Créditos: Editorial Ovnipress, línea Ovnimanga.
El nuevo compilatorio de Tsubasa Yamaguchi, autora de la exitosa serie Blue Period, Nude Model, se encuentra en comiquerías desde principios de enero.
Fue editado por Ovnipress mediante su línea Ovnimanga y se trata de un volumen único que recopila relatos cortos y cuenta con 192 páginas (formato 12,8 cm por 18 cm), en blanco y negro, con tapas blandas y sobrecubierta con solapas y a color.
El volumen contiene tres relatos cortos dirigidos a un público de tipo Seinen, es decir, en japonés, para adultes. Son historias dramáticas que juegan con lo psicológico, tratando temas algo eróticos e, inclusive, se animan a rozar lo fantástico y surreal.
¿De qué trata Nude Model?
El nombre del volumen se lo otorga la primera de las historias, llamada precisamente Nude Model. Si bien es el relato más corto, resulta el más sensual y erótico. Conoceremos a una estudiante bachillerato apasionada del arte y a un chico algo rebelde y con pocos escrúpulos que se ofrece como su modelo.
El chico comenzará a modelar para ella, a partir de una apuesta con amigos con el fin último de conquistarla. Cuando el chico empieza a posar desnudo para la artista, comenzará un juego erótico en el que apuestas y atracción sexual se volverán un completo enredo del que será muy difícil escapar.
El segundo relato, llamado Una mujer, trata sobre un chico bastante inseguro que se hace pasar por mujer en su entorno escolar. El joven fingirá ser una chica en una grabación porno de audio para obtener la validación para terminar involucrado en un incidente trágico. En el camino, las situaciones confusas se vuelven algo continuo, como también los diálogos explícitos en los que las palabras asociadas al sexo resultan una constante.
La última historia, Kamiya, está compuesta por dos episodios que corresponden aproximadamente a la mitad de las páginas de todo el volumen. Se trata del relato más largo, por lo que será el que más nos permitirá conocer la psicología de les personajes y entender el porqué de sus acciones.
En Kamiya veremos a una médica muy peculiar, fóbica a la sangre. A partir de un giro en el rumbo de los acontecimientos, la joven se topará con una situación que le permitirá superar sus problemas de ansiedad al respecto.
Luego de conocer a un joven que sufre de vampirismo en un club nocturno muy particular, comenzará a meterse en un mundo desconocido para ella, algo oscuro y rebuscado. A la joven le será imposible no involucrarse sexual y emocional con el chico vampiro, lo que la llevará a su inevitable y trágico final.
Créditos: Editorial Ovnipress, línea Ovnimanga.
Relatos cortos cargados
Nude Model recopila una magnífica colección de historias cortas de los inicios como dibujante de Tsubasa Yamaguchi, autora del exitoso manga Blue Period, editado en nuestro país por Panini. Los tres relatos tienen una propuesta estética y artista bastante diversa, lo que revela que cuando la mangaka creó estas historias aún estaba en la búsqueda de su propio estilo.
El primer relato muestra una clara influencia de las vanguardias artísticas europeas del siglo XX. En lo particular, algunas viñetas hacen eco en fotografías de Ray Man o de cuadros dadaístas. Estas referencias resultan armónicas con la historia que se busca contar, puesto que va del hecho y la acción de hacer arte. El hecho artístico se mezcla con una atmósfera de sensualidad que opta por cuerpos delicados, que es más lo que sugieren que lo que muestran.
Créditos: Editorial Ovnipress, línea Ovnimanga.
El segundo relato tiene un tinte algo más adolescente en lo que respecta al trazo y la ilustración que trabaja la artista. Se trata, una vez más, de una propuesta desde la estética que consigue ir en sintonía con un grupo de pibes y pibas en etapa secundaria y, por tanto, en plena búsqueda y despertar sexual.
En las caras de les personajes predominan expresiones y gestos de asombro y curiosidad sobre algo tan específico como el sexo, en un momento de mucha exploración. Se trata de dibujos más provocativos que parecen tener una intencionalidad que se acerca a la violencia sexual. En ese punto, se trata de un relato bastante cuestionable y que se encuentra en el límite de lo políticamente correcto y aceptable.
El último relato aborda una temática más seria y más turbia, llena de un misterio que se aleja de la realidad y que se aparta de ese descaro más adolescente que caracteriza a los otros dos relatos. En consonancia con la trama, la autora opta por ilustrar escenarios más sombríos, en los que predominan las sombras y las calles repletas de oscuridad.
Si bien se trata siempre de ilustraciones en blanco y negro, la mangaka se las ingenia para lograr que les lectores noten cuando busca representar la sangre. Colmillos, sangre, muerte, una atmósfera que se funde en un mundo de clínicas médicas, jeringas, pacientes y trabajadores de la salud. Sin dudas, la historia más interesante de todo el volumen, que logra un ir y venir entre el mundo real y la fantasía erótica.