Este miércoles se presentó ante el Senado el proyecto de ley que busca declarar como delitos de lesa humanidad a los fusilamientos de las huelgas patagónicas; sucedidos entre los años 1919 y 1922 en Santa Cruz.
La misma fue presentada por la senadora por el Frente de Todos y autora del proyecto, Ana María Ianni, el secretario de Derechos Humanos, Horacio Pietragalla, Andrés La Blunda, Director de la Casa de Santa Cruz, quien representó a la gobernadora Alicia Kirchner, y el periodista Esteban Bayer.
El proyecto propone la creación de una Comisión Bicameral Investigadora para la Determinación de la Verdad Histórica; que se encargará de completar la investigación con el acceso a documentos, testimonios y archivos. Además, gracias ello se pueda esclarecer el destino de las restantes víctimas que aún sus familias reclaman.
Cabe destacar que, cuando desembarcó en Santa Cruz, el teniente Héctor Varela declaró la Ley Marcial, asignando el fusilamiento de entre 500 y 1500 peones y obreros rurales. Dichos fusilamientos se dieron en la estancia “La Anita”, donde se provocó la cacería de los huelguistas en las localidades de Puerto Santa Cruz y Puerto Deseado.
Nota al pie diálogo con el periodista Esteban Bayer, hijo de Osvaldo Bayer, quien escribió e investigó sobre la masacre. Siguiendo el legado familiar, Esteban se puso la causa de su padre al hombro y participó del proyecto. En tal sentido, relató cómo surgió y desde donde parte el mismo.
-¿Cómo nace este proyecto de declarar como delitos de lesa humanidad a los fusilamientos llevados adelante por el teniente Varela?
-El proyecto de ley nace a partir de todo un trabajo de memoria y de verdad; que se está haciendo desde hace muchos años en la provincia de Santa Cruz.
A partir de los trabajos de investigación de mi padre, Osvaldo Bayer, a raíz de esas investigaciones, se fueron formando en los últimos años 11 años mesas por la memoria de los fusilados en cada una de las localidades de importancia de la provincia, con un trabajo de memoria muy importante que pasa por identificación de sitios históricos, por reconstruir hechos que sucedieron en cada localidad, de buscar e identificar las tumbas masivas y sobre todo de divulgación.
Hay todo un trabajo de señalamiento por parte de vialidad nacional por ejemplo, de marcar sitios históricos en las rutas y una de las tantas iniciativas que movieron estas mesas por la memoria de los fusilados, desemboca en este proyecto de ley iniciado por Ana María Ianni, senadora por Santa Cruz, que junto a su equipo y la Secretaría de Derechos Humanos de la provincia de Santa Cruz y de la secretaría de Derechos Humanos de la Nación, con Horacio Pietragalla, empezaron a trabajar en este proyecto de ley a lo que se fueron uniendo cada vez más senadores y que ya pasó a comisiones del senado y ahora comienza el camino legislativo.
-¿Cuál es el eje importante en este proyecto y su investigación?
-Lo importante de todo esto, es este proyecto de ley, que obviamente en primer lugar, se declare crimen a un delito de lesa humanidad, lo realizado, lo perpetrado, en nombre del Estado argentino, ya sea hace a través del gobierno de turno o del entonces presidente Hipólito Irigoyen, a través de sus instituciones, como las fuerzas armadas, las fuerzas policiales, como fuerzas de represión y de organizaciones como la liga patriótica, con activa participación en toda la represión.
Pero también de los terratenientes y dueño de los latifundios de las tierras agrupados en la sociedad rural; también involucrados en la represión de los huelguistas. Entonces, aparte de constatar que fueron crímenes de lesa humanidad perpetrados por el Estado y que, por consiguiente, el Estado debe responder por eso. Lo interesante es la formación de una Comisión Bilateral del Senado y de la Cámara de Diputados de la Nación que investigarán hechos que tienen más de 100 años. Así podrán llegar a un informe oficial del parlamento argentino constatando lo sucedido, la dimensión de la masacre y las responsabilidades de los represores.
Es una tarea pendiente, es un hito muy importante en la reivindicación de la verdad en nuestra historia. Creo que es algo pendiente del parlamento argentino de investigar este crimen perpetrado a 1500 peones rurales.
-¿Hubo algún intento, por parte del parlamento, de investigar estos hechos?
Recordemos que pocas semanas después de los fusilamientos, hubo una moción en el Parlamento argentino, en la Cámara Diputados en Buenos Aires, exigiendo una comisión investigadora. Pero a instancias y bajo presión del gobierno, la Cámara de Diputados se negó a formar esa comisión investigadora.
A partir de ese momento, es que se cubre con un manto de silencio, los hechos aberrantes de la masacre. Ese pacto de silencio en el que nunca más se supo nada, se mantuvo durante casi medio siglo; hasta que Osvaldo tomó las investigaciones y empezó a tirar del ovillo. Así se fue encontrando con una dimensión de la violencia social por parte del Estado y de las fuerzas armadas; hasta ese momento inusitado en el país.