En 2008 se publicó una historieta llamada Fantaciencia, escrita por Mauro Mantella y con arte de Leandro Rizzo. Una astuta obra en blanco y negro, donde el guionista explora las aventuras de un grupo de “Ficcionautas”. Estos personajes se dedicaban a mantener las obras de ficción desde dentro de las mismas. En 2021, llegó la versión con color de Mauro Blanco.
La obra fue publicada originalmente por Ovnipress en blanco y negro, algo que es normal en nuestro país debido a los costos de edición. Sin embargo, esta historieta ha tocado las fibras de tantos fans argentinos de la ciencia ficción que ha llegado su versión a color. Mauro Blanco es el encargado de saciar las páginas con sus colores, mientras que la edición está a cargo de Rabdomantes Ediciones.
¿Qué es Fantaciencia?
En 1956, un grupo de Ficcionautas navegan las obras de ficción, corrigiendo anomalías que afectan su desarrollo. En pleno auge de la ciencia ficción, la proliferación de este tipo de historias hace que el trabajo de estos héroes sea cada vez más intenso. Sin embargo, están aún por enfrentar su tarea más apremiante: defender su propia realidad.
El grupo protagónico está conformado por cuatro personajes. Dalan, el capitán, es el más buen mozo, y tiene una relación con la única mujer a bordo; es reconocido como el hombre más valiente. Por su parte, Zool Stone es una actriz que abandonó Hollywood para aventurarse con Dalan. Finalmente, está el profesor Emerio Stanford, experto en obras de ficción, y Jack, quien fue rescatado de las páginas de una historia de Charles Dickens.
El mundo de estos navegantes de la ficción entrará en crisis gracias al misterioso Agente X. El Dr. Calculus Poisson, archienemigo de los Ficcionautas, será la carta del confabulador contra los héroes. Sin embargo, la revelación de su identidad traerá consecuencias que los protagonistas jamás hubieran imaginado.
Una carta de amor al género
Mantella fue un adelantado a su época, quizá al igual que la mayoría de quienes han inspirado su trabajo. Logró construir una historia que vive por sí misma por sobre referencias a los clásicos de la ciencia ficción de todos los tiempos. Empezando por Moby Dick, las referencias que encontraremos pasarán por todos los campos que puedan imaginarse.
La edición a color trae un apéndice con una guía de todas las referencias, para aquellos que no hayan captado alguna. Pero esto es uno de los motivos más importantes del por qué Mantella fue un adelantado.
Hoy en día, mayoritariamente en medios audiovisuales, el negocio está basado en los universos compartidos. Las referencias hacia otras obras generan dos sensaciones que hacen que la gente las siga consumiendo: la nostalgia y el sentido de conexión. En Fantaciencia, Mantella pone en juego elementos interesantes: como la referencia, el easter egg (huevo de pascua) y demás recursos dentro de la obra.
El amante de la ciencia ficción, de antaño y de ahora, reconocerá personajes y elementos en las páginas de esta obra inmediatamente. El mismo nombre (“Fantaciencia”) viene de una serie de revistas sobre ciencia ficción, originaria de España.
Claro que Mantella no se toma esto como una historia que simplemente se valdrá de la nostalgia para salir adelante. En su guion, los personajes se desarrollan de tal forma que el lector notará que, lo que se cuenta, es cosa seria. El respeto con el que es tratada la historia es prueba de que el artista ama lo que hace y también a quienes invitó a su obra.
El arte apropiado
Leandro Rizzo genera una sensación brutal de que estamos leyendo algo que puede haberse hecho en los años 50. El diseño de personajes es lo que consagra a la obra como un relato con vida propia. El nivel de detalle que maneja el artista, y la armonía que logra, dotan de vida a cada viñeta. Esto no es tarea fácil, considerando que aquí conviven elementos de todo tipo de historias.
La majestuosidad con la que ha capturado tanto el fondo del océano como ciudades futuristas y post apocalípticas, es asombrosa. Sin embargo, el color de Mauro Blanco, es lo que hoy en día da al lector la vibra que hacía falta para completar la obra.
Blanco eligió cuidadosamente la paleta de colores. El sepia y los tonos amarillentos dominan las viñetas siempre que estemos en la superficie. En el lecho oceánico, un azul extremadamente vibrante hace que el ambiente cambie por completo.
Fantaciencia es una obra que no debe perderse ningún amante de la ciencia ficción. Y quien no lo sea, puede encontrar en ella una obra interesante, y un abanico de obras referenciadas para poder comenzar a explorar.