Tras la escandalosa salida en helicóptero del ex presidente Fernando de la Rúa, Argentina presenció uno de los procesos políticos más escandalosos: sucedieron 4 presidentes en 11 días. Ramón Puerta, Adolfo Rodríguez Saa, Eduardo Camaño y Eduardo Duhalde.
Desde Nota al Pie, analizaremos los procesos inflacionarios desde el 2001 hasta la actualidad, partiendo desde los cuatro presidentes que estuvieron tan solo menos de una semana.
El escandaloso proceso presidencial
Con la derogación de Estado de sitio y su salida por la azotea del Congreso de la Nación, Fernando de la Rúa, renunciaba a su candidatura como presidente tras el fuerte estallido social. El mismo 21 de diciembre de 2001, Argentina se encontraba sin un mandatario.
Ese día, Ramón Puerta asumió la presidencia ya que era el presidente provisional del Senado. Como lo establece la Ley 20.972, “En caso de acefalía por falta de Presidente y Vicepresidente de la Nación, el Poder Ejecutivo será desempeñado transitoriamente en primer lugar por el Presidente Provisorio del Senado”.
Asimismo, Puerta convocó a una Asamblea Legislativa para elegir a un nuevo presidente. El 23 de diciembre de 2001, se eligió a Adolfo Rodríguez Saa, del Partido Justicialista (PJ), con 169 votos a favor y 138 en contra.
El entonces gobernador de San Luis, prestó juramento hasta el 5 de abril del 2002, llamando a elecciones anticipadas para el 3 de marzo. “En primer lugar, anuncio que el Estado argentino suspenderá el pago de la deuda externa», dijo el ex presidente, en el Congreso de la Nación.
Entre algunas de las medidas que sostuvo, “el corralito” persistió. El descontento popular se hizo saber en las calles. Con una gran manifestación en Plaza de Mayo y en otros puntos centrales, el mandatario viajó desde Mar del Plata a San Luis, donde allí hizo saber de su renuncia.
A quien le sucedieron la presidencia fue a Eduardo Oscar Camaño, quien ejercía como presidente previsional del Senado. En su corta aparición, llamó a una Asamblea Legislativa para el 1 de enero del 2002. Con 262 votos a favor, 21 en contra y 18 abstenciones, asumió Eduardo Duhalde. Su mandato duró hasta mayo de 2003. En su juramento expresó que, “A los afectados por el corralito les digo […] van a ser respetadas las monedas en que hicieron sus depósitos, es decir, el que depositó dólares recibirá dólares”.
Un nuevo rumbo en medio de una crisis
En medio de una economía en default, “El BCRA introdujo algunos controles en las transacciones y promovió una estrategia de intervención activa, vendiendo y comprando dólares en el mercado”, explicaron en el informe de la Bolsa de Comercio de Rosario.
Con la asunción del ex presidente Néstor Kirchner, el Estado se encontraba en medio de un default de la deuda pública externa y saliendo de la post-convertibilidad.
“Un aspecto negativo del proceso fue la aceleración de la inflación que empezó a experimentarse a partir de 2005. A medida que la economía se recuperaba, la inversión privada cobraba fuerza”, explicaron.
Dentro de algunas de las políticas económicas, Kirchner, canceló las obligaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI), alcanzó un superávit fiscal e incrementó las reservas monetarias del país.
En su primer año, el mandatario tuvo inflación anual del 40,9% y, para el 2003 fue del 3,7%. Frente a algunas políticas que implementó, se destacó que “el desempleo se redujo del 17,3% al 7,9% entre 2003 y 2008”.
El 10 de diciembre de 2007, Cristina Fernández de Kirchner asume la presidencia del país tras ganar las elecciones con más del 46% de los votos. “A partir de 2008, comenzó un período de devaluación progresiva de la moneda […] lo que llevó a una progresiva apreciación del tipo de cambio” contaron en el informe.
“El impacto de la crisis financiera internacional de 2008-2009, sumado al conflicto interno con el sector agropecuario y la sequía que afectó la cosecha, impactó fuertemente en el producto interno nacional”, sostuvieron.
Pese a que el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) se encontraba intervenido entre el 2007 y el 2015 por “severas carencias metodológicas”, los datos oficiales de inflación y otros índices no eran claros y precisos.
El cambio elegido
Según el informe de la Bolsa de Comercio de Santa Fe, la “inflación durante el 2017 se ubicó en un 24,7%, el menor registro desde el 2011”. Asimismo, aseguraron que la inflación acumulada de 2016 y 2017, están relacionados con los servicios públicos y segmentos altamente regulados.
Por otro lado, los números durante la presidencia de Cristina Kirchner muestran que “En los primeros meses del 2016 el Banco Central llevó a cabo una rígida política monetaria contractiva para combatir la inflación”.
Asimismo, las políticas del entonces Gobierno Nacional complicaron algunos de los objetivos para bajar la inflación. Entre ellas la liberalización del tipo de cambio (que resultó en fuertes depreciaciones del peso perjudicando en la suba de precios), reducción progresiva de los subsidios (que provocó repentinos aumentos en servicios públicos y de transporte).
El 10 de diciembre de 2015, Mauricio Macri asume la presidencia de la Nación. Una de las metas del gobierno fue “levantar las restricciones a la compra de dólares y se instauró un sistema de Metas de Inflación, con una política fiscal que debía tender a achicar el déficit limitando el gasto fiscal”, según la Bolsa de Comercio de Rosario.
“Frente a lo que parecía un default inminente, y luego de una contundente devaluación en pocos días, Argentina cerró un cuantioso acuerdo con el FMI para pagar deudas a acreedores privados”, sostuvieron.
Según el informe del INDEC de diciembre del 2019, la variación mensual de enero 2,9% mientras que en diciembre fue del 3,7%, por lo que, hasta esa fecha acumuló un total 53,8%.
Crisis económica y ajuste
El 10 de diciembre de 2019, Alberto Ángel Fernández, asume la presidencia. A mediados de abril, se conoció la inflación mensual que ronda el 7%. Pese a que, el gobierno anterior había tomado una deuda con el FMI, el actual gobierno continuó con políticas de ajuste.
“Argentina efectuó el canje de la deuda pública externa con fondos de inversión e inversores en general Esto fue complementado con un programa de esterilización de pasivos monetarios vía Lebac”, explicaron desde la Bolsa de Comercio de Rosario.
Según el último informe del mes de marzo del INDEC, la variación interanual llegó al 104.3% mientras que, en el primer trimestre de 2023 acumuló un 21,7%. Ahora bien, desde la asunción en 2019, Alberto Fernández lleva acumulado un 324% de inflación.
A manos del FMI, políticas de ajuste, una pandemia de por medio, la guerra de Rusia a Ucrania y la sequía, el Gobierno Nacional solo se comprometió a pagar la deuda del organismo internacional.
En ambas entregas, donde Nota al Pie analizó los gobiernos y sus inflaciones, se puede destacar que, en los últimos 40 años, la política monetaria ha decaído sistemáticamente. El pueblo argentino ha creído en sus dirigentes, pero, sin embargo, la inflación, la hiperinflación, los defaults y el corralito no fueron suficientes para masacrar el bolsillo del pueblo.
Para concluir, el proceso inflacionario ha ido creciendo en estos últimos años, condicionando la economía del país. Ahora quedará en manos del nuevo gobernante, aquel que asuma el próximo 10 de diciembre, dar soluciones al problema económico.