Este miércoles 17 de agosto habrá una gran movilización de organizaciones sociales y sindicales en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Por un lado marchará la Unidad Piquetera; y por otro lo harán la Confederación General del Trabajo (CGT), la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) y la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP).
Los principales objetivos de la convocatoria son reclamar un aumento salarial y cuestionar los niveles de inflación. Con diferentes planteos políticos y gremiales, las organizaciones de trabajadores se congregarán en las calles porteñas en un momento de profunda inestabilidad económica.
Movilización por salarios dignos
Si bien el motivo de la movilización es el mismo, hay matices y, en algunos casos, sustanciales diferencias que conducen a que la movilización sea doble.
Por un lado, la Unidad Piquetera y otros gremios de izquierda opositores al Gobierno, marcharán hasta la Casa Rosada. Uno de los movimientos que estará presente este miércoles es Libres del Sur Territorial. En el Plenario del Sindicalismo Combativo diversas organizaciones remarcaron la necesidad de fortalecer la lucha y convocaron a la centrales sindicales a “romper la sumisión al gobierno ajustador y al FMI (Fondo Monetario Internacional)”.
“Se han olvidado de sus bases. Más de la mitad de los trabajadores cobran un salario de miseria y Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner han cedido el gobierno a Massa para profundizar el ajuste sobre la clase trabajadora”, expresaron desde la organización.
Respecto al destino de la marcha, el titular del Polo Obrero, Eduardo Belliboni, cuestionó a la CGT, que se dirigirá hacia el Congreso de la Nación. “Hacen una movilización para descomprimir la bronca popular. Van a dar una vueltita por el centro”, expresó.
En este sentido, el dirigente piquetero reforzó: “Nosotros en cambio vamos a la Plaza de Mayo a levantar los reclamos que tienen que empezar por el salario, los reclamos de la clase obrera”.
Una lucha de larga data
Cabe mencionar que la Unidad Piquetera viene de continuas jornadas de lucha, incluyendo acampes en Plaza de Mayo, en reclamo de una reunión con Sergio Massa. El ministro de Economía no los atendió, aunque sí funcionarios de la tercera línea de la cartera y de Desarrollo Social, pero sin alcanzar un acuerdo. La organización reclama un bono de 20 mil pesos, el aumento de los salarios y la apertura de las inscripciones en el Potenciar Trabajo.
Entre sus demandas, los gremios de izquierda llaman a “un paro general y un plan de lucha para enfrentar el ajuste de los Fernández y de su nuevo superministro”; y responsabilizan enteramente al gobierno de la realidad económica.
En este sentido, señalan que “es el primer formador de precios”, destruyendo los ingresos de trabajadores y jubilados. Además, adelantan otra movilización para el próximo lunes 22, cuando se reúna el Consejo del Salario.
La postura de los gremios alineados al Gobierno
La CGT, la CTA y la UTEP concentrarán el mismo miércoles a las 17 en la Plaza de la República, en la intersección de las avenidas 9 de Julio y Corrientes, para marchar hacia el Congreso de la Nación.
La CGT convocó a la movilización bajo la consigna “Hoy más que nunca, primero la Patria”. La depresión de los salarios es notable y la conducción de la principal central obrera del país está preocupada por la propuesta del gobierno de lanzar un bono generalizado; en lugar de continuar las paritarias libres para recomponer el salario.
Sin embargo, el gastronómico Luis Barrionuevo quiere darle margen político a Sergio Massa. En este sentido, opera por medio de Carlos Acuña y el mercantil Armando Cavalieri para que se levante la marcha. Hace tan solo 15 días la CGT respaldó la designación del nuevo ministro.
Por otro lado, el Frente Sindical para el Modelo Nacional conducido por Pablo Moyano, que ocupa una silla en el triunvirato de la CGT, se manifestó a favor de la movilización. “Será la primera de muchas”, declaró el referente camionero.
En esa misma línea, la CTA liderada por Hugo Yasky formará parte de la jornada de lucha. Según declaraciones del sindicalista docente, la movilización será contra “los devaluadores, los especuladores y ajustadores”.
Diferencias sobre reclamos y responsabilidades
Tanto el moyanismo como la CTA y la Corriente Federal de Trabajadores (CFT) indicaron estar a favor del bono o las sumas fijas para los trabajadores que propuso Massa. “Tal alternativa lo que va a generar es que aquellos compañeros de organizaciones gremiales que perciben los salarios más bajos sean beneficiados», destacó Moyano.
También se permitió cuestionar a “los Gordos”, quienes están en desacuerdo con la iniciativa. “No sé por qué hay compañeros que lo rechazan. Habría que preguntarles a ellos. Tendrán sus razones”, expresó.
El comunicado de la CGT explica que la movilización es por “un plan antiinflacionario” y contra la “especulación” para “evitar que al ajuste lo paguemos todos”. La CTA, por otra parte, hizo énfasis en iniciar un proceso de movilizaciones para que el pueblo trabajador construya una agenda de justicia social.
En cambio, Moyano sí deslizó una crítica al gobierno nacional. “Vemos que el gobierno no tiene esa dureza y fortaleza para sentarlos en una mesa (a los empresarios) y decirles ‘déjense de joder y de robarle la comida de la mesa a los argentinos’”, manifestó.
También la UTEP formará parte de la movilización llevando las reivindicaciones de Tierra, Techo y Trabajo. “Queremos dar un mensaje claro a la dirigencia política, empresarial y de los sectores productivos del país”, dijo a Página 12 Gildo Onorato, secretario gremial de la organización.
Asimismo, Esteban “Gringo” Castro mostró molestia sobre la propuesta gubernamental de auditar a los movimientos sociales por los planes sociales. “Tienen mucho apuro para auditar a los que pasan hambre; ojalá algún día nos pongamos de acuerdo en auditar a los que se la llevan del país”, planteó el secretario general de la UTEP.