De la mano del reconocido paleoartista José Luis Gómez, el museo itinerante Paleorama recorre la Argentina con la finalidad de promulgar y garantizar el acceso a los resultados de la investigación paleontológica. En este sentido, difunde la ciencia a personas que por lo general están alejadas de los museos y de la historia que hay en ellos.
Por este motivo, Gómez busca dar un aspecto más realista y traer a la vida a especies de la prehistoria junto con sus paisajes. Todo esto ocurre en su propio taller en la localidad bonaerense de Don Torcuato.
El museo busca abarcar y nutrir en conocimiento a sus visitantes, por eso mismo cuenta con muestras; conferencias; contenido teatral y actividades didácticas adaptadas a cada edad según los niveles educativos. Las tres muestras de las que disponen son Dinosaurios Argentinos, Pampa Fósil y Evolución Humana, las cuales son presentadas de manera gratuita a partir de citaciones de los distintos niveles estatales. La primera de ellas se puede visitar en Tecnópolis.
Función social del museo itinerante
“Es muy importante la función social que cumple el museo al promover”, manifestó a Télam el paleoartista José Luis Gómez; y destacó que garantiza “el derecho de todos los chicos de cada pueblo del país a tener acceso a todos estos conocimientos, a esta curiosidad por la naturaleza y saber que hay realidades que van más allá de la lucha cotidiana”.
Además, comentó que el acceso a estas muestras es una gran oportunidad de “despertar vocaciones”. Es decir, que vayan más allá de “abogados, médicos o farmacéuticos y que pueden estar ligados tanto al arte como a la ciencia”.
El ilustrador científico y escultor Jorge González explicó: “Lo más increíble es ver por primera vez, después de millones de años, cómo se veía un animal extinto que no lo vio nunca nadie antes”. Además, mencionó que “los dinosaurios tienen algo maravilloso a nivel pedagógico: ayudan a ampliar la mente de los chicos, cautivan su imaginación”.
El proceso de reconstrucción paleontológica
En varios casos, les paleoartistas comparan a los animales y ambientes prehistóricos con los actuales; especialmente con reptiles y aves, cuya morfología y colores suelen ser un motivo de inspiración.
Para la ilustración y para la escultura, es necesario primero realizar un profundo estudio morfológico del ser a reconstruir. Esto se refiere tanto los aspectos internos como a su apariencia externa, con respecto a los fósiles y los conocimientos que haya, se los integra luego en su hábitat original, con el clima, la vegetación, la fauna y el terreno que los rodeaba.
Cabe mencionar que la Argentina es el cuarto país en poseer una importancia en yacimientos paleontológicos. Debido a eso su cantidad de hallazgos es alta, no así su difusión, de ahí la importancia de Paleorama.
En este sentido, Gómez y González adelantaron: “Tenemos un montón de historias por contar aún”; por ejemplo, “muchos animales que ya sabemos que existieron pero que todavía no nos han convocado para ilustrarlos y darlos a conocer”. Al respecto, detallaron que “hay un trabajo previo con los fósiles que están pendiente en las instituciones y que es importante que lo avancemos”.