La startup cordobesa OncoPrecision, creada por ex investigadores del Consejo Nacional de Investigaciones y Técnicas (CONICET), inauguró oficinas en Nueva York para desarrollar terapias contra el cáncer, según informó este lunes la agencia de noticias Télam.
En la ciudad estadounidense buscarán establecer el mejor tratamiento para cada paciente oncológico. De esta forma, pretenden aumentar la tasa de éxito en la fabricación nuevos medicamentos para la enfermedad.
Dicha empresa biotecnológica desarrolla screenings o métodos de detección sistemática con células de pacientes apelando a la “toxicidad selectiva”. Ahora, gracias a fondos de inversiones para empresas biotech, avanza en la realización de un ensayo que le permita pasar de la investigación a la práctica.
Según informó la Agencia CyTA Leloir, el exbecario doctoral de la Fundación Instituto Leloir (FIL) y director científico de la startup, Gastón Soria, aseguró que “el principal objetivo de OncoPrecision es evaluar cuál es la mejor terapia que se le puede dar a un paciente antes de que comience a ser tratado”. Al respecto, explicó que rastrean “entre todas las drogas existentes y aprobadas, adaptado a la realidad de cada lugar”.
En cuanto al procedimiento, Soria detalló: “Lo que hacemos es exponer al mismo tiempo varios tipos de células -malignas y normales- de una muestra a distintas drogas, para detectar cuán activa y tóxica es cada una y poder elegir la mejor para ese paciente”.
En este sentido, el investigador remarcó que no siempre se puede aplicar el mismo tratamiento a todes les pacientes con determinado tipo de cáncer.
¿Cómo es la metodología de la startup contra el cáncer?
La novedad de la metodología que utiliza OncoPrecision es la creación de “microavatares de pacientes”. Se trata de muestras biológicas que no sólo contienen células extraídas de la biopsia del tumor del paciente, sino también otras diseñadas genéticamente. Estas últimas recrean el microambiente tumoral para que las células malignas actúen como si estuvieran en el organismo de la persona que atraviesa la enfermedad.
A cada uno de los microavatares se les aplica una combinación de diferentes medicamentos, lo cual hace posible probar nuevas combinaciones de fármacos y evaluar al mismo tiempo su toxicidad selectiva y general. En este caso, el objetivo es encontrar el punto justo entre mayor eficacia y menor toxicidad.
Después del análisis e interpretación, esto puede entregarse al profesional de la salud para ayudarle a prescribir el mejor tratamiento para el paciente. Para ello, se emplea la inteligencia artificial (IA)
Por otra parte, una segunda aplicación de los PMAs (microavatares por sus siglas en inglés) es brindar a la industria farmacéutica la posibilidad de aumentar la tasa de éxito en el desarrollo de fármacos oncológicos.
En la actualidad, el enfoque se estudia en el marco de un ensayo clínico observacional. No obstante, para los próximos meses se espera empezar con un análisis prospectivo de pacientes refractaries al tratamiento y con mal pronóstico. El objetivo es comparar la evolución entre quienes emplean esta metodología, de aquellos que no.
Sobre OncoPrecision
La empresa fundada por Gastón Soria junto a Candelaria Llorens, Gerardo Gatti y Tarek Zaki, cuenta con 26 empleades y lleva recaudados USD 4,2 millones.
Además, trabaja con una red de diez centros médicos que les derivan muestras. Entre ellos se encuentran el Cemic, Fundaleu, el Hospital Italiano y el Sanatorio Allende de Córdoba.
Algunos de sus futuros proyectos son la creación de un laboratorio que tenga regulación para ofrecerle pruebas a pacientes de Estados Unidos; expandirse en Córdoba y abrir una sede en Buenos Aires.