Vecinos organizados del distrito bonaerense de Vicente López realizan su reclamo ante la posible construcción de nuevas torres en la ciudad.
La normativa local establece en su Código de Ordenamiento Urbano la prohibición de edificios de gran altura en sectores residenciales. Sin embargo, esos proyectos son llevados a cabo mediante un régimen de excepciones que sanciona el Honorable Concejo Deliberante.
Mediante esa modalidad, se han aprobado la construcción de más de 500 torres desde el año 2011. Fue en aquel entonces cuando Jorge Macri asumió la intendencia. Desde que dirige los destinos de la ciudad y controla la mayoría del legislativo local, han proliferado esos emprendimientos inmobiliarios.
La acción vecinal
Los vecinos rechazan esas iniciativas porque alteran la planificación urbana. El incremento poblacional afecta el tránsito en esos sectores, satura de vehículos los pocos espacios disponibles para estacionar y además, afectaría el medio ambiente. Polución visual y colapso del suministro de agua son algunas de las consecuencias indeseadas. Para evitar esos efectos, la comunidad instaló en diversos puntos del barrio de Olivos varias mesas para recabar firmas.
Hasta ahora han reunido más de 2500 adhesiones con el anhelo de evitar el avance de nuevos proyectos edilicios. Además de eso, han iniciado expedientes en la Defensoría del Pueblo como así también realizan una intensa campaña en medios de difusión locales. Con esas iniciativas aspiran que los ediles respondan favorablemente a sus inquietudes y no otorguen más permisos a esos proyectos edilicios.
Para conocer en detalle la problemática edilicia, Nota al Pie conversó con Luciano Silva, residente de Vicente López y presidente del Movimiento Libertario Republicano.
-¿Cuál es la problemática que hay en Vicente López con la construcción de torres de gran altura?
-Es un problema no menor, y además, no es actual. Se viene extendiendo desde la antigua gestión del ex intendente Enrique “Japonés” García (Frente para la Victoria). Es un hecho que en el municipio las construcciones generan en los barrios numerosos problemas. Por ejemplo el colapso de la infraestructura de agua, cloacas y energía eléctrica ante la falta absoluta de planificación urbana.
El municipio viene creciendo y la infraestructura ha quedado completamente desactualizada. Durante la gestión de Jorge Macri hemos presenciado algunas obras, que no fueron suficientes y nada más fueron un paliativo ante toda la problemática y un despilfarro de recursos del contribuyente.
-¿De qué modo afecta a la sociedad?
-Se generan reclamos por perder privacidad, falta de estacionamiento y las consecuencias por el colapso de la infraestructura en el municipio. Aunque algunos reclaman también que debido a la voracidad de las empresas constructoras, termina afectando a la “Identidad del Municipio”.
-¿Cuáles son las excepciones que otorga el municipio?
El municipio autoriza excepciones al Código de Ordenamiento Urbano firmadas por el Concejo Deliberante y que terminan incumpliendo normas del mismo. Por otro lado, la municipalidad no responde a los reclamos de los vecinos ni envía inspectores a controlar las obras.
-El 10 de diciembre asumen nuevos concejales. ¿Cómo quedarían repartidas las fuerzas en el Concejo Deliberante? ¿Podría ello incidir en lo que se viene haciendo con las autorizaciones para construir torres?
-Para el 10 de diciembre renovarán siete concejales electos de Juntos, tres del Frente de Todos y otros dos de Avanza Libertad. De ese modo, Juntos seguirá con mayoría, pero hago una observación con los dos concejales que ingresaron del “rejunte Avanza Libertad”. Uno de ellos responde y fue apoyado por el ex concejal Marcelo Chocarro y el otro pertenece al espacio de Republicanos Unidos que no deja de responder a Juntos por el Cambio y a Ricardo López Murphy.
El ha sido electo como Diputado Nacional en CABA y ahora por lógica estará nacionalizando a su espacio, con lo cual generan muchas dudas sobre a quién responderán en el futuro.
-Los permisos que se otorgan para permitir torres de gran altura ¿considera que se otorgan porque desde las autoridades hay una convicción de que esas construcciones son apropiadas o usted sospecharía que la corrupción podría ser el factor que genera esos permisos?
-Debemos ser conscientes que desde el vamos, existen irregularidades en las excepciones al Código de Ordenamiento Urbano. Una de las tantas irregularidades es que no respetan el Factor de Ocupación del Suelo (FOS). El FOS por Código es 0,6. Eso significa que se puede ocupar con construcción sólo el 60% de la superficie de un terreno. También se presentan irregularidades por la altura permitida según cada zonificación o el uso en la zona. O sea, posiblemente exista la corrupción por parte de algunos concejales que se dejan sobornar o sencillamente exista algún arreglo interno de “lealtad partidaria”.
-Diversas agrupaciones vecinales se oponen a la construcción de torres, ha habido manifestaciones. ¿Por qué cree que las autoridades no se han hecho eco de esas manifestaciones?
-Trataré de ser objetivo con mi opinión; no podemos pasar por alto el problema real de falta de viviendas y que la construcción genera trabajo genuino además ayuda como industria en activar sectores de la economía. El punto es que deben respetar las zonificaciones y no pasar por alto las reglamentaciones que están establecidas aprobando excepciones con irregularidades. ¿A qué voy con esto? Es que las autoridades en Vicente López han visto al oficialismo ser respaldado por los vecinos en las urnas de manera contundente. Eso todavía demuestra que para la gran mayoría de los vecinos, o lo toman como un tema menor o incluso con buenos ojos. La realidad es que todavía son una minoría los que realizan estos reclamos por las excepciones.
-¿Cual es la postura suya frente a la construcción de torres en altura?
-Mi posición como liberal es que no podemos ir en contra del progreso y del desarrollo, evidentemente los tiempos cambian y la necesidad de viviendas también es una realidad. Además, la construcción genera trabajo genuino y podría ser parte de una reactivación económica. El problema es que no existe un proyecto responsable y superador. Actualmente terminan aprobando excepciones de forma irregular y con una infraestructura desactualizada. Nuestra propuesta es llevar el desarrollo y el progreso para la parte oeste de nuestro municipio que es bastante descuidada.
La idea es crear nuevas zonificaciones para la construcción horizontal donde se haya realizado un trabajo previo, generando la infraestructura adecuada. El municipio de Vicente López es uno de los que más recaudan en el país y que registra superávit fiscal. Aún así, no les tiembla la mano en aumentar las tasas e impuestos municipales como el AVL hasta en un 100% en plena recesión económica. Inclusive en plena pandemia y con las cuarentenas, donde la economía de los vecinos fue terriblemente afectada. Si existe un mínimo de lógica en cobrar tasas e impuestos es que los mismos vuelvan al contribuyentes en bienes y servicios de calidad.
En el caso de Vicente López, hoy le devuelven “migajas” a los vecinos. Creo que no hace falta aclarar el despilfarro de recursos y el mal manejo de los gastos de los políticos de nuestro municipio, y vale mencionar también la sospecha de corrupción. Hoy los concejales que se oponen a las excepciones son los del Frente de Todos. Es decir, los mismos que antes las defendían durante la gestión del ex intendente Enrique García que formó parte de la alianza kirchnerista Frente para la Victoria. Hoy lo que vemos claramente es una pelea por el “kiosquito” de la casta política en Vicente López.