A lo largo de estos meses, han sido continuas las conmemoraciones y homenajes a les ex combatientes por los 40 años de la Guerra de Malvinas. A lo largo del país, familiares y sobrevivientes llevan adelante diferentes actividades para seguir exigiendo justicia.
Sin embargo, hay actos que generan el repudio de las personas que buscan mantener viva la memoria de aquellos soldados. Un ejemplo de ello es el realizado recientemente por el Municipio de La Plata.
La municipalidad platense, coordinada por el Intendente Julio Garro, organizó un homenaje a dos militares acusados de cometer crímenes de lesa humanidad a soldados en el Regimiento y durante el conflicto en las islas. Desde la Comisión Provincial por la Memoria (CPM) repudiaron el acto.
El acto de la discordia
El acto denominado “El regreso de nuestros soldados de Malvinas”, dispuesto por el Municipio de La Plata, busca conmemorar a dos oficiales acusados de torturar a soldados en distintas instancias durante su estadía en el ejército.
La actividad, que estaba pautada para el pasado 9 de julio, fue trasladada para el próximo sábado. Sin embargo, ya se encuentran colocadas las placas conmemorativas: Juan Domingo Baldini y Darío Rolando Díaz son los nombres de la polémica.
Los oficiales Darío Ríos y Juan Baldini fueron acusados de torturar soldados durante los años de la guerra. Sus nombres fueron inscritos en una placa, en el predio del ex Regimiento de Infantería 7, junto al nombre de conscriptos caídos de las unidades de La Plata.
Sobre esto, la CPM en conjunto con el Centro de Ex Combatientes de Islas Malvinas (CECIM) La Plata denunció: “encierra un claro mensaje negacionista”. Asimismo difundieron que este acto, “desconoce la lucha por justicia de ex combatientes para que las torturas en las islas sean condenadas. Y resulta una afrenta a la memoria de los soldados conscriptos de Malvinas”
Además enfatizaron sobre el daño causado por sus perpetradores: “Esos jóvenes fueron a luchar sin preparación, con equipamiento viejo. Y que, además de los horrores de la guerra, tuvieron que padecer las torturas aplicadas por sus propios superiores”.
Baldini y Díaz: la causa sigue abierta
La causa que investiga los crímenes de lesa humanidad cometidos por los oficiales se encuentra a cargo de la Corte Suprema de Justicia. De esta forma se debe expedir la imprescriptibilidad de los delitos de lesa humanidad, que se funda en la necesidad de que estos no queden impunes.
En tanto, más de 180 personas declararon como víctimas o testigos de las torturas durante los años de guerra. Hay 130 militares argentinos imputados por esos crímenes; 3 de ellos procesados y otros 20 con llamado a indagatoria.
Es así que el subteniente Juan Domingo Baldini está acusado de estaquear a dos soldados en las islas y amedrentar a los soldados. Además, en una oportunidad, disparó con una ametralladora contra los combatientes argentinos que intentaban cazar una oveja para subsistir al hambre de las islas.
Siguiendo la causa, y según los testimonios, el cabo primero Darío Ríos empleaba prácticas abusivas durante el ejercicio militar; conocidos como “movimientos vivos”, que en muchos casos terminó con soldados hospitalizados. Sin embargo, se enfrenta a otras acusaciones aún más graves sin mayor detalle.
Por la Memoria y la Justicia
Las secuelas del terror marcaron para siempre a la sociedad argentina. Las familias de los combatientes que sobrevivieron a Malvinas sufren hasta el día de hoy las heridas de esta guerra. Gracias a diversos organismos de Derechos Humanos y la constante lucha social, sigue viva su memoria.
Bajo esos objetivos se desarrolla la Comisión Provincial por la Memoria (CPM), siendo un organismo público, autónomo y autárquico que promueve e implementa políticas públicas de memoria en derechos humanos.
Estas mismas tareas son llevadas también por el CECIM (Centro Ex Combatientes Islas Malvinas) de La Plata. Este espacio fue creado en 1982 por ex soldados conscriptos.
El mensaje de ambos organismos es dejar en claro y remarcar la gravedad de este acto. Por primera vez en 40 años, estos dos oficiales acusados de torturas serán homenajeados por el Estado municipal.
Consideran que: “Honrar la memoria de los oficiales acusados de estos crímenes es un acto de profundo desprecio por los principios de memoria, verdad y justicia que son una conquista del pueblo argentino y un pilar de nuestra democracia”.
Cabe resaltar, que el Municipio de La Plata, a cargo de Julio Garro, continúa haciendo caso omiso de las ordenanzas en materia de Memoria y Justicia. Estas ordenanzas son impulsadas por ex combatientes y votadas por unanimidad por el Concejo Deliberante.
Una de estas ordenanzas fue la reciente declaración como sitio de memoria al predio en donde funcionó el Regimiento 7. Este espacio fue recientemente señalizado por Nación como un lugar de tortura durante los tiempos de dictadura militar (1976-1983).