martes 23 de abril de 2024

El Último habitante de Epecuén: un cuento emotivo sostenido entre ruinas y ficción

María Julia Poiré encuentra inspiración en la vida de Pablo Novak, quien habitó esta localidad bonaerense devastada cruelmente por una inundación en 1985. Nota al Pie dialogó con su autora, quien reflexionó acerca de su obra.
1 DESTACADA Alexandra Barreto
En la 47º Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, Maria Julia Poiré presentó el pasado 2 de mayo su libro El Último Habitante de Epecuén. Crédito: Alexandra Barreto.

Las ruinas de Villa Epecuén, localidad bonaerense situada a más de 500 kilómetros de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, funcionaron como un eje central para que la autora María Julia Poiré esboce, en el lejano agosto de 2020, lo que finalmente en este 2023 se transforme en el cuento El último habitante de Epecuén

Nota al Pie dialogó con María Julia Poiré, quien se refirió al proceso de creación de la obra, entre otras cuestiones. 

El objetivo del relato es que las infancias conozcan la historia de Villa Epecuén, ciudad perteneciente al Municipio de Adolfo Alsina, en donde se encuentra la Laguna de Epecuén, espejo de agua similar al Mar Muerto por la salinidad de sus aguas.

El 10 de noviembre de 1985, la ciudad vivió una cruenta inundación, razón por la cual sus habitantes debieron ser evacuades a algunas localidades cercanas tales como Carhué, Pigüé y Rivera, entre otras. Tras dicha tragedia, sólo quedaron escombros de lo que, en otra época, había sido el destino preferido para vacacionar de muches argentines y extranjeres. 

Pablo Novak es conocido como el último habitante de Epecuén y su historia atraviesa las páginas que conforman este libro. El mismo tiene 93 años y decidió permanecer en el sitio junto a su perro Chozno y la bicicleta oxidada que usaba para movilizarse hasta diciembre del 2019. 

Durante la pandemia tuvo que trasladarse a una residencia para ancianes, pero en agosto del 2022 regresó a su casa en Epecuén, su lugar en el mundo. 

3 Maria Julia Poire
Al plasmar la historia del único habitante de la Villa Epecuén, Pablo Novak y Maria Julia Poiré establecieron un vínculo fraternal. Crédito: María Julia Poiré.

La construcción del libro

María Julia Poiré, artífice de El Último Habitante de Epecuén, es platense, licenciada en periodismo por la Universidad Nacional de la Plata (UNLP) y desde hace seis años reside junto a su familia en Carhué, provincia de Buenos Aires. 

La presentación de su obra se realizó el pasado 2 de mayo en el marco de la 47º Feria Internacional del Libro de Buenos Aires y también el 13 del mismo mes en la Casa de la Cultura de Carhué. La obra posee ilustraciones de Gustavo García, Maricel Schiebelbain y el diseño de Josefina De Dominicis.

Cabe destacar que todo lo recaudado con la venta de los ejemplares será donado a la Biblioteca Del Otro lado del árbol de Carhué

¿Qué te impulsó a escribir un cuento infantil sobre la tragedia de Villa Epecuén y Pablo Novak?

Fueron varias cosas. Una de ellas es que formo parte de la Biblioteca infantil Del Otro lado del árbol de Carhué, (y) nos dimos cuenta que era necesario recuperar historias locales, eso quedó rondando en mi cabeza. 

Por otro lado, durante la época de pandemia viví momentos duros, (sobre todo) la etapa final de la enfermedad de mi mamá. Eso hizo que tuviese la necesidad de escribir.

Primero hice un escrito periodístico de lo que ocurrió en Villa Epecuén. Luego decidí crear una historia porque un compañero de trabajo me contó que su hija pequeña se refería como “casitas rotas” a las ruinas de Epecuén. 

Me llamó la atención y me preocupé sobre cuál era el mensaje que se estaba dando a los chicos. No había contenido para las infancias sobre la inundación y mucho menos sobre la historia de Pablo Novak.

Diversos medios de comunicación nacionales e  internacionales buscaban una nota con Pablo. Lo apodaron como El Único Habitante de Epecuén (y) noté en la comunidad que había dudas respecto (ha) si esto era cierto.  Muchas personas dijeron que no era de ahí. 

En una ocasión, por mi trabajo comunicacional, acompañé a Mario Markik del programa ‘En el Camino, a entrevistar a Pablo a su casa y vi un libro sobre su mesa, (que) tenía subrayado la parte en la que la autora -que prefiero no mencionar- lo tildó de mentiroso al decir que nació en Epecuén.  

Esto fue movilizante, ese día traté de imaginarme qué le pasaba a Pablo con este tipo de comentarios tan feos.  

Y todo esto empezó como una crónica periodística: ¿cómo transitaste el hecho de llevarlo hacia un cuento infantil?

Fue todo muy nuevo porque jamás escribí nada para niños. Rompí estructuras e  imaginé cómo sería la interacción de Don Pablo con su perrito Chozno. Además, tenía que describir la naturaleza del Lago Epecuén, hablar de la salinidad de su lago.  

En la trama, Chozno ve triste a su amo por todos los comentarios feos que hicieron sobre él, (entonces) decide hacerlo feliz. Se vale de la naturaleza del Lago Epecuén, de las aves como los falaropos y flamencos; y también de la presencia de los árboles petrificados llenos de sal y muchas cosas más.

¿El libro es producto de una autogestión?

El Último Habitante de Epecuén ofrece 48 páginas con mucha ilustración, es la parte con un protagonismo importante. La impresión se realizó con fondos propios (y) lo que se recaude es a beneficio de la biblioteca que actualmente funciona de manera itinerante. 

Queremos que crezca y hacer actividades culturales y recreativas. Haberlo logrado de forma autogestiva con la crisis del papel, es una satisfacción grande.

2 Alexandra Barreto
Las ruinas de Epecuén son el resultado de la inundación que esta localidad vivió el 10 de noviembre de 1985. Crédito: Fronteras Blog.

Además del contenido atrapante de la historia: ¿tomaste en cuenta alguna otra herramienta? 

En estos tres años hicimos una relectura del texto buscando que sea libre de sesgos en relación a la edad o al género. En vez de hablar de los turistas, hablamos de las personas turistas.  

Al principio utilizaba el término viejito y lo hacía desde un lugar cariñoso. Después aprendí que esa palabra no tiene una connotación positiva para las personas mayores y lo cambiamos por Don Pablo.

¿Cuál fue la reacción de Pablo Novak cuando le llevaste El Último Habitante de Epecuén?

Desde el primer borrador que hice, se lo mostré a él y a su familia. Fui a su casa y me dijo emocionado e intrigado: ¿cómo te las ingeniaste para hacerlo?, ¿cómo recordaste el nombre de mi perro?.

Para cerrar, a modo de reflexión, ¿el Último Habitante de Epecuén tiene un  mensaje para les niñes y adultos?

Sí, el libro da un mensaje poderoso y la historia cierra con la pregunta sobre:  ¿dónde queremos habitar?. Es importante que lo empecemos a promover desde la infancia. También es una forma de llevar a Epecuén en la memoria y no perder de vista  lo que pasó en la comunidad y que los chicos lo sepan. 

Compartir:

Nota al Pie es un joven medio alternativo y autogestivo. Precisamos tu aporte para sostener el día a día de un periodismo popular que encuentra cada día más dificultades para mantenerse independiente. Con tu suscripción mensual nos ayudás muchísimo. Podés cancelarla cuando quieras. Por mail te iremos informando de los beneficios de ser parte de Nota al Pie.
¡Muchas Gracias!

Notas Relacionadas

Seguir Leyendo

En medio del desfinanciamiento, la universidad pública logró producir una vacuna contra el covid-19

Si bien el proyecto se encuentra paralizado por falta de fondos, la vacuna elaborada por investigadores de la UNLP y la UBA finalizó con éxito su fase pre-clínica. Nota al Pie habló con Guillermo Docena, uno de los líderes del proyecto.

Ante la presión de las futbolistas, renunció un DT acusado 19 veces por acoso sexual en Brasil

Tras ser contratado por el Santos, Keliton Lima renunció luego de una protesta masiva de los equipos. Paulina Gramaglia, destacada delantera en el fútbol brasileño, afirmó: "La respuesta siempre será colectiva".

Funeral histórico: la despedida de Sepultura en Buenos Aires

En el marco de su gira de despedida mundial, la banda de metal más importante de Latinoamérica se presentó el domingo en el Teatro Flores y coronó 40 años de carrera “celebrando la vida a través de la muerte”.

Ultimas Noticias

Más del autor

Nota al Pie | Noticias en contexto