Qendar, VOICES! y el Centro de Innovación Social de la Universidad de San Andrés (CIS UdeSA) lanzaron en 2022 la Iniciativa “Cultura de Dar”. La misma se trata de un proyecto para proveer información sobre el financiamiento de las organizaciones del sector civil. De esa manera también se busca promocionar una “Cultura de Dar” en el país. Los resultados de la investigación ya han sido publicados con el fin de conocer características y hábitos de les argentines a la hora de hacer donaciones.
A la “cultura de dar” la definen como una cultura en donde la gente entiende el ser solidario como un valor y un deber. Además, “compartir con la sociedad parte de lo que tiene gracias a su educación, esfuerzo e ingresos o patrimonio. Donde participar en la comunidad es un hábito, una expectativa y un estilo de vida”, sostienen sus creadores. “La gente se une a la vida en comunidad y contribuye con su tiempo, talento y dinero cuando la cultura apoya y alienta este comportamiento”, afirman.
En 2022 llevaron a cabo un estudio en el que analizaron 1.229 casos sobre donaciones en población general. También realizaron 6 focus groups entre donantes frecuentes, esporádicos y no donantes. Entre los temas a evaluar se destacan la confianza en las organizaciones, la cantidad de argentines que donan y cómo lo hacen, y opiniones acerca de las donaciones. También las preferencias y las experiencias a la hora de donar, y cómo se comunican las organizaciones.
Desconfianza en las instituciones
Uno de los datos que llaman la atención es la gran crisis de desconfianza en las instituciones. En este contexto, 5 de 10 encuestades no confía en las organizaciones de la sociedad civil, mientras que 4 de 10 sí confían. El primer estudio de este tipo fue en 2015, y desde entonces se observa una caída en la confianza en las Organizaciones No Gubernamentales (ONG). De un 52% de imagen positiva pasó al 39% en este lapso.
Por el contrario, sí aumentó en el caso de empresas. En el caso de las Pequeñas y Medianas Empresas (PyMES) la imagen positiva supera la de las ONG, mientras que las grandes empresas la igualan. Por ejemplo, la confianza en las PyMES es del 54% y para multinacionales es del 42%, seguido por las grandes empresas nacionales con un 40%.
En cuarto lugar en confianza se ubican las organizaciones de la sociedad civil, con una imagen positiva del 39%. La Iglesia se ubica en el sexto lugar, con el 33%. Los influencers de redes sociales están por debajo con un 26%. Por último se encuentran el Gobierno nacional (20%), la Justicia (17%) y el Congreso (15%).
La confianza es mayor dentro de la región Metropolitana y en personas mayores a 35 años. Asimismo, la desconfianza está más acentuada en segmentos con nivel socioeconómico bajo y en el interior del país. El estudio también señala que en el segmento joven baja la confianza en las organizaciones de la sociedad civil y aumenta el porcentaje de no respuesta.
Experiencias negativas como la fraudulenta campaña por las Islas Malvinas organizada por el Gobierno de facto durante 1982, o casos de abuso como el del Padre Grassi, inciden a la hora de decidir donar.
¿Cuántas personas donan y a dónde?
De les encuestades, sólo el 21% donó en los últimos 12 meses, lo que equivale a 2 de cada 10 personas, frente a un 79% que no lo hizo. La cantidad de donantes aumentó levemente desde el año 2020, cuando fue del 19%. Según el informe, las personas que más donan son mayores de 50 años y pertenecen al segmento de mayor nivel socioeconómico.
Además, hay una correspondencia entre quienes declararon tener confianza en las organizaciones de la sociedad civil y quienes hacen las donaciones. También se observa que los hombres (26%) donan más que las mujeres (18%). El rango etario de 18 a 24 años es el que menos aportes ha realizado.
También se destaca que 8 de cada 10 argentines toma individualmente la decisión de a quién y cuánto donar. El 59% dona a una sola organización mientras que el 31% dona a 2 o 3 y el apenas el 10% dona a 4 o más.
A la hora de abonar, se detectó un cambio importante en los modos de pago. Los resultados indican una baja en el pago en efectivo y un gran crecimiento de los modos digitales, sobre todo MercadoPago y otras billeteras virtuales.
Por ejemplo, en 2020 el 47% de les donantes usaba efectivo, mientras que en 2022 se redujo al 30%. Por su parte, el uso de billeteras virtuales pasó del 2% al 24%. El pago online con la tarjeta de crédito o débito creció de un 5% a un 25% y la transferencia bancaria aumentó de un 9% a un 21%.
Compromiso con las causas
A través de la encuesta pudo determinarse que les donantes de dinero tienen una actitud proactiva con la difusión de las organizaciones y sus causas. Además, entre les que confían en organizaciones de la sociedad civil algunas acciones se intensifican. Por ejemplo, el 76% de les donantes en el último año compartió información sobre la organización con familiares o amigues.
Sólo un tercio de les donantes han visitado la obra personalmente o han realizado actividad de forma voluntaria. Las mujeres y les mayores de 50 años son quienes menos participan voluntariamente.
En cuanto a las preferencias en las donaciones, las opiniones se encuentran divididas entre quienes prefieren aportar dinero para solucionar problemas de fondo, a problemas puntuales y de emergencia, o a cualquiera de los dos. Los resultados sugieren que la decisión de donar es impulsiva, en el caso de las emergencias, y reflexiva cuando se trata de donaciones mensuales.
El hambre y los alimentos son la temática con mayores donaciones (32%), seguido por la salud e investigación médica (23%), que disminuyeron en cantidad de donantes. En tercer lugar se ubican los animales (20%), en donde se observa un aumento desde el año 2020. Respecto a la población beneficiaria, 6 de cada 10 donantes dirigieron su aporte económico a organizaciones vinculadas con niñes y adolescentes, mientras que 3 de cada 10 lo hicieron para organizaciones que trabajan para personas o familias en situación de pobreza.
Opiniones sobre ser donante
Les argentines acuerdan con que donar hace bien al donante. La percepción de que donar hace bien es mayor en todos los grupos poblacionales, y se evidencia fuertemente entre el grupo poblacional donante (86%). Una minoría piensa que “donar dinero es una actividad sólo para ricos” y entre no donantes esta opinión es sostenida por casi por 4 de cada 10 personas. A su vez, la idea de que es una actividad sólo para ricos es más fuerte en el segmento de menor nivel socioeconómico, en el grupo entre 18 a 34 años y entre no donantes (donde sube a 35% contra 15% entre donantes).
Además, la mayoría considera que las empresas y el Estado deberían financiar a las organizaciones de la sociedad civil y a sus causas. Este resultado es similar al obtenido en la encuesta de 2020.
Sobre el acto de donar, 7 de cada 10 argentines acuerda con que les donantes de dinero no deberían comentar que lo hacen con otros. Aun así, esta opinión coexiste con 5 de cada 10 que considera que es importante transmitir a los niños la importancia de esta acción. También la mitad de les encuestados cree que es importante que les donantes de dinero comenten a otros que lo hacen y los beneficios de donar, para generar un efecto contagio. Esto último es más valorado en el segmento etario entre 18 y 24 años.
Por último, 6 de cada 10 personas se declararon predispuestas a donar dinero en el próximo año. La intención de donar es mayor entre varones, personas más jóvenes y con mejor nivel socioeconómico. Además, se observa que creció la predisposición con relación al estudio del 2020.