Desde hace tiempo que el cannabis es foco de interés para distintos sectores por sus beneficiosas propiedades. En esta línea, equipos de la Universidad Nacional de Hurlingham (UNAHUR) suman sus aportes para el avance de la medicina.
Se trata de investigaciones en torno a la fitoterapia. Esto último sobre la posibilidad de curar o aliviar síntomas o enfermedades a partir del uso de plantas medicinales. Desde esta línea trabajan dentro del Laboratorio de Aplicaciones Biotecnológicas y Microbiología (LABYM), dirigido por el Dr. Paulo Maffia.
¿Qué investigan?
Las investigaciones que llevan adelante en el LABYM están basadas en un cannabinoide llamado Cannabidiol (CBD) que puede extraerse de la planta de cannabis. Estos equipos tienen objetivos que van desde buscar combatir enfermedades intrahospitalarias hasta generar cremas cicatrizantes y para quemaduras.
El Dr. Maffía explica que la línea de trabajo que llevan adelante es “el desarrollo y la investigación de moléculas antiinfecciosas dentro de las cuales están, por un lado, péptidos antimicrobianos. También cannabinoides no psicotrópicos con uso como moléculas antiinfecciosas, es decir como antimicrobianos o bactericidas”.
En otras palabras, lo que buscan en el cannabis son moléculas que puedan hacer frente a bacterias resistentes a los antibióticos de uso habitual. Es decir, vías alternativas, en este caso vinculadas al CBD, capaces de combatir bacterias y virus de una manera más efectiva y alternativa a los antibióticos.
Quiénes participan de las investigaciones
Las diferentes investigaciones en torno a las propiedades medicinales del cannabis que se desarrollan en la UNAHUR involucran a docentes; investigadores/as y estudiantes avanzados que, a través de un sistema de pasantías, dan sus primeros pasos en el mundo científico.
Más precisamente, el equipo científico del LABYM es conformado por Investigadores/as del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), becarios doctorales CONICET, Investigadores UNAHUR, Técnicos de la Comisión de Investigaciones Científicas de la Provincia de Buenos Aires (CIC) y estudiantes avanzados de la UNAHUR, todes bajo la dirección del Dr. Paulo Maffia.
Por otro lado, se trabaja de manera articulada con un equipo compuesto por profesores/as y estudiantes de la Tecnicatura Universitaria en Viverismo, dirigido por la Lic. Clara Cerrotta. Este último grupo es el encargado de diversas tareas: siembra, preparación de sustratos, riego, y control de plagas y enfermedades.
En torno a la fluida articulación entre distintos equipos, Cerrota lo describió como una dinámica propia de la casa de estudios: “la UNAHUR no solo ofrece carreras de pregrado, grado y postgrado, sino que también se desarrollan vinculaciones con la comunidad, con extensión o, como es en este caso, investigación” explicó.
Lo último en torno al cannabis
Así como la Universidad de Hurlingham, distintos sectores ven potencialidad en el uso de cannabis. Un ejemplo es el II Congreso Internacional de Cannabis y Cáñamo, que se llevó adelante el pasado 24 y 25 de agosto, donde se debatió sobre el posible futuro productivo de la industria cannábica.
Por otra parte, hace poco tiempo también se estableció la Mesa Estratégica de Cannabis medicinal y de Cáñamo industrial, a partir de la Resolución 454/2022, con objetivo de acompañar el desarrollo de la nueva cadena productiva.
En esta línea, en mayo se promulgó la Ley 27.669 que establece el marco regulatorio para la inversión pública y privada en toda la cadena del cannabis medicinal y cáñamo industrial.
De todos modos, aún queda mucho por legislar: las persecuciones a cultivadores aún no terminaron y el uso de cannabis con fines recreativos todavía ni siquiera forma parte de la discusión.