Alejo Gayraud fue uno de los protagonistas de la consagración de Barracas Central en la Liga Nacional de Futsal Argentina. El futbolista juvenil tuvo una gran actuación en el torneo federal de la disciplina y aportó su cuota goleadora.
Nota al Pie dialogó con el jugador sobre sus inicios en el 40×20, su debut en la máxima división con la camiseta de Pinocho, lo relevante que es su familia en su día a día y sus anhelos con el deporte.
Gayraud y su formación en el futsal
Desde los 4 años, Alejo corría tras una pelota y su formación inició en el “baby fútbol” en el Club Social y Deportivo Pinocho ubicado en Manuel Pedraza 5139, Buenos Aires. Luego, continuó con su preparación en la octava división de futsal (primera categoría de la disciplina), donde fue evolucionando año tras año y tuvo su debut en la máxima división en la temporada 2020, en plena post pandemia del covid-19.
En ese momento todo era difícil porque la situación era inestable y además no podía haber público presente en las tribunas. “Fue todo muy raro, no podía estar mi familia. Teníamos que estar todo el tiempo con barbijo. Pero igualmente lo viví contento, de la mejor manera porque por fin pude debutar en primera”, expresó. En ese mismo sentido, señaló que tuvo un mix de emociones “estuve contento, feliz y a la vez una situación extraña y atípica”.
Su buen rendimiento lo mantuvo en el club de su formación hasta mitad de la temporada 2021, cuando el destino lo llevaría a Boedo para vestir la camiseta de San Lorenzo por media temporada para jugar una copa. Luego, migró a la segunda división en el Talar durante las temporadas 2022 y 2023.
Sin embargo, este año se convirtió en uno de los refuerzos de Barracas Central, donde a sus 22 años sumó su primer título en la máxima categoría y sobre todo fue protagonista. “Uno siempre trata de visualizarse en estas situaciones de la mejor manera. Haber podido cumplir ese deseo saliendo goleador del equipo y segundo de la Liga Nacionales es un orgullo”, expresó Gayraud.
Su presente y los sueños a cumplir con el futsal
El trabajo diario de Alejo Gayraud va dando frutos. No solo se entrena con el equipo del Barraqueño por las mañanas, también trabaja part time por las tardes y vuelve a entrenar de forma personal para la parte física. Si bien su presente es el fútbol de salón tiene en claro que le gustaría estudiar: “Me gustaría algo sobre el deporte, el futsal ó el fútbol. Me gusta mucho aprender todo tipo de cosas relacionadas con el deporte”
El nacido en San Martín de Villa Maipú basa su esfuerzo en su sueño principal con la disciplina, que es vestir la camiseta de la selección argentina. “No tiene comparación poder representar a tu país”, sostuvo. Si bien su meta es llegar a defender los colores de la Albiceleste, destacó que hasta el momento lo más memorable que le ha regalado el deporte es el título con Barracas. El título de Liga Nacional tiene el podio número uno al ser el más importante hasta el momento en lo profesional.
Gayraud creció con el “jogo bonito” de Ronaldinho, quien es su ídolo futbolístico e incluso lo tiene tatuado en su piel. Por ello, Alejinho, como lo conocen sus amigos, surgió como fusión de su nombre y del seudónimo de su ídolo brasilero. El juvenil tiene habilidades dentro del parqué que también le significaron otro apodo: “Hago siempre una jugada que me caracteriza es una balanza más un salto y de ahí quedó: Canguro”.
El ex jugador de Pinocho destacó que su familia le inculcó los valores y la dedicación que tiene que tener un jugador de futsal profesional. “Yo no sé si hubiese llegado hasta acá sin ellos porque son mis pilares, mi mamá y mi hermana. Las que están en las buenas, en las malas, en las no tan buenas, en mis mayores alegrías”, explayó. Además, recordó: “Tengo muchos recuerdos de chiquito con mi familia, de campeonatos en mis inicios, donde mi familia siempre estuvo presente”.
En menos de dos meses, Gayraud tendrá otra gran experiencia en el 40×20, se trata del certamen más importante que tiene la disciplina a nivel clubes, la Copa Libertadores de Futsal. “Se armó un grupo muy lindo, ya lo demostramos en la Liga. Vamos a dar pelea al que se presente, siempre con respeto y dedicación yo creo que vamos a lograr grandes cosas”, sostuvo.
“El futsal es mi vida. Toda mi vida me la pasé jugando, entrenando, para dedicarme al futsal y tratar de vivir de esto”, expresó dejando ver su pasión por el deporte de salón.