En medio de las nuevas negociaciones que buscan rediseñar el programa económico que tiene Argentina con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el equipo económico de Sergio Massa se encuentra a la expectativa de un nuevo desembolso. Si bien aún continúan trabajando en la renegociación para discutir posibles cambios, el país atravesó uno de los peores momentos económicos producto de la sequía.
Por su parte, desde Télam explicaron que “las conversaciones avanzan constructivamente con el objetivo de rebalancear el programa por la severa sequía”. En ese sentido, la cartera económica argentina mantiene reuniones virtuales con el organismo internacional, con el objetivo de avanzar en esta nueva discusión.
Asimismo, desde el equipo de Massa, el viceministro Gabriel Rubinstein y, el Jefe de asesores, Leonardo Madcur, comenzaron a analizar el rediseño del programa con el FMI de forma online. Sin embargo, el país se encuentra a la espera de un desembolso previsto para este 2023 de alrededor de USD 10.600 millones.
Debido a que ahora el país deberá buscar la manera de renegociar el programa, el FMI realizó con anterioridad un ajuste en las metas de acumulación del 2023 producto de la sequía. Es por ello que, el organismo financiero internacional, redujo alrededor de USD 2000 millones en la meta de acumulación de reservas.
Si bien, la historia entre Argentina y el FMI es larga, por ahora, los tropiezos que ha tenido el gobierno de Alberto Fernández en materia económica se han sabido resolver. No obstante, en medio de la histórica relación, los últimos pedidos de ajuste del organismo, conducido por Kristalina Georgieva, tuvieron que ver con recortar el gasto público y una política monetaria más exigente.
En medio de una escasa reserva, solo queda esperar
En medio de una crisis económica que no da tregua, la cartera económica del país está interesada en seguir con el acuerdo con el fondo. Pese a que miles de argentines vienen atravesando una inflación del 7% mensual, Sergio Massa insiste en generar nuevos acuerdos financieros.
En ese sentido, el acuerdo con el Fondo menciona que Argentina deberá tener para la meta de este año USD 1.800 millones de reservas. Es preciso señalar que, la meta de acumulación de reservas para el primer trimestre se redujo a más de USD 3.000 millones y, en casi USD 2.000 millones para todo el año.
En medio de pocas reservas en el Banco Central de la República Argentina (BCRA), en el mes de abril el FMI aprobó el desembolso por USD 5.400 millones. Es por ello que, el total de desembolsos que el Fondo le otorgó al país ya lleva aproximadamente USD 28.900 millones.
Cabe destacar que Argentina había participado en las sesiones de primavera del FMI y del Banco Mundial (BM), con el objetivo principal de buscar créditos multilaterales. En ese viaje, Massa asistió a un encuentro de trabajo con autoridades económicas de América del Sur y México, organizado por el Departamento del Hemisferio Occidental del FMI.
La reunión de primavera, que se realizó del 10 al 16 de abril en Washington, tiene como objeto dar seminarios, sesiones informativas regionales, conferencias de prensa y otros eventos centrados en la economía global, el desarrollo internacional y los mercados financieros mundiales.
Alianzas y estrategias para salvar las reservas
A inicios del mes de mayo, la cartera económica de Massa y el presidente Alberto Fernández, mantuvieron negociaciones con Brasil. En ese sentido, en paralelo con el FMI, el ministro argentino se reunió con el presidente de la Confederación Nacional de Instituciones Financieras (CNF), Rodrigo Maia.
Dicha entidad, tiene a los principales bancos y la Bolsa de Valores del Brasil. Si bien el presidente realizó una visita oficial, en el gabinete económico viajó el jefe de Gabinete de asesores del Palacio de Hacienda, Leonardo Madcur y el vicepresidente del Banco Central, Lisandro Cleri.
Ahora, Argentina cuenta con el respaldo del país vecino ya que, el presidente brasilero Luiz Inácio Lula da Silva, está activo el Banco de los Brics para respaldar el comercio exterior ante la restricción con las divisas.
Asimismo, el funcionario argentino en conjunto con su par brasileño, Fernando Haddad, trabajaron en conjunto para desdolarizar el comercio, por lo que, el BCRA no pagaría las exportaciones brasileñas en dólares.