La reconstrucción fue llevada a cabo por la empresa de cartografía submarina Magellan Ltd y Atlantic Productions, que está realizando un documental sobre el proyecto. Se utilizó la técnica del mapeo del suelo marino, produciendo una visualización de toda la embarcación, donde se la ve como si todo el agua hubiera sido drenada.
El escaneado en tres dimensiones fue posible luego de 200 horas de inspección del transatlántico británico, hundido el 15 de abril de 1912 luego de impactar contra un iceberg en su viaje inaugural que comenzó en Southampton (Inglaterra) y se dirigía hacia Nueva York (Estados Unidos). Para llevarlo a cabo fueron requeridas al menos 700 mil fotos.
Gerhard Seiffert es el responsable de Magellan Ltd y es el director de la expedición, quien contó que “no pudimos tocar nada para no dañar los restos”. También añadió que “uno de los retos era cartografiar cada centímetro cuadrado, incluso las partes poco interesantes como el barro entre los escombros, que se necesitan para llenar el espacio entre los objetos interesantes”.
Parks Stephenson, otro de los especialistas, en diálogo con BBC News dijo que «todavía hay interrogantes y preguntas básicas sobre el barco que necesitan respuesta”.
El barco más famoso del mundo
El transatlántico zarpó el 10 de abril de 1912 desde el puerto inglés de Southampton en su viaje inaugural hacia Nueva York. Lo que habría de ser un viaje histórico por la grandeza del barco y la ingeniería humana terminó pasando a la historia como una de los hundimientos más trágicos conocidos.
El barco viajaba a 41 kilómetros por hora cuando un iceberg puso fin al único viaje de la embarcación, haciendo que se hunda en menos de tres horas, la noche del 14 al 15 de abril, mientras la mayoría de los pasajeros dormía.
Los restos del Titanic fueron localizados en septiembre de 1985 por el oceanógrafo estadounidense Robert Ballard: el barco se había dividido en dos partes que terminaron separadas a 800 metros de distancia, a 3843 metros de profundidad y a 650 kilómetros de Canadá.
Como consecuencia de lo sucedido murieron 1496 personas de las 2008 que iban a bordo. Una de las principales causas de que la cifra sea tan elevada fue la poca cantidad de botes salvavidas que había disponible: los mismos alcanzaban a cubrir solo a 1178 pasajeros, apenas más de la mitad de los que había a bordo.
El nuevo descubrimiento
Pese a que el Titanic ha sido extensamente explorado desde el descubrimiento de sus restos, la penumbra de las profundidades del océano es tan grande que las cámaras sólo habían podido captar fotos limitadas del barco en descomposición.
El nuevo escaneo, terminado durante el verano del 2022, captó el buque en su totalidad, revelando un panorama completo donde puede verse que el mismo yace en dos partes separadas por unos 800 metros y rodeada por una gran área de escombros.
Para llevarlo a cabo, se utilizaron sumergibles controlados remotamente por un equipo a bordo de una nave especializada, que pasó más de 200 horas mapeando el largo y el ancho del naufragio. El escaneo mostró la magnitud del barco pero también detalles minúsculos, como el número de serie de una de las hélices.
La proa sigue siendo reconocible pese a que está cubierta de estalactitas de óxido y en la cubierta se observa un hueco creado por el vacío que dejó la escalera que allí se erguía.
En el caso de la popa, que se desmoronó a medida que el barco se hundía como tirabuzón, es un enredo de metales y en el área aledaña hay artículos desparramados como estatuas, botellas de champán y ornamenta de metal forjado del barco, además de decenas de zapatos.
Stephenson, que estudió por años el Titanic y su historia, dijo que quedó “estupefacto” al ver los primeros escaneos. «Realmente no entendemos la naturaleza del choque contra el iceberg. Ni siquiera sabemos si le pegó de lado en el estribor, como lo muestran en todas las películas”, explicó.
Añadió que estudiando la popa se podría dilucidar la mecánica de cómo el barco cayó contra el lecho marino.
Los estudios de los escaneos podrían aportar nuevos conocimientos sobre lo que le pasó al Titanic esa fatídica noche de 1912.