El problema migratorio de distintos países latinoamericanos se transformó en un problema desordenado y sin solución. Es por ello que diez gobiernos latinoamericanos acordaron en México un plan frente a la migración.
Los países latinoamericanos participaron en el «Encuentro Palenque, por una vecindad fraterna y con bienestar”, desarrollado en la ciudad mexicana de Chiapas.
Del encuentro formaron parte dirigentes y autoridades de Belice, Colombia, Costa Rica, Cuba, El Salvador, Haití, Honduras, México, Panamá y Venezuela.
En el mismo se firmaron 14 puntos de acuerdo entre los que destacan la elaboración de un plan de desarrollo que se adecúe a la realidad de cada nación con el fin de solucionar las causas estructurales de la migración.
Entre los cuales se encuentran la autosuficiencia y soberanía alimentaria fortaleciendo el sector agrícola, promover el empleo digno y desarrollar las capacidades técnicas y tecnológicas en la educación.
También instaron a los países de destino a que se comprometan a adoptar “políticas y prácticas migratorias acordes con la realidad actual de nuestra región y abandonen aquellas inconsistentes y selectivas, para evitar producir arbitrariamente tanto ‘efectos llamada’ como ‘efectos disuasivos’, tales como la regularización de ciertas nacionalidades”.
México fue el anfitrión e impulsor de la reunión ya que los números son alarmantes: entre enero y agosto pasado en el país fueron detectadas 402,324 personas en situación migratoria irregular en México, lo que significó un aumento de 61.7% con respecto al 2022. Según datos del Instituto Nacional de Migración (INM).
La elección de la sede no fue casualidad, ya que en los primeros ocho meses de 2023, la entidad con más casos reportados fue Chiapas con 132,250 casos, el equivalente al 32.8% del total registrado.
Declaraciones
El anfitrión y presidente de México, Manuel López Obrador, escribió en sus redes: “El Encuentro de Palenque, por una vecindad fraterna y con bienestar es una convocatoria a sumar esfuerzos, voluntades y recursos para atender las causas del fenómeno migratorio”.
Además, señaló que “se trata de un asunto humanitario en el que tenemos que trabajar unidos. Presidenta, presidentes y primer ministro: cuenten con nuestra cooperación en todo lo que se necesite”.
En medio de la elección opositora en Venezuela, Nicolás Maduro dijo presente y calificó al encuentro como “extraordinario”. Y describió: “Analizamos las causas de la migración, los efectos negativos de las medidas coercitivas ilegales contra nuestros pueblos y de la atención a la realidad migratoria enfocada en los DDHH”.
Finalmente destacó: “Avanzamos conjuntamente con planes concretos de responsabilidad compartida por la estabilidad de los pueblos”.
El presidente cubano, Miguel Díaz Canel, apuntó directamente a Estados Unidos advirtiendo “sobre la responsabilidad del Gobierno de EEUU con la incitación permanente a la migración irregular de los cubanos que llegan a sus fronteras, con medidas de asfixia económica y facilidades para los migrantes de nuestro país”. Luego instó a trabajar por “una migración regular, segura y ordenada”.
Quienes también firmaron la Declaración de Palenque fueron los cancilleres de Colombia, Panamá y Honduras. Los cuales destacaron la existencia de un diálogo franco entre todas las partes involucradas. Además, reconocieron los problemas de las políticas migratorias en sus países.
Félix Ulloa, vicepresidente de El Salvador, dijo que la Declaración de Palenque representa un antes y un después en la política migratoria regional. Además, detalló que se habló de la migración forzada y la voluntad de atacar las causas de origen de la migración.