Durante las últimas horas, les trabajadores de la salud del Hospital Nacional Posadas denunciaron que los centros de salud pública de la Provincia de Buenos Aires se encuentran en estado de emergencia.
La Asociación de Profesional (APS) y la Asociación Sindical de Profesionales de la Salud Seccional Posadas (Cicop Posadas-Fesprosa) sacaron un comunicado en conjunto donde expresan que la crisis sanitaria se está agudizando en los hospitales públicos bonaerenses, así como también la precarización laboral en La Matanza.
Para conocer más acerca de esta problemática, Nota al Pie dialogó con María Rosa Rodríguez, presidenta de APS en dicho municipio.
La situación en los hospitales públicos
Desde APS aseguraron que “asistimos a un inexorable desmantelamiento y vaciamiento” del sistema público. No obstante, detallaron que los salarios están por debajo de la línea de pobreza, con médicos que ganan $1100 por hora y que renuncian en busca de mejores horizontes.
En el mismo comunicado indicaron que “los hospitales y centros de salud se caen a pedazos por la falta de mantenimiento y de insumos”. Y, a su vez, que “las guardias están colapsadas por la falta de personal”.
Por su parte, desde Cicop denunciaron que, ante el aumento exponencial de las consultas, producto de las enfermedades virales estacionales, la respuesta de la gestión del hospital nacional “no estuvo a la altura”.
En ese marco, indicaron que, ante la precariedad de los hospitales, tanto provinciales como municipales, el Posadas se convirtió en un “cuello de botella” con guardias pediátricas recargadas.
“El Sor Ludovica, hospital de niños de La Plata, y el Hospital Ramón Exeni de San Justo, en La Matanza, son la clara expresión del vaciamiento”, aseguró María Rosa Rodríguez, presidenta de APS de La Matanza.
Sin embargo, precisó que “en La Matanza esto comenzó hace 10 años y se profundizó en los últimos cinco, con la depreciación del salario, la precarización laboral y las malas condiciones laborales”.
Renuncias masivas
“Hoy nadie quiere quedarse a trabajar en la provincia de Buenos Aires, tampoco está bien la salud pública del país, pero en la provincia se ha profundizado el vaciamiento de los hospitales de una manera enorme”, indicó Rodríguez respecto a la situación de los nosocomios bonaerenses.
Además, aseguró que hoy “el vaciamiento visible son los hospitales pediátricos”. Tal es así que en las últimas semanas más de 20 pediatras renunciaron en el Hospital de Niños de San Justo.
De acuerdo a lo expresado por Rodríguez, dichas guardias se vaciaron porque “están llenas de monotributistas que ven peligrar su salud mental, su vida personal, comprometidos a trabajar fuera de horario, con un horario extenso y una precarización que los condujo a tener tres, cuatro o cinco empleos”.
Además, la presidenta de APS contó que, de manera reciente, la jefa de pediatría del Hospital Germani renunció “porque salía a la calle a protestar, a reclamar para recuperar su Hospital, su servicio y fue perseguida”.
Detrás de ella hubo una renuncia masiva de casi todes les pediatras. “Si eso es gestión por parte del Hospital, que me digan cómo se hace para recuperar a los médicos que se perdieron”, insistió la trabajadora de la salud.
A ello se suma que cada vez hay menos psicólogos y psiquiatras, “la expresión de una sociedad que no da respuesta son los niños, los adolescentes abandonados, con intentos de suicidio, la Ley de Salud Mental que no se cumple”, cuestionó Rodríguez. También detalló que escasean les odontólogues porque “no hay elementos ni insumos”.
Sin ninguna respuesta
Desde APS adjudicaron la responsabilidad de esta situación al gobierno municipal, al cual denuncian ser “ajeno a los intereses en la atención de la salud de sus pobladores”.
En esa línea, aseguraron que el “primer responsable es el intendente Fernando Espinoza, que no ha dado respuesta alguna al reclamo de años de los trabajadores y de la población”.
Al respecto, Rodríguez desarrolló: “Las salas de salud vaciadas, sin guardias, sin clínicos y pediatras, sin atención primaria, en consecuencia, esto genera que el vecino requiera la respuesta de los hospitales de nivel 2 y el Hospital General de Niños, usados para tapar agujeros”.
Si bien el intendente Espinoza fue advertido en varias oportunidades por APS sobre la situación del hospital a partir de notas, paros y otros recursos accesibles, todavía no ha brindado una respuesta.
De acuerdo a Rodríguez, el mismo “ignora el deterioro progresivo del sistema de salud del pueblo de La Matanza”, aunque tampoco se ha referido a la situación la Secretaría de Salud Pública municipal, conducida por la doctora Gabriela Álvarez.