El documento conocido como “Informe GEM”, que considera como obstáculo los costos de la educación privada, advierte sobre la magra regulación de la misma por parte de los Estados nacionales.
El informe publicado de manera reciente por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) aboga por más control estatal en la materia y recomienda cinco medidas para garantizar una educación de calidad para todes.
El 40% de les alumnes de nivel inicial, 20% del nivel primario y 30% de enseñanza media y terciaria asisten a institutos educativos no estatales a nivel mundial. No obstante, la nueva investigación revela que muchas naciones no cuentan con reglamentaciones adecuadas sobre educación privada o carecen de herramientas para imponerlas.
Un número sensible de países permiten que estas instituciones, en su mayoría no registradas, ofrezcan servicios educativos sin supervisión alguna. En este sentido, el informe de la UNESCO indica que este escenario va en detrimento de la calidad y profundiza la brecha educativa entre ricos y pobres.
Diagnóstico y cifras del informe GEM
La publicación indica que apenas el 27% de los estados prohíbe el lucro en las escuelas primarias y secundarias. Esta proporción se expresa en oposición con la visión que considera doce años de educación como gratuita para todes. Sólo el 7% de las naciones tienen cuotas que permiten un acceso escolar para estudiantes socialmente desfavorecidos, por medio de políticas públicas.
A partir de este escenario, se pudo registrar que las familias de los países menos desarrollados dedican una cantidad desproporcionada de su renta para la educación de sus hijes. Los hogares representan el 39% del gasto educativo en las naciones de ingresos bajos y medios. Esto se contrasta con el 16% en los países de mayor renta percibida.
El Informe está basado en el análisis de entidades no estatales de todos los sistemas educativos: instituciones a cargo de organizaciones privadas, ONGs y entidades religiosas. Se tienen en cuenta, además, organizaciones filantrópicas y organismos con fin de lucro. Fueron relevadas todas las entidades que participan de la prestación del sector educativo.
La equidad educativa: un objetivo general
Además, el Informe, titulado “¿Quién elige? ¿Quién pierde?” evalúa a la educación pública. El documento señala que en los países subdesarrollados este sector acarrea importantes costos extras. Un análisis sobre 15 países de bajos y medianos ingresos muestra que los insumos y materiales escolares representan casi dos quintas partes del gasto de los hogares.
Según explica, Manos Antoninis, director del Informe de Seguimiento de la Educación en el Mundo, esta situación presupuestaria trae como consecuencia que el 8% de las familias de países de ingresos bajos y medios se vean obligados a pedir crédito o dinero prestado para afrontar la escolarización de sus hijes.
Por su parte, Audrey Azoulay, directora general del organismo, afirmó que “los gobiernos deben establecer estándares mínimos en las escuelas estatales y no estatales. Para garantizar que las y los estudiantes más desfavorecidos tengan las mismas oportunidades de beneficiarse de una educación de calidad”.
Las recomendaciones del Informe GEM
La UNESCO presentó una serie de consejos con el fin de reducir la brecha del acceso a la educación entre familias ricas y pobres en el mundo.
1. Redoblar los esfuerzos para garantizar el acceso gratuito y financiado con fondos públicos a un año de educación preescolar y 12 años de educación primaria y secundaria para todos los niños y jóvenes.
2. Establecer estándares de calidad que se apliquen a todas las instituciones educativas estatales y no estatales. Ya que los sistemas paralelos con diferentes expectativas, materiales y condiciones de trabajo tienen un efecto negativo en la construcción de un sistema de educación coherente.
3. Reforzar la capacidad gubernamental para realizar el seguimiento de la reglamentación y hacerla cumplir. En la práctica, muchas reglas están mal diseñadas o se aplican de manera insuficiente, lo que deja la puerta abierta a la mala conducta.
4. Fomentar la innovación para el bien común y reunir a todos los actores que la desarrollan. Los gobiernos deben trabajar en colaboración con todos los actores para aprender, recopilar y evaluar las buenas prácticas y proporcionar recursos que les permitan intercambiar experiencias, pilotar y ampliar las buenas ideas.
5. Proteger a la educación de estrechos intereses privados. Mantener la transparencia e integridad de la educación pública ayuda a proteger a las y los estudiantes más desfavorecidos.