A partir de hoy, sábado y hasta el domingo se desarrollará el 5°to Congreso Nacional de Delegados y Delegadas de la Federación Nacional Campesina (FNC).
Los principales reclamos van por una Ley de arrendamiento, por un subsidio de emergencia para el sector y la entrega de máquinas, insumos y herramientas.
Además piden por tarifas diferenciadas de gas oil, electricidad, gas y agua, créditos accesibles con tasas subsidiadas y una Ley de relevamiento territorial originario con presupuesto.
Volver a encontrarse
El encuentro tendrá lugar en el Centro de Actividades “Roberto de Vicenzo” en calle 18 y 148 del partido de Berazategui en la Provincia de Buenos Aires.
Del mismo participarán, según comunicado oficial, más de 650 delegades de la Federación Nacional Campesina, provenientes de 18 provincias.
Esta reunión llega después de tres años sin poder reunirse debido a la pandemia del coronavirus la cual, como en todos los órdenes, afectó a este sector.
En este sentido, Nota al Pie entrevistó a un integrante de la Federación Nacional Campesina, Matías Bohl, quién explicó la situación.
“El objetivo del Congreso Nacional es poder encontrarnos después de tres años que no se realizó por la pandemia para evaluar el desarrollo en este lapso”, apuntó.
Respecto a la pandemia de Covid-19, Bohl contó el rol que jugó su sector: “nuestros campesinos y campesinas jugaron un rol clave durante la pandemia”; donde “hizo falta que en nuestros territorios originales se armaran comedores y merenderos, donde se peleó para que la vacuna llegue a todos”.
En este sentido, agregó que debieron pelear por “las condiciones básicas para que nuestros compañeros y compañeras puedan seguir produciendo”.
De este modo, el integrante de la FNC consideró que están “en una situación muy difícil”, porque entre la pandemia les pasó “cuatro años de macrismo” y actualmente la guerra entre Rusia y Ucrania “agudizó enormemente los problemas de los campesinos”. A ello le suman la “falta de respuestas” del actual presidente Alberto Fernández.
Sin respuestas
Ante el hostil contexto que reveló el integrante de la Federación Nacional Campesina, Matías Bohl, el sector quedó peligrosamente vulnerable.
“Hay cientos de campesinos que han abandonado en los últimos tiempos, y hay otros miles que si no hay medidas concretas, no pasan el invierno”, alertó.
Ante esta situación, apuntó a varias problemáticas presentes: “La sequía de agua en siete provincias golpeó duro”, y señaló “la falta de acceso a créditos”, como otro flagelo.
Otro problema en el que hizo énfasis el entrevistado fue en el “aumento desmedido” de los arrendamientos rurales: “Tenemos el 80% de nuestra producción que se realiza en tierras arrendadas o alquiladas”.
Por ello, piden una Ley de Arrendamiento que ponga límites a los aumentos y mejores las condiciones de los arrendatarios. También solicitan “la Ley de relevamiento territorial originario 26.160 con presupuesto”.
Las problemáticas
Por otra parte, Bohl comentó otra de las situaciones que atentan contra su actividad: “Compramos los insumos al dólar blue y vendemos para un mercado interno bastante deprimido. Por eso creemos importante que hay que regular y modificar la ley de arrendamientos”.
Sumada a las principales demandas de Bohl, existen otros problemas que dejaron manifiesto a través de un comunicado oficial.
De este modo, debido al aumento desmedido de los insumos y arrendamientos y la baja de la venta debido a que los sectores populares no pueden acceder a lo que producen, les quedan reducidas ganancias.
En contrapartida, aseguran que mientras su sector sufre “los grandes terratenientes, empresas monopólicas, grandes exportadoras de granos y pooles de siembra entre otros la siguen levantando en pala”, expresaron.
Y concluyen: “Por eso entendemos que es necesario tomar medidas urgentes que toquen a estos sectores enormemente beneficiados para atender las emergencias de millones en el campo y la ciudad”.