Ante la crisis educativa en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), las tomas en los colegios no sólo siguen vigentes, sino que este martes más instituciones fueron tomadas por alumnes. El pasado viernes 23 de septiembre a las 18:30, les estudiantes del Colegio Mariano Acosta, ubicado en el porteño barrio de Balvanera, resolvieron tomar la institución y permanecer allí por tiempo indeterminado.
Si bien este martes por la mañana levantaron la medida para permitir que otros ciclos puedan cursar, volverán a pernoctar para culminar la iniciativa con un abrazo simbólico.
Entre los motivos de la lucha se encuentran el reclamo por la calidad y cantidad de viandas; las mejoras edilicias y el rechazo a las prácticas laborales y educativas obligatorias tanto en empresas como en el sector público.
Este martes por la mañana, el Gobierno porteño informó que más colegios se sumaron a la protesta. De esta forma, se encuentran tomadas por alumnes la Escuela Normal Superior en Lenguas Vivas Sofía E. Broquen de Spangenberg, conocida como “Lengüitas”; la Escuela Superior de Educación Artística en Arte Cerámico N°1 y la Escuela de Educación Media Nº1 Federico García Lorca. También adhirieron estudiantes del Colegio N°3 Mariano Moreno; el Liceo N°5 Pascual Guaglianone; la Escuela de Educación Media Nº 3 Osvaldo Pugliese y la Escuela de Música Juan Pedro Esnaola.
Además, estudiantes de otros colegios evalúan un pernocte para este martes 27. Entre ellos, el Juan B. Justo, el Padilla; el Cortázar; la Falcone; el Normal 8 y los especializados en Danzas.
Por su parte, el Gobierno porteño aseguró que demandará a les padres que respaldaron esta medida de fuerza del estudiantado. Desde la administración encabezada por Horacio Rodríguez Larreta consideran que esta forma de protesta constituye un delito, ya que hay menores de edad en el edificio junto a adultos que no se sabe quiénes son.
Pero, al mismo tiempo, dicen desconocer todos los reclamos; y además afirman que no están abiertes al diálogo en estas circunstancias. De esta forma, imposibilitan llegar a un acuerdo que dé fin a las tomas.
Desde la administración porteña también señalaron que se trata de una demanda y una manifestación violenta y absolutamente política; menospreciando la capacidad de les chiques de tomar decisiones propias en favor de una mejor educación.
Una forma de visibilizar el malestar estudiantil
Son varios los motivos por los cuales les estudiantes del Colegio Mariano Acosta decidieron tomar esta medida de fuerza. Por un lado, sostienen que “con hambre no se puede estudiar”. En este sentido, denuncian que la cantidad de viandas que recibe la institución no alcanza para todo el alumnado, y que además es de mala calidad nutricional.
Al respecto, les estudiantes informaron que las viandas son sanguches de jamón y queso y, en ocasiones, solo de queso. Por eso, solicitan que se apruebe el proyecto “Ley Integral del Derecho a la Alimentación Adecuada en las Instituciones Educativas”.
Por otro lado, reclaman mejoras edilicias porque “hay un millón de cosas que están rotas; nuestro edificio es bastante viejo y necesita un montón de arreglos y nadie viene a resolverlo”, señaló Catalina, una de les estudiantes, a Télam. Allí asisten diariamente más de 2 mil alumnes.
Además, se oponen a las Acap (Actividades de aproximación al mundo del trabajo y a los estudios superiores) impuestas por el Ministerio de Educación porteño para quienes cursan el último año de la secundaria. Se trata de prácticas educativas tanto en empresas como en el sector público pero con la particularidad de que son obligatorias y no remuneradas.
A través de un comunicado, les estudiantes del Mariano Acosta explicaron: “Creemos inadmisible que se nos niegue el derecho a la educación al perder horas irrecuperables de clase y que se nos ponga en riesgo; al no ser acompañados por profesores responsables a las prácticas”.
En declaraciones a la prensa, la ministra de Educación de CABA, Soledad Acuña, expresó que no ha habido una instancia de diálogo previo a la toma. Pero, a su vez, manifestó que no dialoga con estudiantes que toman escuelas.
Padres, madres y tutores ¿responsables?
La ministra de Educación porteña informó que el Gobierno de la Ciudad va a demandar a los padres y madres de aquelles alumnes que participen de las tomas. Según este punto, las personas a cargo de les menores estarían avalando la medida de fuerza. En el caso del Mariano Acosta, ya son ocho les adultes que podrían tener que hacer frente a una demanda.
Además, indicó que deberán hacerse cargo de los costos por arreglos de vandalismo y del pago a les docentes que se les descontarán los días no trabajados. De esta manera, se desconoció por completo la importancia de los reclamos que efectúa el estudiantado.
A través de un formulario al que pudo acceder Nota al Pie, el Gobierno porteño convocó a padres y madres del Lenguas Vivas a una reunión con autoridades; “a fin de poder evacuar dudas sobre el proceso en marcha y asegurar que las escuelas estén abiertas”. Esto, como una forma de dividir las aguas y profundizar una grieta entre las partes mayores de edad involucradas en la situación.
El protocolo “anti-tomas”, desarrollado en 2018, indica que el rector de la institución debe comunicarse con las personas a cargo de los estudiantes para que pasen a retirarles. Quienes no lo hagan, o incluso permanezcan con elles dentro de la toma, deberán enfrentar consecuencias legales. En procedimiento indica que en primer lugar se da intervención al Consejo de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes; luego el Gobierno porteño, a través de la Procuración General, denuncia penalmente a cada adulte. La ministra recordó que en 2018 fueron 40 los padres, madres y tutores procesados ante la Justicia. Según las autoridades, la toma de colegios y/o el aval a la misma se trata de un delito.