó que “es muy difícil lograr consensos para el tratamiento de proyectos”, principalmente en épocas de pandemia.
En tanto, Rossi afirmó que con el diputado Carro decidieron que el proyecto se llame “Asignaciones específicas para las Industrias culturales”, entendiendo que afecta a toda la cultura del país.
No obstante, el diputado aseguró que, a pesar de que todavía la ley no pudo ser sancionada, con Carro siguen insistiendo para que el proyecto sea aprobado y de esta forma la industria cultural pueda recibir los fondos necesarios para que se siga promoviendo.
Identidad cultural
Por su parte, Vanessa Ragone, presidenta de la Cámara Argentina de la Industria Cinematográfica (CAIC) remarcó que “en los países escandinavos sí hay ayudas públicas para su cine, para sus actividades culturales”, dejando en claro que es gracias a ese apoyo que da el Estado que se llevan las grandes producciones argentinas.
“Es una exportación de servicios. Es decir, nada de eso queda como producto nacional, todo eso tiene el copyright, los derechos de la plataforma”, analizó Ragone, en relación a la cantidad de producciones que se están realizando en el país, pero que la gran mayoría no son de la industria argentina.
Según la presidenta de la Cámara esto deja en evidencia la ausencia y el poco presupuesto que se le da al cine independiente para crecer. En ese sentido, opinó que es fundamental que se den estos debates y que se abran estos espacios, ya que la situación es delicada y es importante contar las “historias que queremos”, poniendo como ejemplo las series de Maradona y Bilardo, ambas producciones realizadas por empresas extranjeras.
“El privado desde mi punto de vista no debe reemplazar el rol del Estado y mucho menos en relación a lo cultural. No hago más que volver a compartir con vosotros una preocupación qué es muy grande y que nos debería impulsar a todos a tratar de hacer todo lo que esté en nuestras manos”, concluyó Ragone.
Defender la cultura
Durante el encuentro, les disertantes presentes coincidieron que uno de los puntos fundamentales es, además de que se logren consensos para que la ley sea aprobada, la identidad cultural.
En ese orden, el vicepresidente del Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM), Gustavo López, señaló: “Para existir como entidad política soberana necesitamos la identidad cultural y más aún en un mundo totalmente globalizado. Para evitar las imposiciones culturales, es la misma cultura quien se defiende para proteger su identidad”.
Por último, López manifestó que la “prueba de eso es la Convención sobre la Protección y Promoción de la Diversidad Cultural de la UNESCO, donde rescata la idea de preservar la identidad cultural. Por eso, el debate es mucho más profundo que si tenemos o no trabajo”.