El 17 de marzo de 1992 a las 14:50 horas, una camioneta Ford F-100 cargada con explosivos impactó en el edificio de la Embajada de Israel en Argentina, ubicada en la calle Arroyo 910 y 916 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Según el organismo atacado, el atentado dejó un saldo de 29 muertes y más de 200 personas heridas. Sin embargo, no quedó ningún culpable ni sospechoso por el hecho.
En conmemoración a las víctimas del primer atentado terrorista en el país, una ambulancia pasa cada año a esa hora por la calle Arroyo y hace sonar su sirena. En el marco del 30° aniversario, familiares y sobrevivientes realizarán este jueves a las 14:30 horas un acto central en Arroyo y Suipacha. El mismo tendrá como objetivo homenajear a las víctimas y culminará con música en español y hebreo.
El 17 de marzo de 1992, un atentado terrorista contra la Embajada de Israel en Buenos Aires dejó 29 muertos y más de 200 heridos.
— Israel en Argentina (@IsraelArgentina) March 14, 2022
30 años después, las huellas del terrorismo siguen sobre nosotros. 🇦🇷🇮🇱
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Por otro lado, visitará el país una comitiva del Gobierno Israelí encabezada por el vice primer ministro de Justicia, Gideon Sa´ar y el Director Adjunto de la Cancillería Israelí para América Latina y El Caribe, Jonathan Peled.
Además, está previsto un encuentro con el presidente Alberto Fernández y dirigentes de la oposición; así como una reunión con el Presidente de la Cámara de Diputades de la Nación, Sergio Massa y quienes presiden los bloques de la Cámara Baja.
El día en que la Argentina estuvo en boca de todes
El 17 de marzo de 1992, la Sede Diplomática y la Embajada de Israel se vieron comprometidas por el impacto de las bombas. Se supo que la camioneta se le compró a un fotógrafe policial; y que la transacción se realizó con un documento falso a nombre de Ribeiro Da Luz, quien aparentemente se había inmolado.
Pese a esto, 30 años más tarde aún no se sabe en dónde se cargaron los explosivos ni dónde estuvo guardada la F100. El ataque fue perpetrado durante la presidencia de Carlos Menem, a quien se lo acusó de “desviar la causa”; como también de haber enviado en 1991 busques a Estados Unidos, en el marco de la Guerra del Golfo con Irak.
En la actualidad, el sitio en donde funcionaba la Embajada se conserva como la Plaza de la Memoria, inaugurada en el 2000. Sólo quedó uno de los muros originales del edificio y allí se encuentra una placa recordatoria con los nombres de todas las personas fallecidas.
La investigación no tuvo avances, sospechoses ni condenades por el ataque terrorista, lo que ha provocado malestar a las familias de las víctimas y a les sobrevivientes del atentado de aquel 17 de marzo.
Dos años más tarde, la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) sufrió un atentado de las mismas características que la Embajada de Israel. La sospecha cayó sobre Imad Fayez Moughnieh, Jefe de Seguridad Especial del Grupo Libanés Hezbollah, quien era el único identificado como partícipe en el 2008.
El fallo de la causa confirmó que el atentado a la sede diplomática israelí había sido cometido por la Jihad islámica, el brazo armado del Hezbollah; y que se realizó con explosivos puestos en una Ford F-100.
El Hezbollah en la mira: ¿quiénes integran este grupo?
Hezbollah significa “partido de dios” y es una organización política militar que surgió en 1982 en el Líbano, como respuesta a la invasión de Israel en su territorio. Está compuesta por musulmanes Chiítas y es considerada una organización terrorista por Israel; Estados Unidos; la Unión Europea; la Argentina y el Consejo de Cooperación del Golfo.
Este grupo terrorista asesina civiles inocentes, trafica drogas, lava dinero y explota al pueblo del Líbano. Además, está en constante guerra con Israel por el territorio; y se lo acusó de ser responsable, junto con Irán, de los atentados a la Embajada de Israel (1992) y a la mutual judía AMIA (1994) en la Argentina.
En total se le atribuyen nueve atentados internacionales, tales como la colocación, en octubre de 1983, de bombas suicidas a marinos de los Estados Unidos y el ejército francés de Beirut; y el poner una bomba, en septiembre de 1984, en la Embajada estadounidense en Beirut.
Asimismo, a fines de 1984 hubo un secuestro del vuelo KU 221 en la ruta de Kuwait a Pakistán; y, al siguiente año, el mismo hecho, pero esta vez del vuelo TWA 847 que se dirigía desde Atenas a Roma.
En los años 80 secuestraron personas en el Líbano; en marzo de 1992 realizaron el atentado a la Embajada de Israel en Argentina, y dos años más tarde a la sede de la AMIA. Ya en 1996 hubo un bombardeo a las torres Khobar en Arabia Saudita; en 2006 realizaron el secuestro de dos soldados de las Fuerzas de Defensa Israelí; y, por último, en julio de 2012 explotaron en Bulgaria un autobús en el que viajaban turistas israelíes.